XVII

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- ¿Qué quiere saber?.- Se acomodó en su propia cama, apoyando su brazo en una de sus piernas y usando su mano como soporte para su cabeza.

Chaeyoung sonrió para sus adentros, sacando su libreta de bolsillo.

- Primero que todo, Tu nombre completo.- Sacó, así mismo, un bolígrafo para anotar.

- Veo que vino preparada, ¿ya tenía todo esto planeado, celadora?.- Entrecerró los ojos, dibujando una sonrisa en sus labios.

- Responde, Jennie.- Respondió, rodando los ojos.

- Kim Jennie, ese es mi nombre. ¿Algo más?.

- Edad.

- 23 años.

- ¿Tienes familia?.- Esa pregunta hizo que la piel se le pusiera de gallina, pero intentó aparentar que no había sido nada.

- ¿No quiere saber mi tipo de sangre?.- Respondió con ironía, ocultando su nerviosismo. Al ver que Chaeyoung se quedó en silencio, volvió a poner cara seria y suspiró pesadamente, estando consciente de lo que diría:

- Mi padre murió en batalla, nunca lo conocí, mi madre era científico en la base en la que crecí. Se podría decir que desde que estaba en su vientre el alto mando decidió experimentar conmigo.

Cerró los ojos, debatiendo si de verdad debía hablarle sobre aquello a la pelinegra.

- Cuando tenía unos cuatro o cinco años, empezó mi entrenamiento, casi no podía ver a mi madre, así que lloraba mucho.

》 Luego de que se dieran cuenta que no entrenaría sin que mi madre estuviera a mi lado, entró al equipo de investigación. El entrenamiento era muy pesado para una niña de cinco años, y mi madre siempre le rogaba al jefe del equipo que diera la orden de ser más gentil conmigo, pero no funcionó nunca. Un año después, mi madre se casó con el jefe de la investigación. Estaba feliz por ella, se veía feliz a su lado, nunca creí que la vería tan feliz. Después de eso, las cosas mejoraron mucho.

Un escalofrío le recorrió la espina dorsal a Chaeyoung, ella había pasado por el mismo entrenamiento, solo que sin tener una madre o una persona que velara por ella.

》 Cuando cumplí siete, ya le había agarrado el ritmo al entrenamiento, mi madre y todo el equipo de investigación estaban sorprendidos. Me sentí muy feliz, me dije a mi misma "esto es lo que debo hacer para que mamá no sufra, tengo que ser más fuerte y protegerla".

》 Luego, comenzó lo feo, una noche me sacaron de mi habitación y me llevaron a un laboratorio, inyectaron algo en mi. Todavía recuerdo como se sentía, como quemaba. Nunca supe que era, solo sé que después de esa noche todo cambió. Fui mas rápida, más fuerte, más perspicaz, era como si cada parte de mi cuerpo y cada uno de mis sentidos hubieran evolucionado.

》 Te puedes imaginar como era todo, más fácil, extremadamente fácil. Pero a mi madre no le gustó eso. Un día la oí hablando con mi padrastro, discutieron sobre el suero que me habían inyectado, era peligroso, pero él no quería hacerle caso a ella.

Todo ese tiempo la pelinegra se mantuvo en silencio, ver a Jennie así, parecía que estuviera reviviendo su pasado justo frente a sus ojos.

》 Un día, mientras entrenaba, mi padrastro interrumpió el entrenamiento... Me abrazó, fue la primera y la última vez que lo hizo.

Jennie miró al pequeño pedazo de cielo que lograba verse desde su puesto. Chaeyoung vio como una lágrima bajó por su mejilla, pero se quedó ahí, quieta, no hizo ni dijo nada.

》 Ese día mi madre fue encontrada en su oficina, muerta. Fue un supuesto suicidio pero nunca lo creí. Desde ese instante, dejé de sentir, no más felicidad, ni sonrisas, ni siquiera tristeza, era como si mis emociones hubieran desaparecido.

The Flip - ChaennieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora