✨Capítulo 16✨

16 3 13
                                    

...

-¿Carolina? ¿Qué haces aquí? -Preguntó Yoongi atónito.

Asi que Carolina... Siempre tuve esa pequeña curiosidad por saber el nombre de aquella irritante chica con voz tan peculiar.

-Con que así te llamas. Pensé que lo más irritante que tenías era tu voz, pero ahora no me cabe dudas de que eres una completa yegua.

Bufó.

-Sabes que ahora mismo tengo el poder para hacer que te disparen, sin embargo... -se acercó hacia mí para luego sujetar mi cabello con fuerza-. Tienes el suficiente valor para insultarme, creí que eras más inteligente.
-¿Por qué tú estás metida en todo ésto? -pregunté mientras le dirigía una mirada fulminante.

Me soltó bruscamente mientras soltaba una risilla para luego incorporarse, luego volvió al lado de aquellos matones y me miró. Sin embargo, ahora su semblante había cambiado a uno totalmente serio.

-¿Se ha vuelto ésto un interrogatorio? No tengo porque responder a tus preguntas.
Aténlos. -ordenó, sin embargo al instante pudo ver cómo le llegaba una llamada a su celular que, sin dudar atendió-. Hola... Sí, ella está aquí.

Pude reconocer la voz a través de la línea.

-Pasame el teléfono. -solté.
-Eso no va a ser posib... "haz lo que pide" -escuché esas palabras que provenían del celular y Carolina obedeció-. Dejemosla sola en ésta habitación durante la llamada.

Todos salieron al instante, dejándome sola con el celular.
Irónico todo.

-Te escucho. -soltó del otro lado de la línea.
-No, no escuchas. Nunca lo hiciste.
-Por favor.-soltó con ironía-. ¿Vas a decirme ahora que todo ésto es mi culpa?
¿Quieres que te recuerde como ha comenzado ésto? O mejor dicho... Quién lo ha comenzado.
-Sabes exactamente qué pasó esa noche. -solté-. Así como también sabes el porqué.
-Una niña de seis años... Quien diría que actuaría de tal forma...
-¡Ya basta!
-¿Dejarás que tu hermana siga tus mismos pasos?
-¡Anita no tiene nada que ver en ésto!
-Es por eso que la intento alejar de tí. Estoy intentando que pueda tener una vida mejor, eso también pretendo para tí. Esa es mi responsabilidad.
-¡¿Una vida mejor?! -repetí con mi voz quebrada- ¿Acaso crees que ésto es tener una vida mejor? ¡Joder! Ni siquiera tienes una idea de todo lo que hemos pasado por intentar seguir en pié cuando ya no teníamos un soporte. ¡¿Responsabilidad?!-volví a repetir sus palabras-. ¿Hablas de aquella que debiste haber tenido hace más de nueve años?
-Solo intento arreglar el daño. Después de todo... Soy tu tía.
-Cuando mi madre ya no estaba para protegerme de mi padre... Ahí necesitaba una tía, sin embargo lo único que recibí de tí... Fue tu ausencia. Así que no vengas ahora intentando ocupar un lugar que no ocupaste cuando lo necesitaba. Ya es tarde para eso. Si aún sientes algo de afecto por nosotras, nos dejarás tranquilas. Y si no... vas a tener que enfrentarte a tu propia sobrina. -colgué.

Mi pecho subía y bajaba con rapidez en este momento y es que, nunca antes había tenido el coraje suficiente para echarle en cara todo lo que tenía guardado desde hace ya bastante tiempo. No crean que por ser una chica que aparentemente se lleva el mundo por delante, no tengo derecho a sentirme débil e insignificante la mayor parte del tiempo. Ya saben; eso de intentar mostrar alguien quien no eres para que no vean tu verdadera identidad. Pero, por más que intente ocultarlo, hay una palabra que está incrustada en mí, muy en el fondo. «Miedo» Así es, soy una miedosa. Pero supongo que los miedos están para aprender a superarlos. De todas formas no es como si me quedara otra opción.

Lo pensé por unos segundos. Decidí tomar aire y prepararme para lo que estaba a punto de hacer. Me acerqué lentamente hacia un extremo de la habitación para agarrar un palo de escoba y cerré mis ojos por unos segundos en cuanto toqué el pestillo de la puerta.
Vamos Amber, es el momento de superar tus miedos.

Vi como la puerta comenzaba a abrirse de a poco, a lo que sin dudar lancé una patada rápida para golpear a aquel sujeto. Seguido a eso comencé a golpear a los demás con el palo que tenía como arma. Yoongi al darse cuenta de la situación, también agarra algún tipo de objeto para usarlo en su defensa y comienza a hacer lo mismo que yo; darles su merecido a estos idiotas.

-¡Cuidado! -soltó Yoongi al ver que alguien venía por mi espalda, así que solo intenté esquivarlo para partir su cabeza de un puñetazo.

Fiuf, al parecer ver tanto Chaki Chan dió resultado.

Aprovechamos la oportunidad para que yo pueda agarrar mi pequeña mochila que se había caído y ambos empezamos a correr.
Corrimos hasta salir del hotel y luego de eso seguimos corriendo. Nos detuvimos al ver que ya estábamos lo suficientemente lejos de aquel lugar.

-Tenemos que ir a la Bahía. -solté agitada.
-Está bien, dame el folleto.

Me mantuve callada al darme cuenta que no lo tenía.

-Ee...
-¡¿Lo has perdido?!
-¡No me grites pendejo! No me dió tiempo de razonar en esa situación.
-Ahora que lo pienso... Pudimos haber agarrado el auto en el cual vinimos. -soltó.
-Genial. Jimin tendría que estar en ésta situación, él sabría que hacer.

Agarré mi celular y lo prendí, haciendose notar todas aquellas llamadas perdidas de Jimin. Así que no dudé en discar su número.

-Jimin. -solté en cuanto atendió.
-¡¿En dónde carajos estás?! ¡¿Sabes cuántas veces he intentado comunicarme?!
-Lo siento, estoy con Yoongi en...
-¡¿Con Yoongi?! -repitió.
-Ya, no es momento para tus patéticos celos ¡Necesitamos ayuda!
-Está bien. ¿Dónde están?

Pov Jimin.

Amber estaba a punto de decirme en donde se encontraban, sin embargo... Algo parece no andar bien. Nada bien.

-¿Amber? ¿Amber sigues ahí? ¡¿Amber?!

Fue inútil, no pude escuchar absolutamente nada. Podía notar como la desesperación empezaba a apoderarse de mí y, estaba a punto de tirar mi celular al piso pero... Algo me detuvo. De hecho la voz de alguien lo hizo.

-Jimin... -sentí su débil susurro-. Si aún puedes escucharme... Quizá ésta sea una triste despedida pero, a pesar de ello escucha atentamente lo que voy a decirte. -mantenía ese mismo tono de voz.

¿Despedida?

Pov Amber.

Si a penas hubiera tenido el tiempo suficiente para decírtelo todo, ahora no se como debería soltar todo lo que siento en pocas palabras. Joder. ¿Nunca has sentido el débil sentimiento de la soledad? Supongo que todos lo hemos sentido, aunque sea una vez en nuestra vida. Todos y cada uno de los sentimientos encontrados que sentía a causa de esa estúpida soledad, eran los mismos que me hacían retroceder y cuestionar incontables veces el porque debería yo estar acompañada.

Contradictorio ¿no es así?
¿Cómo estar solo puede hacerte adicto a la soledad? Supongo que te acostumbras a ella, tanto, que comienzas a pensar lo difícil que sería convivir con alguien más. Y eso es porque tienes el miedo incrustado, miedo de no ser suficiente. La nececidad de ocultarte a través de diversas capas para que nadie se acerque a ti, es adictiva. Si supieran lo frágil que puedo llegar a ser a través de todo eso... Sin embargo, fuiste la única persona que ignoró todo lo exterior para acercarse a mí y, eso es algo que aún no lo puedo entender.

Es impresionante como todo esto pasó por mi cabeza en un segundo y lo único que pude decir fue...

-Aunque no sepas dónde estoy... Gracias... porque ya me encontraste.

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

Find Me✨ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora