LOVE IS NOT OVER (JIMIN) - 7 -

🍁 Capítulo 1

New York
*HANNA*

Sonrei ante la cámara una vez más, las luces de los flash me cegaron por unos segundos pero no tarde en acostumbrarme al brillo una vez más. El cámarografo estaba haciendo su trabajo y yo el mío. Cambie de pose y modele mas el vestido de primavera que se veía muy bien en mi, en cuanto saliera lo compraría sin dudarlo. Más sonrisas y más poses unos minutos hasta que decidió finalizar, me baje del pequeño taburete y fui por mi agua mineral, pero no estaba, ¿por qué no esta mi agua mineral? Pasé por la mesa de las bebidas y no la encontré. En todo el día no había comido, estaba siguiendo al pie de la letra mi dieta y lo único que quiero en este momento es mi agua mineral.

—¿Alguien me puede decir donde está mi agua mineral que encargue hace más de media hora? —trate de no gritar pero parecía que así fue.

El personal que se encarga de los bocadillos inmediatamente se disculpo y dijeron tal boberia como que no había, sus semblante de miedo ante mi era alagador. Iba a decirles unas cosas no muy bonitas cuando llego el asesor de fotografía.

—Hanna aquí esta tu agua mineral. —le quito la botella a la chica que claramente se notaba que había corrido un mini maraton. La tomé.

—Ya era hora. Pero recuerdo que te dije al tiempo, y esta esta helada. —se la volví a entregar a la chica.

—Lo siento mucho señorita, iré ahora mismo a traer otra para usted —se veía determinada, sonrei con amargura.

—No hace falta, no quiero nada. —los rodie para ir a cambiarme tenia que ir a grabar otra escena de la película.

—Hanna espera. —el director me detuvo. —En verdad lo siento, algunos de nuestro personal son nuevos y no están capacitados aún.

—Pues capacitenlos, hay más revistas que quieren que pose para sus modelos, me gusta esta revista en serio, pero si su personal no esta capacitado para recibir ordenes, ¿entonces que estoy haciendo aquí? —señale con mi mano toda la sesión.

—En verdad lo siento mucho Hanna, haremos lo más conveniente. —se veía serio.

—Háganlo entonces. Me voy.

Sin decir adiós fui a las habitaciones para cambiarme e irme, deje el vestido colgado en un gancho y salí con mis lentes de sol puestos y mi bolso de marca. Salí de la empresa y revisé mi reloj de muñeca, ya había tardado dos minutos, suspiré. Un auto blanco benz se detuvo enfrente de mi, el chófer se bajó del auto y me abrió la puerta.

—Dos minutos. —dije subiendo al auto.

—Lo siento mucho señorita. No volverá a pasar.

No dije nada, el chófer se puso en marcha, saque mi teléfono de mi bolsa y entre a las redes sociales para ponerme al día. Respondí uno que otro mensaje de los fans y me coloque mis auriculares para pasar el rato, a donde iríamos era algo lejos y que mejor que mi playlist en este momento. Me recosté en el respaldo del asiento y espere a que llegáramos a nuestro destino.

En medio de mi canción favorita entro una llamada, me quite los lentes y mire de quien era, levante una ceja y dejé que entrará al buzón, no me apetecía hablar con esa persona ahora. Después de una hora de viaje, salí del auto y me dirigí a mi camerino donde estaba mi personal esperándome con una sonrisa y se pusieron manos a la obra en arreglar mi maquillaje y demás. Cuando terminaron me mire en el espejo y lo detalle con mucho cuidado, a través del reflejo pude ver a los asistentes con ansiedad y preocupación, sonreí, ellos sonrieron, daba a entender que hicieron un buen trabajo en todo. Antes de levantarme de la silla, la puerta se abrió y entró mi madre con unas cuantas revistas en la mano, levante mi ceja retandola, sus ojos hablaban por sí solos, rodé los míos, aquí viene el mismo sermón de siempre.