Mejores Amigos... ¿Cierto?

Capítulo 29: Donghae

—Quiero dormir —dijo.

Aunque estaba en mis brazos, su cuerpo se sentía rígido e incómodo.

Cometí un error.

—Ah... Está bien... —dije mientras lo veía meterse debajo de las sábanas mirando hacia la dirección opuesta.

Me puse de pie y caminé hacia el otro lado de la cama. Eunhyuk estaba tan callado que todo lo que escuché fue el sonido de él arrastrándose ligeramente en las sábanas.

Soy un idiota. No estoy tratando de encontrar excusas, pero supongo que hice eso porque todavía estaba disfrutando el momento. Eunhyuk y yo nos habíamos riendo, luchando y pasándola bien... Supongo que estaba pensando más en eso que en cualquier otra cosa. Sabía que Eunhyuk no quería que se lo contara a nadie y no lo hice. En cambio, les mostré. No a propósito, pero... todavía lo hice. Desde el momento en que miré a los ojos de Eunhyuk, supe que estaba aterrorizado.

Eso me asustó más que nada.

Ni siquiera lloró.

Lo miré una vez más antes de salir de la habitación. Necesitaba explicar lo que sucedió porque no tengo idea de lo que Kyuhyun les está diciendo. Camino hacia la habitación contigua, recojo el zapato que Kyuhyun dejó caer y noto la luz encendida debajo de la puerta. Empujándolo lentamente, veo a Yesung y Ryeowook sentados en la cama de Ryeowook en silencio, mientras Kyuhyun solo se quedó en el medio de la habitación. La bisagra chirrió cuando abrí la puerta un poco más y seis ojos se centraron intensamente en mí. 

—Finalmente —Kyuhyun suspiró—. Te estábamos esperando.

Me siento en la cama de Kyuhyun y miro hacia abajo. No sé por qué, pero no podía mirarlos a los dos en ese momento. Tal vez fue porque tenía miedo.

—Estoy confundido —dijo Yesung en voz alta.

—Ya me lo había imaginado —Ryeowook sonrió.

Bien, como pensé. Es lo mismo que con Sungmin.

  —¿Qué les dijiste? —me volví hacia Kyuhyun y él me quitó el zapato con fuerza.

—Nada realmente —se encogió de hombros.

—Chicos, lamento no haberles dicho...

—Lo hemos visto durante años —dijo Ryeowook y de repente me sorprendió. Yesung asintió, pero algo parecía fuera de lugar. No podía decir lo que estaba pensando.

—Genial, ¿podemos irnos a dormir? —preguntó Kyuhyun en un tono algo molesto.

—¿Lo saben los demás? —preguntó Yesung, ignorando a Kyuhyun.

—Uhm... Sungmin y Leeteuk también lo saben...

—¿Heechul? ¿Siwon? ¿Shindong?

—No lo sé...

—¿Les vas a decir?

—No estoy seguro... como que quiero hacerlo, pero no creo que Eunhyuk lo haga.

—¿Hyung? —Ryeowook se volvió hacia Yesung.

—¿Sí? —parpadeó.

—Aún no ha dicho si está de acuerdo con eso.

Ryeowook... De nuevo, ¡gracias!

—No estoy seguro...

Fruncí el ceño ante esto. Yesung es alguien a quien me cuesta entender. Sin embargo, su respuesta no me sorprendió. Al principio, pensé en él como alguien a quien realmente no le importaría, pero en este punto parece realmente incómodo.

—Por qué ustedes dos no hablan para que Ryeowook y yo podamos ir a dormir... —sugirió Kyuhyun.

—¿De qué hay que hablar? —preguntó Yesung mientras se levantaba—. Lo que ustedes dos hacen no me preocupa. Quiero decir, me preocupo por ustedes, pero... Simplemente no hagan nada para arruinar a Super Junior... —hizo una pausa y su voz se suavizó—. Es mi vida...

Su cara parecía terriblemente nerviosa. Miré a Ryeowook y a Kyuhyun que estaban sin palabras.

Lo que dijo Heechul volvía a mí. Yesung teme lo mismo. No creo que le importe que Eunhyuk y yo seamos gay. Simplemente teme que afecte a todos.

—Hyung, ven aquí —extiendo la mano y tomo su brazo. Con un gesto, salgo de la habitación del miembro más joven con Yesung y me mudo a la sala de estar vacía.

Eché un vistazo a su rostro y estaba mostrando preocupación.

—¿Qué estás haciendo? —me preguntó.

—Sé que estás preocupado...

—Claro que lo estoy. Pensé que todo lo que hicieron fue solo fanservice. Nunca esperé que fuera real.

—Bueno...

—Quiero decir, ¿qué vamos a hacer si esto sale a la luz?

—Hyung, por favor cálmate...

—¿No está preocupado Leeteuk hyung por esto?

—No lo creo... Se ha esforzado por ayudarnos.

Yesung solo me miró antes de romper el contacto visual y suspirar.

—¿Qué van a hacer ustedes dos?

—En este momento, no estoy seguro. Creo que está enojado conmigo de todos modos por lo que acaba de pasar.

—Ve a verlo. Sabes que es un llorón. 

Mis ojos se abrieron ligeramente y apareció una sonrisa. Detrás de toda la extrañeza que es Yesung, él realmente es una persona increíble. Me alegro de que sea mi hyung.

—Hyung... Gracias —dije suavemente y él me agarró la muñeca cuando comencé a alejarme.

—Solo por favor... No hagas daño a Super Junior. Todos ustedes significan todo para mí.

Asentí y él me devolvió la sonrisa. Me di cuenta de que todavía estaba nervioso, pero el hecho de que confiara en mí me dio más confianza.

Volvió a la habitación de Siwon y de él. Mientras caminaba por el pasillo, noté que todas las luces estaban apagadas ahora. Todo lo que quedaba finalmente se iba a dormir. Silenciosamente gire el pomo de la puerta de la habitación de Eunhyuk y entré. Después de cerrar la puerta, me quedé allí mirando la oscuridad.

¿Qué tengo que hacer?

O... ¿Qué quiero hacer?

Me subí a mi lado derecho habitual de la cama, puse mi mano sobre el hombro de Eunhyuk y miré su rostro dormido.

—¿Hyuk?

—Hngh... Donghae... —su cuerpo se contrajo e intentó alejar mis dedos—. Estaba casi dormido.

Oh, ni siquiera estaba durmiendo...

—Eunhyuk, arreglé todo. Lamento mucho lo de antes...

No dijo nada, pero por sus ligeros movimientos pude notar que se relajó.

Me puse debajo de las sábanas y deslice mi brazo derecho debajo de su cintura mientras el otro lo sostenía desde arriba. Cuando empuje su espalda contra mí, gimió suavemente. No me detuvo. No estoy siendo contundente. Si no quisiera que lo abrazara, podría librarse fácilmente de mí.

Lo bueno es que... no lo hace.

Dejé que mis labios tocaran suavemente su nuca y sentí incluso sus más pequeñas reacciones.

Como estaba cómodo, los dejé allí.

Y rápidamente se quedó dormido en esa exacta posición.