''Estoy lista para hablar.''
Intercambiamos miradas de un lado a otro. Miradas dudosas aunque emocionadas. Harry parece divertido, lo veo en el leve repunte de sus labios carnosos.
''Sobre él.'' Jane continuó cuando ninguno de los dos la respondió.
''¿Sobre quien?'' Preguntó Harry. Sus grandes ojos pálidos le miraron a la cara mientras ella habló. Te lo juro, no importa cuánto lo intentara Harry conseguía más de una respuesta de personas sin siquiera intentarlo en absoluto. Tenía una cierta calidad intrigante acerca de él, y no parece que soy la única en estar bajo su hechizo.
''El que ... el que sabe mi nombre.'' Su pequeña voz tembló ligeramente pero Harry asintió con la cabeza para que ella continuase. Y así lo hizo. ''Lleva uno de esos uniformes.'' Dijo, señalando un guardia que estaba apoyado contra la pared. ''El es uno de ellos. O tal vez él es todo de ellos.''
''¿Que quieres decir?'' Harry preguntó en voz baja. Los dos sabíamos que la cosa más leve que podía suceder era que acabase con la conversación, por lo que habló con cautela.
''A veces tiene el pelo y los ojos oscuros. Pero no siempre. A veces sus ojos son de color azul y su pelo es más blanco.''
Yo estaba perpleja tratando de diseccionar sus palabras dementes para darlas un sentido. Pero Harry no estaba confundido, y si lo estaba, no lo demostró.
''¿Sabes su nombre Jane?'' Preguntó. La muchacha preocupada miró a su regazo. Susurró en voz tan baja, que de hecho apenas se podía oír su vocecita. ''El viene a mi celda a veces.''
Los ojos de Harry miraron a los mios por segunda vez, él ahora parecía preocupado, ansioso. Jane continuó.
''Cuando sus ojos son de color azul el me toca. Él espera a que no haya nadie alrededor y cierra la puerta. Me asusto. Yo siempre le digo que tengo miedo y que yo no lo quiero pero no me escucha. Cuando sus ojos son de color marrón es más malo y hace que le toque. Y le digo que no me amenace. Cuando él tiene los ojos marrones él es el peor de los casos. Pero los dos conocen mi nombre y siempre dicen mi nombre. Dicen que es para tratar de calmarme como mi padre lo hacía. Pero no funciona.''
''Maldita sea.'' Harry murmura en voz baja. Y entonces me di cuenta, estaba hablando de dos hombres diferentes. Ella era una prisionera indefensa y confundida, y había dos guardias aquí que la utilizaban. Una esclava sexual de dos asquerosos empleados. Operando con su despegue, turnándose. En realidad, era bastante bonita en comparación con las demás mujeres de aquí. Y ella era extremadamente vulnerable, el objetivo perfecto.
''¿Con que frecuencia ocurre esto?'' La pregunté. Esta vez, ella se dirigió directamente a mi.
''Cada pocos días. A veces solo una vez a la semana. Pero siempre viene y siempre dice mi nombre.''
Harry suspira y se pasa una mano por su grueso pelo. ''¿Sabes quien es? ¿Es alguno de aquí?'' Dice señalando a lo largo de las afueras de la cafetería, sin duda, la sospecha es que James es culpable.
''¡No señales!'' Dijo Jane. ''Él sabrá de que estamos hablando si apuntas.'' y luego con más calma añadio: ''Pero yo no lo veo.'' James estaba directamente en su vista, y su expresión se mantuvo sin cambios cuando lo vio. Así que tal vez no era James, tal vez el no era el único guardia repugnante de aquí.
Harry miró a Jane a los ojos y ella tambaleó ligeramente. ''¿Me puedes hacer un favor, Jane? Si lo ves y averiguas su nombre, ven y dímelo ¿de acuerdo?'' Miro de lado a lado, como si decidiera si confiar o no en nosotros. ''Él me dijo que no dijese nada.''
''Bien, pero ya nos has dicho todo lo demás, que nos digas una cara o un nombre no va hacer la diferencia, ¿no?'' La dije. Ella pensó mis palabras una a una y luego asintió.