Mejores Amigos... ¿Cierto?

Capítulo 4: Eunhyuk

El día finalmente había terminado.

Leeteuk nos dijo que nos fuéramos a dormir temprano, así que eso fue lo que hice.

Ducharse luego directamente a la cama.

 Arrastré mis pies perezosos a mi cama y me acosté en el centro. Mirando hacia el techo blanco, mi mente estaba en blanco. Estaba demasiado exhausto como para pensar.

Era como si mi cuerpo solo dijera "dormir, dormir, dormir" una y otra vez.

Agarré la sábana y la puse sobre mí. A veces pienso que este sentimiento es tan bueno como estar en el escenario. Bailando, cantando, rapeando, fanáticas vitoreando mi nombre...

Dormir, tan tranquilo después de un largo día.

Al menos... por el momento.

—Eunhyuk, estás despierto, ¿verdad? —esa voz.

 —Donghae... —gruñí mientras volteaba mi cuerpo hacia la dirección de su voz.

Mis ojos se negaron a abrirse.

 —¡Oh Dios! Quería preguntarte algo. 

—Mañana —dije rápidamente para callarlo.

—Bien, pero ¿puedo quedarme? 

—Mmgh —fue lo único que salió. Estaba demasiado cansado para pensar. Todo lo que quería hacer era dormir. 

Cuando sentí que Donghae se metía en mi cama, logré abrir un ojo.

Todo lo que vi fue su rostro lavado. 

—Buenas noches, Hyuk —dijo con calma mientras me miraba.

Una vez que cerré ese ojo, me desmayé nuevamente.

Mi cuerpo se despertó solo. Sin abrir los ojos, me di cuenta de que el sol brillaba a través de la ventana. Ya era de mañana.

Tan relajado y cálido...

Estaba tan cómodo que ni siquiera quería mirar el reloj.

Debe ser temprano ya que Leeteuk todavía no parece estar despierto.

Una vez que abrí los ojos, mi mente estaba completamente despierta.

Donghae no estaba a unos centímetros de mí como lo estaba anoche. Ni siquiera una pulgada. Estaba recostando mi cabeza sobre su brazo extendido y cuando levanté la vista vi su suave barbilla.

¡¿Cómo pasó esto?!

Mi cuerpo rígido se movió rápidamente mientras me sentaba. Miré a Donghae que estaba inocentemente durmiendo. Estaba en la misma posición en la que recuerdo que estaba antes de que me durmiera. Como... No se movió en absoluto. 

¿Eso significa que... fui yo quien se acercó a él? 

¡No no! Probablemente me jaló como suele hacer. 

Pero nos estábamos cara a cara... hubiera sabido si lo hubiera hecho...

Miré el reloj para posiblemente distraerme. Ya casi era hora de que Leeteuk nos levantara a todos. Diez minutos más.

Volví a mirar a Donghae que todavía dormía tranquilamente. Traté de recordar lo que pasó anoche. Donghae entró, dijo que quería preguntarme algo, y luego nunca se fue.

Esperen. ¿Qué quería preguntarme tan tarde? Incluso me despertó. Tampoco recuerdo haber dicho que podría quedarse conmigo. Sin embargo, eso nunca lo detuvo antes.

Ayer, mientras practicaba, dejé de lado lo que sucedió la noche anterior. Había terminado de pensarlo todo. Así es como es Donghae. Además, él es mi mejor amigo. Él se siente cómodo a mi alrededor como yo lo hago a su alrededor... ¿Verdad?

Pero ahora, estoy tan confundido como antes. 

¿Por qué solo soy yo?

Y lo más importante... ¿Por qué reacciono de esta manera? 

Miré el reloj otra vez. Ocho minutos más.

Me acosté de nuevo, pero esta vez en mi almohada. Como estábamos cara a cara, no pude evitar mirarlo. 

Él es muy guapo...

No es de extrañar por qué tiene tantos fanáticas. Lo tiene todo. La apariencia, el cuerpo, la personalidad, la voz. 

Pero de todos modos, todavía tengo curiosidad por algo.

—Donghae —dije mientras me acercaba para empujarlo. 

Soltó un suave gemido seguido de un, —¿Mmmmm? 

—¿Qué querías preguntarme? —pregunté vacilante.

—¿Eh...?

Vi como estiraba su cuerpo recién despertado y abría los ojos. 

—¿Qué querías preguntarme? —repetí.

—Oh —sonrió tímidamente—. Quería saber si te sientes solitario teniendo una habitación para ti solo. ¿Sabes, sin Kangin? —me miró, todavía mostrando su suave sonrisa.

Solo lo miré por un momento. La pregunta fue tan aleatoria que me sorprendió. Especialmente desde que han pasado meses desde que Kangin se fue. 

—Uh... —dije en un tono confundido—. Supongo... que extraño mucho a Kangin. Aquí está tranquilo la mayor parte del tiempo. 

—¡Entonces te visitaré más! —dijo con orgullo. La sonrisa en su rostro cambió a su sonrisa habitual. 

Inconscientemente le devolví la sonrisa. Dije un "está bien" cuando rompí el contacto visual con él y miré la sábana. 

—¿Leeteuk hyung todavía no nos despertó? —preguntó. 

—Todavía no, pero creo que lo hará pronto.

Donghae extendió sus brazos hacia mí. —¡Todavía tenemos tiempo para abrazarnos! —dijo felizmente mientras reía suavemente.

Parpadeé hacia él sorprendido, pero rápidamente tiré mi almohada a sus brazos.

Me hizo sonreír de nuevo. 

Ni siquiera puedo decir si está bromeando.

Sin embargo... me siento tan relajado.