¿Es correcto mentir?, esa es una pregunta que ha estado dentro de mi cabeza y de la de diversos filósofos en la historia de la humanidad.
Cada uno de los individuos ha intentado encontrar la respuesta a la pregunta que ahora se me presenta.
Unos creen que mentir es un vil delito que es sentenciado horriblemente por la fuerza de dios.
Pero ¿realmente es tan malo?
Unos creen fielmente que existen cosas que jamás deben ser descubiertas o conocidas, desde tesoros escondidos, verdades sobre los gobiernos o incluso sobre famosos actrices.
Muchas personas creen fielmente que mentir es tan natural como respirar para nosotros los humanos y otros de igual forma creen que mentir es malo y es horrible, incluso cuando ellos mismos mienten, hipócritas.
Yo sinceramente apoyo el pensamiento de la naturaleza de mentir, es normal que una persona mienta, es normal que una persona engañe, puede ser por diversos motivos, desde ocultar un terrible crimen, salvar la vida de alguien con esa mentira, o simplemente para poder seguir siendo parte de un grupo social.
Las mentiras son tan naturales dentro de nuestro ser y por obvias razones dentro de nuestra sociedad.
La sociedad esta llena de mentiras, y yo como todo miembro activo de la sociedad he mentido.
Desde que entre a SAO mi vida no ha cambiado realmente.
Seguí mintiendo, engañando, estafando, fingiendo cosas que no era y hubo veces en las que ni siquiera tuve que mentir, sino dar vueltas alrededor de la verdad, como un cobarde, como un miedoso, como un humano.
Sin embargo, me atrevo a decir que mi mayor mentira no fue mala, en cambio creo que fue totalmente necesaria para garantizar mi propia felicidad, para mantener el status quo en mi vida y en mi relación con Asuna.
Porque esa es una hermosa mentira, una mentira piadosa.
.
.
.
Apenas regrese al mundo real procedí a retirarme el amusphere, inmediatamente me levante y voltee a observar a Aki Natsuki quien se encontraba mirándome con una revista en las manos.
Una vez se aseguro de que estaba completamente bien ella procedió a retirarme todos los aparatos conectados a mi cuerpo, y una vez hecho eso no dude en cambiarme y despedirme de ella.
Mientras salía del edificio le mande un mensaje a Kikuoka para informarle que finalmente había salido.
Una vez hecho guarde mi teléfono, tome mi confiable motocicleta y tome rumbo para mi casa.
Solo fui capaz de volver a sostener mi teléfono una vez estaba acostado sobre mi cama en mi cuarto.
Mi cabello mojado debido a la reciente ducha que me había dado mojo la almohada en la cual descansaba mi cabeza.
Pero poco me importo, de alguna extraña manera me sentía cansado y no estaba seguro de porqué.
Auténticamente me sentía algo confundido por eso, la realidad virtual al ser justamente eso, algo virtual no cargaba de ningún tipo de esfuerzo físico motivo por el cual era imposible que me sintiera tan cansado.
Sin embargo decidí no tomarle importancia y concentrarme en algo más importante.
La imagen del Executor era horriblemente pobre, una dulce y delgada apariencia de chica no era capaz de intimidar a nadie y menos en un juego de disparos estilo cyber, asique mi apariencia natural no era para nada buena.

ESTÁS LEYENDO
Pecador
Fiksi Penggemar¿Es posible ser la misma persona después de arrebatar una vida?, ¿todo podrá ser como antes? Para una existencia solitaria, el finalmente tener algo con lo que aferrarte te da la necesidad de tenerlo, de protegerlo y atesorarlo por sobre todas las c...