CAPÍTULO 8

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  Di vueltas por la casa mientras él estaba arriba, ordené un poco alguno de los muebles y le coloque adornos de la casa vieja.

A todo esto, él no me había dicho su nombre, nunca se presentó ni me dijo de donde venía. Y yo aún así lo deje entrar a mi casa. ¿Y si fue un plan para robarme?

Subí las escaleras corriendo y me dirigí al sótano, cuando estaba por llegar me choco con el chico rubio que salía de él.

- Perdón, creí haber escuchado que me llamabas ja- mantenía mis ojos presionados por el susto.

- No, no te llamé. Ya terminé de mirar, no encontré mucho, supongo que cuando se fue no dejo rastros de nada. ¿Estás bien?, por el choque - me tomó de los hombros.

- Ah, estoy bien - abrí mis ojos, creo que había exagerado la situación -¿No sabes su nombre?, lo podríamos buscar por las redes. Ahora se hace mucho eso. Twitteas una foto o su nombre y la gente le da rt, ya sabes eso sirve.

- No, no recuerdo su nombre, apenas tengo en mente su rostro. Éramos muy chicos cuando nos separaron. Así que sería inútil buscarlo ahí.

- Y.. ¿tus padres?

- Es una gran historia, mi madre también no la recuerdo, me dejó. Se fue junto a mi hermano, no sé nada de ellos dos hace mucho tiempo. Por parte de m-mi p-pa-pad - se escucho la puerta golpearse, había llegado mi madre.

-Tal vez mejor hablamos de esto luego- bajo las escaleras con prisa

-Hey, ¿tú quién eres?- le pregunto mi madre que se encontraba guardando las compras en la cocina. A mamá siempre le gustaba recibir invitados, pero no cuando no se lo consultara antes. Esta vez creo que no le molestaría. Seguro se pone contenta de que ya he hecho un "amigo".

- Hola señora, disculpa que esté aquí molestando, ya me iba. - se dirigió hacia la puerta principal

-¿Dónde vas?, quédate a cenar, por favor.

- Mamá, quizás el quiera irse. - le dije mientras bajaba las escaleras.

Dije eso solo para hacerme el que no lo había invitado, quería que mamá no se enojara. Igual la presencia del chico no me agradaba mucho. Más por lo de su familia, ¿por qué lo había abandonado?

- No, me quedaré. Gracias por invitarme. Me encantaría probar lo que haya hecho. Hace tiempo no como en una mesa con una familia. - sonrió

Quedé boquiabierta, creí que se quería ir. Entonces ahora tendrá tiempo para contarme y saber su nombre. No es que pretendía ser chusma, pero me daba curiosidad.

- Ya pondré la mesa así que sientense - ordenó mi madre.

Parecía contenta, todo tal cual lo dije, ahora cree que tengo un amigo pero no es así. Si supiera que ha entrado a la casa y ha estado en ella sin habernos enterado, lo echaría.

Nos sentamos enfrentados en la mesa redonda que había a un lado de la cocina. Mamá puso los platos y los cubiertos. Me levanté a buscar unas lindas copas que teníamos aún guardadas en la caja. Las saqué con cuidado y las lave.

Él solo nos observaba, parecía algo tímido, ninguno hablaba. Seguro comienza a sentirse incómodo y se irá, sería una buena idea.

- Tesoro, ¿cómo te llamas? - mamá preguntó. Hizo la pregunta que yo no había hecho desde que lo vi. Se que era muy tonto pero la verdad no sabía cómo preguntarle el nombre.

- Me llamo Jisung, ese es mi nombre. Jisung- mamá quedo callada, su comportamiento fue extraño, estaba de espaldas a nosotros terminando con la ensalada, ni se volteó a mirar al oír la respuesta.

El silenció se volvía incómodo para los tres. Busque la mirada de alguno de los dos pero no la encontraba, el chico, mejor dicho Jisung movía sus manos sobre la mesa, parecía nervioso.

- Mmm bien, la ensalada está lista. Espero que les guste, compré unas milanesas de berenjena, me dijeron que eran muy ricas. Así que disfrútenla- dijo mi madre mientras ponía la comida sobre la mesa. Se notaba rara, con una sonrisa fingida. Nunca la había visto así.

Agarré dos milanesas, Jisung se sirvió una junto con la ensalada de lechuga y tomate. Mamá preparaba las mejores ensaladas, a esta le agrego cebolla, y remolacha.

-Mmh, está rico señora... ¿?

- Bora - no levantó la vista en ningún momento. Parecía querer esquivarlo, lo sabía, a ella tampoco le caía su presencia o sabia algo..

- Mamá, sabías que está es la vieja casa de Jisung, por eso él vino de visita. - quería cortar un poco con la incomodidad, y hablar sobre la casa. ¿Quiénes vivían antes?

- Ah, ¿es así?, wow. Brillante. - Aún esquivaba las miradas, era raro.

- Si, vivía aquí cuando era pequeño, ahora de grande se me dió la posibilidad de volver.

¿Lo habrán abandonado en esta casa?, tenía tantas preguntas para hacerle las cuales no me animaba hacerlas. Quería que el mismo aclaré todo. Por qué justo ahora vino en busca de su hermano

- ¿D-de volver?, ¿dónde estabas? - preguntó mi madre y está vez sus ojos color café miraron a los de Jisung.

Parecía muy curiosa, como si quisiera sacar alguna que otra información. Era muy claro, mi madre sabía algo.

NO LO MIRES. (HyunSung)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora