Pequeños lujos

530 7 0
                                        

Hemos salido a cenar por el centro. Al acabar queremos ir a casa, pero estamos algo calientes por haber pasado toda la noche tocándonos sutilmente… No podemos ir a ninguna porque hay gente y decidimos ir a un hotel cerca.
Nos encontramos con el primero que es de cinco estrellas y por darnos un lujo, pedimos una habitación para el fin de semana. Nada más entrar dejamos nuestras cosas en la cama y nos encontramos con un jacuzzi. Nos miramos y con una sonrisa, nos quitamos la ropa y entramos juntos.
Con el agua caliente, las burbujas y lo cachondos que estábamos me abrazas fuerte y empiezas a besarme juntando nuestras cinturas para sentir mi polla… Yo te toco todo el cuerpo y notas como se me pone dura contigo. Entonces te cojo y te apoyo en un borde donde hay un chorro de agua. Notas la presión que te da por detrás, haciendo que gimas y en ese momento te beso en el cuello y te la meto. Me abrazas poniendo tus brazos encima de mis hombros, y con toda la situación te corres mirando hacia arriba y gritas hasta que te hago un chupetón y acabo dentro de ti haciendo que se junte mi semen con el agua del jacuzzi y tu corrida.
Después de disfrutar el jacuzzi la noche anterior toca recoger las cosas para dejar el hotel el día siguiente. Es domingo por la tarde, y quieres aprovecharlo bien para irte contenta. Entonces te tumbas en la cama boca arriba y te quitas los pantalones y la ropa interior, mordiéndote el labio para que te lo coma bien. Yo apago las luces y cierro la puerta…
Me acerco a ti y te acaricio desde los pies hasta la cintura. Te doy besos y te pones caliente. Entonces doy un lametón en la raja haciendo que te muevas un poco y sueltes un gemido suave. Sin perder el tiempo pongo mi boca abierta y empiezo a mover los labios comiéndote toda. Los notas por la zona de tu coño, por arriba y por abajo mojándote toda. La lengua entrando un poco dentro de ti, masturbándote. Lo sientes tan bien que te corres ahí mismo, pero yo no dejo de hacerte disfrutar. Sigo comiéndote el coño haciendo que te sigas corriendo, soltándolo todo en mi boca. Me gusta tanto que alejo un poco la boca y con la lengua te rodeo el clítoris y lo lleno de saliva también mientras comienzo a masturbarte con la mano. Tienes las piernas temblando y gimes fuerte corriéndote cada vez más mojándome toda la cara. Te meto dos dedos, luego tres y te abro más el coño al mismo tiempo que sigo usando la boca y cuando saco los dedos sueltas un gran squirt que moja toda mi cara, la cama y el suelo del hotel.

fuego.txtDonde viven las historias. Descúbrelo ahora