ஜ̈Love Me;; Hyunmin

Comienzo

;;

ー¿Qué significa estar casados, Hyunjin?ー Seungmin vio la foto de su boda, aquella que permanecía postrada en una pared visible para todo aquel que entrara su hogar.

Se veían tan felices, con unas grandes sonrisas impregnadas en sus rostros. Seungmin se encontraba con un traje perfectamente blanco y una corona de flores en su cabellera. Hyunjin tomaba su mano mientras le colocaba el anillo en el dedo anular.

Y pensar que esa foto era de hace tan solo tres años atrás. Se casó muy joven, tan solo veintitrés años. Se sentía lo suficientemente seguro para entregarle su vida a Hyunjin, lo amaba y lo quería con todo su ser. Hyunjin aparentaba lo mismo.

¿En qué momento todo comenzó a salir mal?

¿Acaso ya no era bonito? Él nunca lo fue, siempre conectado a cables, con marcas en todo su cuerpo y cicatrices que ningún cirujano plástico podía arreglar.

El día de su boda fue el día más feliz de su vida, pero también uno de los más tristes. En ese tiempo el cáncer había "desaparecido" por un tiempo, llevaba más de tres años sin mostrar algún signo de malestar, su cabello crecía con normalidad y su cuerpo se estaba recuperando.

Todo estaba perfecto, Hyunjin estaba más que feliz y él quería llorar todo el tiempo. Pero todo salió mal después de la fiesta, al parecer a él no le tocaba sufrir este día, sino, a Hyunjin.

La madre de Hyunjin era un milagro, nadie pensó que viviera por mucho tiempo más de ser diagnosticada, pasaron casi diez años y ella permanecía viva. Era el deseo y la esperanza por vivir, siempre había sido eso, ver a su Hyunjin casarse era uno de sus sueños.

La madre de Hyunjin logró estar en su primer día de preparatoria, su graduación y su boda como siempre había soñado, pero el tiempo se le había acabado.

Al día siguiente de la boda la madre del mayor fue internada por un repentino desmayo que trajo consigo una serie de malestares.

El cáncer se había extendido a lo largo del mediastino, afectando principalmente los pulmones y la vía respiratoria. 

El cáncer había sido sigiloso, pero como decía la madre de Seungmin: las tragedias suceden en silencio. Y eso mismo había pasado, un mes después de que la madre de Hyunjin fue internada murió en los brazos de su esposa.

Hyunjin quedó derrotado.

Era su madre y tener la esperanza de que pueda vivir más tiempo como ya lo había hecho desde hace mucho, había creado una esperanza soñadora en Hyunjin, pensó que su madre de se quedaría durante mucho más tiempo. Hyunjin sabía, pero no lo quería admitir, su madre no era para siempre.

Desde ese momento las cosas cambiaron. Y no para bien, pasaron casi seis meses de la muerte de su madre y Hyunjin no mostraba ningún signo de que pase algo raro, pero todo paso una noche en dónde por casualidad Seungmin se acerca al pequeño balcón que tenía en departamento recién adquirido por la pareja que se dio cuenta que las cosas no estaban bien.

Hyunjin abrazaba a otro chico, uno que no era él. Al parecer el joven chico lloraba en sus brazos y arrugaba su camisa entre sus manos. Hyunjin lo acariciaba como lo hacía con él cuando tenía sueño.

Parecía consolarlo.

Seungmin pudo sentir su mundo caer y un dolor aún las fuerte que el cáncer.

Traición, una simple palabra que arruinaba vidas.

Las lágrimas llegaron al igual que las peleas. Seungmin nunca le dijo el porque de las peleas, pero siempre eran porque Hyunjin llegaba tarde y a veces ni siquiera se aparecía en todo el día

Seungmin sabía la respuesta, sabía dónde se estaba quedando y aunque su esposo diga que era por el trabajo, él siempre lo espiaba por el balcón de su casa, confirmando así su sospecha.

ー¡Dime Hyunjin! ¡¿Qué significa estar casados?!ーsu voz tembló. Miró una vez más la bonita foto de su boda y cerró los ojos fuertemente.

Sus pies no tuvieron la suficiente fuerza para sostener su cuerpo y simplemente cayo al suelo golpeándose la mejilla en el proceso. Era un inútil, un joven enfermo sin posibilidad de vivir y ser feliz.

Hyunjin había llenado su mundo de colores, le había dado una esperanza. Le enseñó a amar y ver más allá de de la belleza.

Hyunjin lo estaba traicionando

Seungmin quería ser amado, así como cuando eran niños y Hyunjin prometió casarse con él. Quería poder estar sano y no tener que combatir con ella cada vez que se le dignaba a venir por él.

Su cuerpo ya no daba más, estaba destruido hasta las venas.

Ni las lágrimas que siempre habían sido su buena compañía lo calmaban del dolor de corazón, sin embargo ellas no querían salir. Al parecer hasta ellas ya no querían estar con él.

Odio ser así. Odiaba ser como era, tan enfermo y mendigo de amor, pero él quería vivir siendo amado no como una persona a la que solo hay que salvarle la vida porque sí.

Recuerda todas las cartas que escribía cuando era un adolescente, se las enviaba a Hyunjin, cada palabra era dedicada a él.

¿Qué había pasado?

Seungmin se recargo sobre el pequeño mueble en la sala y trato de pararse con mucho esfuerzo, sus piernas dolían y no creía poder mantenerse de pie por mucho tiempo.

Escucho la puerta ser abierta y él simplemente corrió como pudo hasta el baño, donde se dejó caer en las baldosas frías y sin color que siempre lo acompañaban cuando lloraba.

ー¡Min! Ya llegué ¿Dónde estás? Te traje los dulces que te gustanー gritó Hyunjin entrando al departamento, escuchó el sonido de las llaves y sus zapatos.

Como si no hubiera pasado nada.

Como si no hubiera roto su corazón una vez más.

Seungmin gritó en sus manos, ya no podía más, lo había visto hace unos momentos salir de la casa donde siempre estaba al salir del trabajo. Entro como si nada, como si hace algunas horas había estado con él diciéndole las mismas palabras que le decía cuando llegaba a casa.

El menor sintió sus manos mojar. No eran lágrimas.

Era sangre saliendo por su nariz.

Otra vez... Ella había vuelto.

;;

—Belu 3>