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Steven escuchó una voz que decía su nombre, proveniente de la sala.

-"Steven, ¿estas aquí?"

Perla. Concluyó.

Sin perder el tiempo, Steven subió las escaleras para recibir a Perla.

-"Aquí estoy".

Al salir por la puerta del sótano, Steven se lanzó sobre ella y la abrazó alegremente, feliz de poder verla.

-"Oh, ahí estas. Hola Steven"-ella saludó tras corresponder su tierno abrazo- "¿Que hacías en el sótano?".

-"Bueno, solo quería ver que tipo de cosas habían guardadas ahí abajo".

-"Eso explica el porque estas cubierto de polvo"-Perla sacudió levemente el cabello de Steven, quitandole algo de polvo que tenia encima. A Steven le pareció gracioso.

-"Dime, ¿donde esta Greg?".

-"Se fue hace rato".

-"¿Te dijó porque?".

-"Trabajo".

-"Ah, típico...". Perla murmuró con indiferencia.

No era la primera vez que Greg tenia que irse repentinamente a pesar de haber acordado algo pendiente por hacer. Muchas veces lo había hecho ya en el pasado, era por eso que Perla siempre venia a la casa para cuidar de Steven cuando este era un pequeño, así que no es de extrañar.

Aun así, me sigue pareciendo un poco irresponsable de su parte que haga esto. ¿Como podía dejar solo a mi pequeño Steven en aquellos buenos tiempos de antaño? Es cierto que yo siempre llegaba para cuidarlo, pero ¿que habría pasado si yo no estuviera aquí?

Perla se quejó en su mente, inflando sus mejillas y haciendo un pequeño puchero hacia el tan descaradamente confiado y ausente padre del chico a quien amaba tanto como si fuera su propio hijo. Pero no dijo nada.

Dentro de ella sabia que no seria correcto quejarse en frente de él aunque quisiera. Comprendía que tanto ella como Greg tenían "asuntos importantes" que debían atender. Si quería seguir contando con su ayuda, debía seguir apoyándolo como hasta ahora. Ademas, no es como si esto le molestara en lo absoluto.

-"Perla, ¿pasa algo?".

Steven, quien hasta este momento había observado a Perla, preguntó con curiosidad.

Oh diablos. Me quedé otra vez pensando. Perla volvió en si tras escuchar las palabras de Steven, así que respondió con una sonrisa un tanto nerviosa.

-"N-No, no es nada. No te preocupes hahaha. Y dime Steven, ¿te apetece almorzar primero antes de que saquemos todo del sótano?"

-"¡Claro!"-Steven aceptó mientras iba a la cocina seguido por Perla, quien inmediatamente había fijado su vista hacia en otra direccion-"Papá dijo que había dejado un poco de comida guardada por aquí".

-"Steven, ¿De donde sacaste ese espejo?". Ella preguntó de manera intrigada señalando el objeto que Steven aun conservaba en su mano.

Al notarlo, Steven se sobresaltó. Creyó haberlo dejado allá abajo antes de subir por las escaleras.

-"E-Esto, bueno... Lo encontré en una de las cajas de abajo. Me gusto mucho su diseño, así que lo traje conmigo... ¿Esta mal?".

Perla permaneció en silencio por unos momentos después de oír eso, mientras que un recuerdo divagó por su memoria, haciéndola sonreír inconscientemente. Luego expresó...

-"No, para nada. Es solo que ese espejo era una de las cosas mas preciadas que tenia Rose. Nunca dejaba que lo tocaran".

-"¿Porque?"-Steven preguntó con estrellas en los ojos mirando su reflejo en aquel espejo- "¿Es porque vale mucho? ¿Es algún tipo de tesoro o herencia familiar?".

La Gema del Espejo / Lapiven (AU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora