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"Antuan Denua"
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COMENCÉ A LLORAR POR EL DOLOR QUE SENTÍA EN ESTE MOMENTO, el dolor que sentía tanto físico como emocional. Dolía demasiado sentir los vidrios incrustandose en mi piel. Él se colocó ahorgadas de mi, tomó ambas manos y las puso debajo de sus rodillas, después tomó mi rostro e hizo que lo mirara directo a los ojos. Aquellos ojos que mas odiaba, aquellos que eran testigos de todo el daño que me estaba haciendo
Aquellos ojos que parecía que carecian de cualquier sentimiento. En este momento solo había rabia, odio y rencor, no era mas que una persona sin alma, sonaba estúpido, pero eso era lo que parecía. Solo era una persona que carecía de cualquier sentimiento positivo, no habia mas que odio en él. Comenzaba a gritarme, acusarme de un sin fin de cosas, también me amenazaba, pero sobretodo se burlaba de mi y de mi familia. Se burlaba del hecho de que nos recordaba, se burlaba de mi dolor
Decia cosas horribles de mi y de cualquier persona que conociera. Después comenzó a relajarse, aún seguía en la misma posición que antes, pero esta vez solo miraba hacia cualquier lado en la habitación. Comenzó a murmurar algunas cosas, pero por culpa del alcohol no se le entendía nada. Después fijo su vista en mi, comenzó a reírse, como si recordará algo que le causará tal gracia
Era una imbécil
—Dí mi nombre Isabella—Su voz sonaba tan rasposa
Me quedé en blanco, no estaba segura de lo que me estaba pidiendo ¿Que se supone que le dijera? Él sabia su nombre, que ganaba con escucharlo de mi. No era mas que un tonta simplicidad del hecho, ¿Le causaba alguna satisfacción? Ó solo lo hacia para justificarse
—Dilo Isabella—Sentenció
Del bolsillo de su saco comenzó a sacar una cajetilla de cigarros, junto con un encendedor. Odiaba el humo que desprendía y él pudo notarlo, después comenzó exhalar el humo a mi dirección
—¿Que estas esperando mon amour? ¿Una invitación?—Habló toscamente—Ahora
—Leónida...—Me interrumpió
Solo pude ver como su mano izquierda choco contra el frío suelo
—¡NO, ESE NO! QUIERO QUE DIGAS MI NOMBRE DE UNA MALDITA VEZ ¡AHORA!
Su nombre
Si maldito nombre
Todo se trataba de él, absolutamente todo tenía que ver con su maldita existencia, ni siquiera me importaba en lo mas mínimo saber acerca de su estúpido nombre, pero él por alguna extraña razón quería que se lo dijera. Odiaba que gritara, eso me hacia sentir presionada. Odiaba estar bajo presión, mi mente se quedaba en uno estado catatónico, todo me daba vueltas y cualquier cosa que quisiese recordar, desaparecía, como si nunca hubiese estado ahí
—¡RÁPIDO ISABELLA!
Su voz causaba un extraño efecto en mi, era como si todos y cada uno de los sentimientos de miedo, angustia, terror, llegaran a mi, de alguna manera todo se intensificaba. No podia pensar con claridad, todo estaba borroso, todo de alguna manera se volvía oscuro
—No lo sé
No recordaba su nombre, él me lo habia dicho pero estaba totalmente alcolizado y la mitad de las palabras que decia eran incomprensibles. Soltó un bufido de irritación. Comenzó a sacudirme con fuerza mientras me gritaba que dijera su nombre, ¿Por qué le importaba tanto eso? Era simplemente repuganante
—¿PERCHÉ MI IGNORATE SEMPRE ISABELLA?
Quería recordarlo, quería que parara, queria que dejara de lastimarme, pero todo era en vano, cualquier cosa que hiciera o dijera lo pondrían de mal humor, lo harían enojar. Él se desquitaria conmigo, descargaria todo su enojo contra mi, sin importar si le obedecía o no
Entonces lo hizo de nuevo
El cigarrillo que tenia hace tan solo unos minutos atrás, lo tomo para después quemarme con el, primero fueron los brazos, paso a la zona de mis hombros, para después bajar a mi abdomen, se tomaba su tiempo, manteniendolo pegado a mi piel los segundos mas largos de mi vida. No siquiera le importaba mi dolor. Grite, llore y le implore que se detuviera e inclusive le pedí perdón por no recordarlo, pero a él no le importaba eso, él lo único que queria era verme sufrir, queria lastimarme, sentirse mas fuerte que yo. El dolor seguía, no era suficiente que soportara los golpes que me habia propinado hace tan solo horas atrás, ahora también sufiriria las quemaduras de su cigarro
No me autocompadecia, tal vez esto me lo merecía por sera tan estúpida, por creer que yo sola podría con esto. Estaba tan equivocada. Tenia a mis padres, amigos y aún así pese a todo quise solucionarlo yo sola. Me sentía realmente patética. Queria acabar con él, queria que él sufriera, queria que todo acabara. No lo soportaba. La sola idea de imaginar que este seria mi futuro me hacia estremecerme de miedo y amargura
—¡BASTA!—Grité entre sollozos que dejara de lastimarme
Él se detuvo
Me negaba a creer que la persona frente a mi, seria la persona que vería por el resto de mi vida. No queria esto. Pasar semanas, meses e inclusive años a lado de un ser tan despreciable como él, era algo que nos soportaría, no lo haría, preferiría mil veces acabar con esto, que verle el rostro cada día, todos los días por el resto de mi vida
—Te diré esto solo una vez mi queridisima principessa, no lo olvides porque haré que lo recuerdes de la única manera que pareces entender—Habló secamente
Volvió a encender otro cigarrillo
—Mi nombre Isabella, mi verdadero nombre es Antua Denua, no me llames "Leónidas" me estresa que hagas eso. Pero si vuelves a olvidarlo yo mismo me encargare de hacer que te quede muy claro ¿Entendiste?
—Sí
Esa respuesta tan simple parecío calmarlo de alguna manera. Aun seguía en la misma poción, queria gritarle que se quitará, pero temia empeorarlo todo, y que volviera a la actitud de antes. Acerco su mano a lado derecho de mi rostro, lo comenzó acariciar, su mano comenzó a decender hasta llegar a mi cuello, comenzó a presionar suavemente. Estaba asustada, él estaba ebrio y podia imaginarme lo que él quería en este momento
Me aterré
Sin poder evitarlo comencé a sollozar, él comenzó a limpiar las lagrimas que descendían por mi rostro, pero aun así comenzó a bajar, pasando lentamente por mis senos hasta llagar a mi abdomen. Comenzó a subir la blusa que tenía puesta, mientras pasaba sus frías manos
—Basta, por favor—Suplique
Se detuvo, no sin antes soltar un bufido de irritación
—No siempre podrás posponerlo Isabella—Habló lentamente

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AMORE OSSESSIVO "ISABELLA"
De TodoAMORE OSSESSIVO PARTE II ISABELLA Isabella lidia con los resultados de cada decisión que tomó con el propósito de no preocupar a sus padres, el no tener la confianza y el coraje para pedirles ayuda dejó cicatrices que tardarán en sanar, ahora sabe q...