BLOOD TIES| ❝ Cuando una persona es importante en la vida de alguien, no importan los problemas que sucedan entre ellos, el lazo de sangre siempre será más fuerte. ❞
[ Simple_creators| 2020 ]
[ fanfiction - the originals/ the vampir...
________________ CAPÍTULO TRES OBJETOS OSCUROS ________________
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Omaha, Nebraska, 2012.
El sonido de los puntiagudos tacones hacían eco en aquel estrecho corredor; sus pasos eran lentos y completamente seguros, acompañados por naturaleza de su perfecta belleza y dominante figura. Aquella noche, un vestido color cobrizo se ajustaba a su cuerpo y su oscura cabellera caía como cascada por su espalda descubierta.
Al final del pasillo, un hombre robusto la recibió con un asentimiento mientras abría la puerta para ella. Una vez cruzó la entrada, dos hombres la recibieron mientras su vista se posaba en cada rincón de la espaciosa y excéntrica habitación, para terminar en la persona que le daba la espalda detrás de un costoso sillón.
—Señorita Markovic, es un placer conocerla.
El dueño de la potente y rasposa voz, dejó de ver por el ventanal las luces de la ciudad para posar sus ojos esmeraldas en su invitada, la cual no evitó observar de pies a cabeza.
—Dejemos las formalidades —respondió la aludida suave y con un toque de sensualidad en su expresión —. Mis amigos me llaman Anya.
Una sonrisa ladina se formó en el rostro del hombre.
—En ese caso... —el mayor les asintió hacia sus guardaespaldas para que se retiraran —. Soy Dániel Balog —tendió su palma y espero a que la pelinegra recibiera su gesto para dejar un casto beso encima de su mano.
—El placer es todo mío, Dániel.
El rubio sonrió a gusto y antes de darle una mirada poco decente, se dirigió al minibar y sirvió dos copas de whiskey.
—Debo admitir que fue toda una sorpresa cuando me informaron que querían comprar mi restaurante —habló en tanto le tendía la copa y señalaba el sillón para que tomara asiento —. Nunca me imaginé que fuera una hermosa señorita.
—Suelo causar ese impacto en las personas —contestó Anya con una sonrisa egocéntrica —. Veras, Dániel, algo me llamó la atención de este lujoso y extravagante lugar, mis sentidos no me fallan —rio y de un sorbo se tomó su trago —. Te puedo garantizar que los buenos negocios siempre se pueden mejorar.
—Ese es el problema, linda, este lugar no está a la venta.
—¡Oh, no! —Anya chasqueó sus labios divertida y inclinó su cuerpo mientras apoyaba sus codos en el escritorio, confundiendo al rubio en el proceso —. Hablo del verdadero negocio, querido, no de la simple fachada.
