𝒀𝒖-𝑮𝒊-𝑶𝒉! 𝑨 𝒍𝒂 𝒎𝒆𝒙𝒊𝒄𝒂𝒏𝒂.🌮🤠

Partida de lotería por la china.

—¡Quiero a mi prima de regreso! —dijo el Shark súper emputado.

—Pues te juego a la lotería por ella. —dijo el Judai.

Aquí no habían duelos de monstruos, era la lotería.

—Ya tengo listos mis frijoles para las cartas.

—Aguanta voy por mis piedritas... —dijo nuestro querido cholo cristiano.

...

—¿Porqué tengo un mal presentimiento sobre esto? —dijo Izana mientras se sentaba a ver el partido.

—¡La bandera! —dijo el Johan mientras daba las cartas.

—¡Cuatro esquinas! —dijo Shark acomodando sus frijolitos.

—¡La dama!

—¡Centro! —grito el Judai sonriendo divertido. —¡Chorro!

—¡Traiganle la Loperamida! —grito el Yura buscando el botiquín. Osea la bolsita de similares dónde estaban todas las pastillas.

—¡A ese chorro no me refiero! —dijo el castaño y entonces le ruge la pansita... (N/A: También me rugió la pansita al momento de ponerlo... Aiuda... ;-;) —Ahora vuelvo... Voy al baño...

—Le hizo daño lo que se trago... —dijo el Kaiser mientras miraba a Judai.

—¿Y que se comió ahora? —pregunto Johan.

—¡A Izana en la mañana! —grito el Judai a dentro del baño.

—¿¡Qué pedo qué pedo!? —el Yura dijo.

—¿¡KHE!?

—... —Izana estaba sonrojada.

—¡Regresas conmigo ahora mismo Izana! —dijo el Shark levantándose y tomando a la chica del brazo y jalandola.

Judai Salvaje aparece...

—¡REGRESAME A MI FUTURA ESPOSA AHORA MISMO HIJO DE TU CHINGADA Y PERRA MADRE QUE TE PARIÓ! —Grito el Judai con su cruz en mano mientras golpeaba al Shark sin maltratar a Izana. —¡SUELTA A MI VIEJA AHORA MISMO A LA VERGA LA VERGA!

—Creo que el norte el afecto a Judai... —dijo el Kaiser.

—Creo que aplicaré eso cuando mi morrita esté en manos de otro hombre... —dijo el Yura.

—Esto es muy malo... —dijo el Johan.

—Ohhh, Judai-sama. No tenías que hacer eso... —dijo Izana intentando calmar al castaño y lo abraza.  —Casi matas a mi primo...

—Eres del norte... Eso no significa que vas a estar con tu primo de arriba abajo... —dijo Judai mientras sostenía su cruz con sangre. La sangre del señor...  Además de abrazar por la cintura a su mujer con su mano libre, ambos se  besaron. Izana no tenía opción si no quería ir le rompieran la madre como a Shark.

—Creo... Qué me rompió la nariz... —susurro Shark en el suelo.

—Más bien te partió la jeta... —dijo Johan.

—Eso a ti, te vale madres. ¿Okey? —dijo Shark levantándose y llendose.

Sin duda su prima estaría en buenas manos... Unas manos que ni siquiera le van a permitir acercarse...