Los oscuros ojos de Harry se clavaron en los míos, no puedo asegurar que emociones contenían. Aunque estaba enfadado, eso estaba más que claro. Por alguna razón me sentía culpable, como si me hubiese pillado siéndole infiel, no podía asegurar con quién de los dos estaba más enfadado Harry.
"Hola, Rose," me saludó una vez supo que yo era consciente de su presencia, el saludo no contenía amabilidad alguna. "James," dijo, asintiendo con la cabeza.
De hecho, escuché como James tragó saliva cuando Harry le saludó, parecía asustado.
"¿Ya ha vuelto Brian?" Preguntó Harry.
James sacudió la cabeza. "Sigue enfermo," anegó.
"Bueno, entonces tendremos un divertido camino de vuelta a la celda, ¿vedad?" Dijo Harry con sarcasmo, con la mandíbula apretada y con una sonrisa burlona formada en sus labios. Temí por James cuando noté la tensión entre los dos, incluso más fuerte que antes. ¿Había herido Harry a James ayer? No había pruebas físicas en el cuerpo de James, así que probablemente no. Pero, definitivamente, había pasado algo, lo supe por su odio en aumento; tendría que preguntárselo a Harry después.
Con ambos parados frente a mí, me sentía como una esposa pecaminosa. James parecía mi maravillosa vía de escape y Harry el marido posesivo de este escenario. En realidad, yo no había hecho nada malo, pero por alguna razón, me sentía como si lo hubiera hecho. Y temía que James sienta la ira de Harry después, si no les mantenía vigilados.
Tenía que observarles con vigilancia si quería asegurarme de que James no salga herido. Parecía mucho más amistoso que Harry y mucho más fácil de confiar. Era más amable y tenía una calidez que era muy atrayente. Su sonrisa era entrañable y su risa aún más. Pasar tiempo con James siempre era fácil y me encantaba cada minuto que estábamos juntos.
Pero Harry era una historia diferente. Era un misterio enredado que te seducía, haciéndote querer resolver su puzzle más que a nada en este mundo. Era un ángel oscuro, lo parecía. Era intimidante e inteligente, pero también había algo más. Había una gran luz en lo profundo de él que parecía mantenerse oculta, pero había capturado destellos de su brillo a través de sus oscuras cortinas.
"Bueno, será mejor que nos sentemos antes de que alguien coja nuestra mesa," dije cuando me di cuenta de que ninguno de nosotros se había movido, la tensión de nuestro silencio no nos daba tregua. En realidad, era una excusa tonta para marcharnos, pero estaba agradecida de que ninguno de los dos la haya cuestionado.
Compartieron una última mirada antes de que Harry volviese a poner su atención en mí. "Después de ti," dijo, haciendo un gesto para que pase por delante de él. Le di a James una sonrisa apologética y me moví a través de la habitación hasta nuestra mesa, tomamos asiento simultáneamente y dejamos escapar un largo bufido.
Harry me siguió y tomó su propio asiento poco después. Miró por encima de su hombro, probablemente, para asegurarse de que James estaba fuera del rango de audición y entonces dijo, "¿Qué coño te dije, Rose? Te dije que te mantengas alejada de James ¿y ahora vas a ir a una puta feria con él?"
"Harry, cálmate. Y baja la voz," le ordené. "Y deja de maldecir tanto."
"Joder, puedo maldecir las veces que yo quiera, gracias," respondió Harry, sin duda, tan sólo tratando de molestarme.
"Y yo puedo pasar tiempo con James las veces que yo quiera, gracias," repliqué con un tono burlón.
Harry abrió la boca para hablar, pero yo levanté la mano para silenciarle. "Y si me dejaras terminar," continué, "Sabrías que es imposible que James sea el asesino, así que no hay razón para mantenerme alejada de él."