James nos llevó a través de los pasillos mientras nosotros lo seguimos, y sólo recé para que nos llevara a nuestras habitaciones y nada más; aunque lo dudé. Una vez nos habíamos encaminado a través de la tercera sala las luces se encendireon por el interruptor, y Harry y yo nos miramos uno al otro, perplejos.
"Uh, ninguna de nuestras habitaciones están aquí," Harry le dij, y me sentí orgullosa de él porcontrolar su ira. O por lo menos, hasta el momento.
Me había aferrado a cualquier trozo de esperanza que yo pudiera captar, esperanza en que James no se ariesgase a hacernos daño. Pero esa esperanza se desintegró cuando se detuvo al instante, y nos obligó a parar detrás de él.
"Lo sé", dijo. Y mi corazón amenazó con golpes en mi pecho por el temor de lo que estaba por venir. Fue una locura, realmente, lo poco conocía a James. Había sido tan rápido que confiase en él, tan ingenua estos meses anteriores. Y sólo podia preguntarme, ¿estaríamos en este peligro, si Harry no odiase tanto a James y si alguna vez no me hubiera convertido en "amiga" suya? Supongo que no había ninguna manera de saberlo, pero lo que sí sabía era el James que pensaba que era no existía. Todo lo que veia ante mí era un hombre completamente diferente, una versión del mal personificado.
Fue como si cambiase en un giro, como si la máscara de James fuese arrojada descuidadamente para revelar a su verdadera identidad. Su aura había cambiado; de alguna manera sólo irradiaba peligro. Tal vez fue la repentina oscuridad de sus ojos, la sonrisa astuta que habia en sus labios, o la confianza superior que su madre llevaba generalmente. Fue difícil verlo al principio, puesto que él estaba opuesto a los dos. Pero cuando se volvió muy lentamente.. como si él quería disfrutar el momento, mirando a las paredes del pasillo oscuro y vacío a su alrededor... Había un cambio repentino en él. Sus ojos no miraban los míos o los de Harry al principio, estaba delante de nosotros, pero parecia que éramos indignos de su mirada.
Su sonrisa condescendiente creció y también lo hizo mi temor y la ira de Harry. Pero no importa lo furios que Harry podría llegar a estar, estaba agradecida de tenerlo aquí conmigo.
Finalmente James nos vio a Harry y a mi y luego nuestros dedos entrelazados. "Aw", él ronroneaba burlonamente. " Vosotros hacéis una bonita pareja."
"¿Qué diablos quieres James?" Exigí. No quería llegar demasiado lejos; era mejor lo super, lo que fuera.
"Solo quiero hablar", se encogió de hombros. Pero la sonrisa engañosa no desapareció.
"¿Sobre qué?" Harry exigió, probablemente queriendo terminar con esto tanto como yo lo hacía.
"Vosotros," respondió simplemente. "Sinceramente, es muy gracioso. Desventurados amantes son encerrados juntos en una institución mental, tomados de las manos y hablando en el almuerzo como si fuesen una pareja real. Realmente, son adorables."
Miré a Harry, esperando a que dijera algo, pero sólo él miró al guardia.
"Pero ¿qué pensaría Emily?" James nos preguntó algo en silencio, su sonrisa solamente creció. De todas las cosas que él podría haber dicho yo no esperaba eso. Pero una vez que las palabras salieron, mi cuerpo se llenó de temor; este no era un buen camino para bajar.
"¿Qué dijiste?"Preguntó Harry, su voz retumba más profundo cuando él quitó su mano de la mina y dio un paso adelante.
"Harry", insistí, las palabras más como un pedido que una demanda. Recé para que James no digera nada más, pero una vez más mis oraciones no fueron contestadas.
"Me has oído. Me pregunto qué pensaría de las dos". Parecía estar tomando esto como un chiste, su sonrisa amplia como si se estuviese conteniendo de reír.