Mi verano inolvidable | Inolvidable #1

Capitulo 18

Llego el fin de semana se haría la fiesta de aniversario de mis padres, los días anteriores estuve evitando a Liam y nuestra relación volvió hacer la misma del principio cuando lo odiaba, bueno no lo odiaba en ese entonces pero ahora sí. He estado más en mi cuarto que afuera, estas vacaciones son del asco sé que estar así por un chico es patético y no hay justificaciones porque yo sola me ilusione. Yo sola me cree la burbuja de ilusiones que al final termino estallando en la cara. Aún no le he respondido el mensaje a Kat. Mi tía ya está al tanto de lo sucedido, necesitaba hablar con alguien si no explotaria. Y a mi tía le tengo más confianza en ese aspecto que a mi madre. Y a Kat no le quiero amargar sus vacaciones con este problema. El consejo que me dio mi tía fue: que el tiempo todo lo cura, pero es tan difícil no pensar en él, si lo tengo que ver todos los días.

En las noches que lavábamos los platos. El ambiente es incomodo, me sentía como una enfermedad, que tenían que estar alejados de mí. Para no contagiarse. Eso hizo Liam mientras yo lavaba, él esperaba para entrar a la cocina, para secar los platos y ponerlos en su sitio.

Me siento culpable en no decirle nada a mi madre pero la conozco y ella querrá entrometerse hacerle ver que se equivoca y hasta presionarlo para que me aceptara y una relación donde se meten tus padres creo que no funciona porque es como si los tuvieras que complacer a ellos y no quiero nada de eso.

Trataría de no estar melancolía, este día es espacial para mis padres por lo tanto tengo que mostrar mi felicidad y sonreír para ellos.

Estabamos con mi tía colocando los  adornos que ella misma hizo. Mi madre llego a interrumpir.

–Nery necesito que vayas a comprar unas cosas al supermercado. Te acompañara Liam. –Dice mi madre sonando un poco desesperante, como siempre cuando ella organiza alguna celebración. Lo único que le puse atención fue cuando menciono a Liam. Sería un desastre ir con él.

–Y Peter ¿por qué no puede ir conmigo? –Digo sonando nerviosa.

–No. –Exclamo casi como en un grito. –Él está ocupado ayudando a tu padre, además ya le dije a Liam. Y él acepto. –Termino de añadir. Mire a mi tía extrañada y ella me miro de la misma forma.

No proteste en no ir, no le quiero hacerle pasar un mal rato a mi madre en su día especial. Fui a mi cuarto a cambiarme la camiseta que ya estaba sucia y con brillantes de los adornos. Me puse la primera que encontré esta vez ni perfume ni me arregle el moño flojo que andaba, no quería lucir linda para él. Salí de mi cuarto a pedirle el dinero y la lista a mi madre de las cosas que quería, Liam ya estaba esperándome en la mini Van de mi tía sonaba la bocina para que me apresurara.

–Si te tardas niñita te estabas maquillando. –Dice en tono burlón.

–No para tu información me cambie camiseta. –Respondí en tono cortante.

–En serio, lo gruñona no se te quita. –Frunciendo su nariz.

–Si te molesta tanto no entiendo ¿por qué aceptaste en acompañarme? –Pregunte y a la vez poniéndome el cinturón de seguridad.

–Porque quería saber si estabas bien. –Poniéndose el cinturón de seguridad y puso en marcha la mini Van.

–Estoy bien ¿Por qué no debería de estarlo? –Haciendo otra pregunta.

–Porque saliste corriendo y llorando. También has pasado encerrada en tu cuarto, me has estado evitando y si no me equivoco creo que alcance a escuchar canciones tristes de tu cuarto. –Dice riendo a lo último. Nada mas fueron dos canciones de Taylor Swift la de Cruel Summner y Untouchable. Me sentía tan identificadas con ellas que las escuche una y otra... y otra... y otra... vez. Hasta que me hartaron.