¿Quién es el culpable? || Elliot Clayton; Criminal Case: Save the World

Capitulo 12: Afortunados

Salimos de la mi habitación, lo estaba viendo con una mirada confusa, pero el actuaba de lo más normal, ¿Qué pasaba Elliot?.

Me ofreció su brazo para ir a ese lugar tan misterioso, Parece que no le importó que nos vieran los de 'El Departamento', ¿No estará pensando contar todo ya?. No estaba preparada para esto, creo que estoy a punto de entrar en pánico.

-Ailyn. -Me nombró Elliot

-Si, dime.

-Tenía planeado llevarte fuera pero...

-Elliot, no me importan los lujos, el hecho de que me consideres importante para llevarme a algún lugar es lindo para mí, además... No son los lujos los que me hacen sentir cómoda, más bien es tu compañía.

-Gracias por decirlo, te quiero. -Me soltó. -Bueno, ya llegamos, ¡ta-ran!

-¿Una puerta?, es a caso una habitación secreta o algo por el estilo -Le dije confundida.

-No, es mi habitación... No pude reservar nada y tu siempre me llevas a la tuya, así que supuse que debía presentarte la mía. ¿Qué pasa?

-Es que siempre creí que no tenías habitación, -reí. -Ya quiero verla... ¿Puedo pasar?

-Claro que sí, pero. -Se puso detrás mió y me cubrió los ojos con sus manos. -Bueno trata de poner tu mano en la perilla y abre la puerta, no preguntes más.

-Bien, pero es difícil con los ojos cerrados... -busqué la perilla con el tacto, hasta que al perecer la tenía. -Listo, ¿Abro ya?

-Hazlo. -Me dijo, aún cubriendo mis ojos.

Abrí la puerta ambos pasamos despacio para que no me tropezara con algo.

Lentamente me quitó sus manos de los ojos y me dijo: ¡Sorpresa!.

No podía creerlo, había un texto de neón que decía; "Feliz cumpleaños Ailyn Morgan". Habían globos morados y grises adornando la habitación, tenía una bonita mesa con dos pequeños sillones a cada lado, y en medio un pequeño balde con una botella de vino en ella, estaba apreciando todo, y Elliot se paró frente a mí y me extendió la mano. Yo la tomé y le sonreí con algo de emoción, pero en mi rostro habían lagrimas de felicidad.

-No llores, arruinarás tu maquillaje, -Me dijo. -Feliz, San Valentín y Feliz Cumpleaños.

-Elliot, esto es maravilloso... No sé que decir.

-¿Te gustó?

-¡Me encantó!

Lo abracé inmediatente, y le dí un gran beso que él también correspondió. Mi corazón estaba latiendo muy rápido a causa de esa sorpresa, estaba encantada con él, ¿Como pude mentirle?, ¿Como pude enojarme con él?... Elliot era el futuro novio perfecto.

-Sientate, vamos a comer algo además de a nosotros mismos. -Me dijo.

-¿Cómo supiste que hoy era mi cumpleaños?, nunca se lo dije a nadie. -Dije mientras me sentaba

-Revisé tu expediente -Hablaba mientras tomaba una bandeja. -Soy una pareja tóxica.

-¿Debo asustarme?

-Es un decir, nunca llegaría a ese extremo. -Llevó la bandeja la mesa. -Bueno, tengo todo listo, espero que nada arruine esta cena.

Sirvió la comida para ambos, era pollo acompañado de una hermosa y adornada ensalada; se veía delicioso, me hizo gestos para que comenzara a comer y así lo hice.

Todo estaba riquísimo, cuando comenzamos a comer, él destapó la botella para que acompañaramos nuestros alimentos. Sirvió en unas copas y brindamos.

-Por nosotros, por ser culpables de estar enamorados. -Dijo.

Hermoso brindis, chocamos las copas y bebimos. Nos la pasamos charlando durante la comida, mayoría eran bromas que nos hacíamos.

-Ya eres legal. -Me dijo terminando su plato. -Si me haces algo no olvides que trabajamos con la policía.

-Que gracioso, pero dime, ¿Qué se siente que tu enamorada sea mayor que tú?

-Mientras no sea más alta que yo, no veo su superioridad.

-Hablando de eso, ¿Cuando es tu cumpleaños?. -Pregunté.

-Cumplo años el 23 de diciembre, apúntalo porque no lo repetiré dos veces.

-Es una fecha importante, no lo olvidaré. -Dije bebiendo el vino. -Oh por cierto, te tengo algo, ¿Me permites salir?, lo deje en mi habitación.

-Si, puedes ir, yo mientras tanto, despejaré la mesa.

***

Ailyn salió y yo me quedé a ordenar todo, que bueno que se fué así podía darle su regalo y poner el pastel en la mesa. Dijo que me tenía algo, se supone que yo debería darle algo, quizá lo hizo por las fechas, era una chica linda.

Puse el pastel sobre la mesa y até unos cuantos globos a la caja de su regalo, depues ella tocó la puerta.

-Ya estoy aquí -Dijo tras la puerta.

-Pasa, estoy quitando unas cosas.

-Ok -Dijo y pasó lentamente. -Quiero que te quedes de espaldas y no voltees a verme hasta que te diga. No preguntes

Le hice caso y no volteé a verla, deje lo que estaba haciendo y escuché sus pasos acercarse a mí, ella susurro a mi oreja; "Felíz día de San Valentín". dejó un beso en mi cuello lo que hizo que mi piel se erizara.

-Puedes voltear -Me dijo.

Sostenía un pequeño paquete y sobre eso tenía una nota, lo tomé admirado y la leí, tenía escrito: "Eres el culpable de que por cada cosa bonita que vea me acuerde de tí". La miré y la tomé de la cintura levantandola para girar su cuerpo y darle un beso.

Mi hermosa chica, podría hacerle la gran pregunta en ese mismo instante, y ella no se negaría, pero no me aprovechare de la situación.

Nos separamos del beso y abrí mi regalo.

-Oh, Ailyn, no debiste... ¿En serio me has comprado esto?,

Era un hermosa chaqueta de cuero negra de marca Bucci, una marca bastante cara. Me apenaba que gastara en mí.

-¿No te gustó?... -Me preguntó

-Ailyn, me encanta pero es bastante caro, no quiero que gastes en mí, tu compañía en este día era bastante y buen regalo hoy.

-Sin devoluciones, es algo que quiero darte. -Me abrazó.

-Bueno, en ese caso. -Me aparte y le enseñé el pastel, al lado de el, estaba su regalo. -Quiero que aceptes eso sin devoluciones igual.

-Oh Elliot es un lindo pastel, quiero comerlo contigo.

-También te he comprado algo, por tu cumpleaños y San Valentín, espero que te guste. -Le dí la caja.

Ella comenzó a abrirlo y cuando vió lo que era se quedó helada.

-Ay no, Elliot no puedo creer que me hayas regalado esto.

Lo sacó de la caja, ¿Qué era?, un nuevo celular. Ella arrojó el suyo a la basura hace unos días, Carmen me confirmo que no había estado usando uno desde hace días.

-Elliot es la iPear mas reciente, esto te debió haber costado una fortuna.

-Sin devoluciones linda. Fué un trato, además te servirá en el trabajo.

Me besó nuevamente, y yo correspondí. Para el amor no hay precio mas caro, y con la felicidad que ella brindaba a mi vida era como un pago justo, la amaba y ella a mí, sin duda. Éramos culpables de eso y más

Nos separamos de ese beso, y nos sentamos a comer el pastel de cumpleaños que le compré, eran las 11.00, todo era lindo, y supe que era perfecto cuando ella dijo:

-Elliot, si me dijeran que me queda una semana de vida, sin duda elegiría pasarla contigo. Eres el mejor y hoy ha sido el mejor día de mi vida.

Solté una lagrima de felicidad, y le sonreí, todo había salido según lo planeado, y estoy seguro de que es con ella que quiero estar, me encanta, estoy enamorado. Y pronto la haría mi novia formal, esta vez, sería mas que perfecto.