『 ¡ONE SHOTS BTS! 』

11.

Título: "No deberías estar aquí"

Pareja: Jungkook x Lectora.

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Estaba con mis amigos en el comedor del instituto almorzando. En estos momentos estoy un poco incómoda, ya que aquí hay alguien que huele a lobo.

Ah por cierto se podría decir que soy un sangre de lobo. No, no soy un hombre lobo, no me convierto en un híbrido de humano-lobo, yo solo me convierto en lobo, como un lobo normal solo que un poco más grande en las noches de luna llena.

—¿Vieron al chico nuevo?—detuvo el silencio una de mis amigas. Así que hay un chico nuevo.

—¿Cuál?—pregunte yo interesada.

—Eh...creo que su nombre era Jeon Jungkook—dijo otro amigo.

—Vaya—suspiré.
Ninguno de mis amigos sabía mí secreto.

—Es muy misterioso—dijo mi amiga.

—Oh—dije, el olor se hizo más fuerte, me gire a donde provenía. Y pude ver a un chico relativamente alto de tez blanca, pelo relativamente largo y se le podían ver muchas perforaciones en sus orejas. Iba totalmente de negro.

Así que él era Jeon Jungkook. Lamento esto pero él se encuentra en nuestro territorio.
Entrecerré mis ojos.

—Parece que a alguien le gusto el chico misterioso—canturreo una de mis amigas.

—Ah. Claro que no...solo se ve interesante—mire para otro lado intentando sonar normal.

—Claro—soltó sarcásticamente Namjoon.
Lo miré y rode los ojos.

—No es lo que ustedes piensan—seguí comiendo ignorando los comentarios de mis amigos.

No claramente, no era lo que ellos estaban pensando.

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Estaba aburrida en la clase de historia y estaba dibujando mi firma en las últimas hojas del cuaderno.

Ustedes se preguntarán para qué, bueno por si algún momento me vuelvo famosa. No me juzguen ya....es el aburrimiento.

Mi amigo me codeo el brazo. Levante la mirada molesta.

—¿Que?—volví mi hoja a donde estaban mis apuntes de historia.

—Mira—gire mi mirada y pude ver al chico misterioso Jungkook.

—Bueno chicos, hoy se nos une a nuestra clase de historia el estudiante, Jeon Jungkook—dijo el profesor. Jeon no dijo nada, solo se limitó a hacer una reverencia y caminar a un lugar vacío al final del salón. Yo lo seguí con la mirada, el al parecer se percató de eso, me miro por un tiempo pero luego aparto su vista incómodo.