Capitulo 3

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Salí del laboratorio sintiéndome ahogado y con pocas ganas de nada. Busqué alguna sala de descanso porque no deseaba volver a casa, todo lo que dijo Raquel sobre qué nadie me espera era cierto y no podía afrontar con esa soledad ahora.

El hospital estaba en calma, algunas urgencias en sala de traumato y los recientes corrían de un lugar a otro por placas y estudios. Más allá de eso, todavía era temprano para comenzar con los estudios de rutina.

Me recosté para poder dormir un par de horas pero claramente no lograba consolar el sueño, me era imposible dejar de pensar en Raquel, fue tan maleducada y prejuiciosa desde el minuto cero que me era muy difícil tenerla cerca.

En medio de mis pensamientos comencé a escuchar gritos y me di cuenta que era su voz, comencé a levemente porque podría tratarse de una urgencia. A medida que me acercas a urgencias la escucha más claro

-Apliquen 10 gramas de epinefrina y una intravenosa, entró en paro CARRO ROJO TRAIGAN UN CARRO ROJO- empecé a escucharla gritar porque un paciente estaba en paro y no dude en ayudarla- Carga de paletas a 100, de nuevo a 200, despejen, vamos vamos, carguen de nuevo, mierda mierda, despejen, su pulso no se normaliza, más carga- pasaron unos minutos y no se logró estabilizar- anoten en la bitácora la hora de la muerte, 2:57. Permiso.

Salí detrás de ella porque la noté afectada y entró a una sala de descaso alterada y se sentó con las manos en la cabeza.
-Su esposa está afuera esperando, se supone que vino por un dolor de pecho y ellos creían que era acidez, como voy a decirle a su esposa que murió? Que mierda todo esto- la note realmente afecta y supuse que se trataba de toda la carga de nuestra discusión anterior.
-Yo puedo hablar con su esposa no te preocupes, hiciste cuanto pudiste, ya era demasiado tarde para él, entró en ese estado y no íbamos a lograr operarlo.- me miró con una pequeña sonrisa.
Salí de la habitación para hablar con su esposa esta era realmente la parte más difícil de nuestro trabajo.
Volví a buscarla para ver si se había tranquilizado, más allá de nuestros problemas personales éramos profesionales y estas cosas afectan a cualquiera.

-Ya logré hablar con su esposa y sus hijos vienen en camino. Lo mejor es que te vayas a descansar porque sino mañana no vas a poder operar- traté de animarla y ella estaba tan cansada y afectada que no respondió.
-Te dejo descansar. Cualquier cosa que necesites voy a estar por aquí.- empecé a caminar hacia la puerta cuando escuché que dijo mi nombre.

-Necesito que hablemos, solo serán pocos minutos pero quiero contarte algo que poca gente sabe de mí, pero creo que necesito que entiendas porque mi actitud contigo- estaba realmente intrigado- de seguro ya sabes que antes de estar en este hospital fui parte de uno en Sevilla- solo asentí con la cabeza- bueno, en ese hospital las cosas se manejaban muy diferente que en este y no eran tan unidos como acá- no entendía para nada a donde iba con su historia y no estaba seguro de querer escucharla pero no perdía nada, la noté tan afectada luego de la pérdida del paciente que lo menos que podía hacer era escucharla- cada uno para llegar a lo más alto de su mando, se llevaba todo lo que hiciera falta por delante, sin importar los demás- menuda mierda de equipo pensé- cuando comencé a trabajar era chica e inexperta, pero mis ganas de aprender y llegar a ser alguien eran más fuertes que tener un buen grupo de amigos al lado, cometí muchos errores en ese entonces pero el más grande fue creer en la palabra de alguien que me prometía el cielo, cundo tienes ganas de llegar a ser alguien y te prometen una salida fácil, créeme que no dudarías en tomarla, así fue como me enamoré perdidamente de uno de los jefes de mi sector y aprovechándose de eso, me prometió hacer operaciones que jamás podrías imaginar para un reciente- me dolía el estómago de pensar a donde apuntaba la historia pero sentía a una Raquel tan vulnerable en frente mío que no sabía como reaccionar- me enseñó muchísimas cosas tanto dentro como fuera del quirófano, como ser fuerte porque la gente no es siempre lo que dicen ser, a poner la otra mejilla después de una cachetada- me hizo dolor todo el cuerpo- o a entender que nada es gratis en la vida y si quieres conseguir algo no debes tomar nunca el camino fácil. Te estarás preguntando porque te cuento todo esto, lo sé, cuando uno se enamora no ve las actitudes negativas de la otra persona, claramente en ese entonces para mi normalizar actitudes como pedir café a residentes por el solo hecho de ser titular era algo que vea normal porque suponía que el cansancio era prueba justificada, cuando haces que te deleguen procedimientos para los cuales no estás preparado solo por llevar el apellido del jefe del hospital empiezas a dudar de todo, así empecé a darme cuanta que él había abusado de su poder en todos los hábitos del hospital no solo conmigo, su madre era la jefa del hospital y la impunidad de creerce intocable ya era muy notoria.
Abusó de su poder estando conmigo porque en ese momento yo era solo una simple interna, soporté humillaciones, malos tratos, discusiones y hasta que me levante la mano y justificarlo con el cansancio pero creía estar enamorada y después de unas disculpas y unas rosas lo perdonas todo,abusó de su poder cuando se creyó capaz de hacer cosas para los que no estaba preparado, abusó de su poder cuando uso de apellido para cosas que no le correspondían y así entendí que estaba metida en una gran complicación. Cuándo terminé mi romance con él, se desinteresó de mi y me era muy difícil entrar a operar con él, como si yo tuviera que pagar por haberme enamorado de él , quise tener una vida normal creyendo que todo había pasado pero todo eso fue olvidado cuando a los meses me enteré que estaba embarazada- Para este punto Raquel ya no contenía las lágrimas, se estaba abriendo de una manera tan intima conmigo que no podía reaccionar, solo me daban ganas de protegerla- cuando le dije de mi embarazo, se desentendió completamente y me sugirió abortar, para ese entonces no me quedaban dudas de la persona que era, seguí adelante con mi embarazo mientras todos me miraban con recelo porque para muchos la maternidad y la medicina no compatibilizan- me sentí culpable con la ultima frase jamás creí que ella fuera incapaz de ser medida por el hecho de ser madre, solo estaba realmente molesto- al tiempo se fue del hospital y yo comencé a sentirme más cómoda conmigo misma, te digo todo esto porque quedé rota después de todo y solo los años me hicieron entenderlo, cuando vi tu nombre en el hospital supuse cosas de vos que no eran ciertas, luego de la experiencia traumática, tiendo a suponer que todos se comportan de la misma manera, y este mes de trabajo me di cuenta que para nada eso es cierto, te vi operar en el quirófano y no podía dejar de mirarte- me miró fijo a los ojos y después bajo su mirada a mi boca y volvió a elevar la vista-...de mirar la operación me refiero, sos como una leyenda y cada persona que me habla de vos por los pasillos solo dicen cosas buenas y yo me di cuenta que solo pensé mal creyendo que te llevarías el mundo por delante- Era tan fuerte y valiente luego de lo que le tocó vivir que no podía imaginármelo- te pido mis más sinceras disculpas Sergio, te juro que si pudiera empezar de nuevo lo haría ahora mismo.- no dudé en mirarla a los ojos y dejar todo el rencor y el dolor atrás, la entendía perfectamente, los dos estábamos rotos por dentro, solo que algunos toman un método de defensa más duros que otros.
-Buenas noches, me llamo Sergio Marquina, encantado- le seguí el juego y al menos la hice reír.
-Raquel Murillo encarnada.- nos dimos la mano y nos echamos a reír, empezar de nuevo parecía una idea excelente.
-Sergio, una cosa más, te ruego que no digas nada de esto porque solo Ali y mi madre lo saben, no quiero que esto llegue a oídos equivocado, por favor.
-No decir nada de que?- la miré como sin saber lo de lo que me hablaba, mis labios eran una tumba, jamás diría algo así.
-Entonces puedo confiar en ti?
-Siempre.- me dio un pequeño abrazo de la paz y se fue mucho más animada, yo también quedé mucho más calmado y hasta puedo decir que la charla fue conciliadora y ahora sería realmente un placer trabajar al lado de la gran Raquel Murillo.

Heart Broken(SERQUEL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora