Capítulo 23

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Tara


“No puedes esconder el humo si encendiste el fuego"


Su olor era embriagador mi cuerpo parecía arder, tenerlo tan cerca era abrumador, hacía semanas que lo único en lo que podía pensar era en volver a probar sus deliciosos labios, corte el espacio que nos separaba juntando nuestros labios, el beso empezó lento pero luego se volvió desesperado subí mi mano lentamente por su espalda hasta llegar a su nuca y tiré un poco de su cabello haciéndolo soltar un leve gemido pero no se separó de mí, continué subiendo  topándome con sus cuernos, la textura era áspera como acariciar un pescado con escamas pero sin lo viscoso la electricidad que me causaba acariciarlo me gustaba así que subí mi otra mano acariciando los dos al mismo tiempo, Hades se separó de mí en cuanto mi mano tocó su otro cuerno respiraba con dificultad sus ojos estaban cerrados y sus manos tomaban con fuerza las sábanas se veía extasiado y hasta excitado. Tenerlo así era una imagen casi orgásmica mordía su labio inferior para evitar gemir, en un movimiento brusco subió sus manos poniéndolas sobre las mías deteniendo mis caricias.

_Para -dice en un jadeo

_Lo siento no quería lastimarte - digo agachado la cabeza, pensé que le gustaba pero claramente no lo hizo

_No me lastimaste-dice deprisa - yo debo irme - y antes de poder contestar el había desaparecido, una sensación de vacío me inundó ¿tan mal había estado el beso? Que había salido casi corriendo me removí en la cama incómoda sintiendo la humedad entre mis piernas.

Me acosté abriendo las piernas deslice una de mis manos hacia mi intimidad me toque el clítoris con dos dedos y apoye mi otra mano en uno de mis pecho, cerré los ojos e imaginé el rostro de Hades, recordé la sensación de tenerlo cerca de mis labios, su olor, su sabor. Quería volver a besarlo un escalofrío recorrió mi cuerpo a medida de que la tensión crecía por mi cuerpo, moví mi mano sobre mi pecho pellizcando mi pezón, el clítoris me palpitaba y el placer aumentaba de manera implacable iba a correrme en cuestión de segundos aumente los movimientos y masajee mi pecho levantando mi cadera cuando el clímax me golpeó, mordí mi labio ahogando mis gemidos.


Hades


Me teletransporte al Inframundo por qué estar tan cerca de Tara que me estaba afectando, nunca en más de cien mil años había deseado tanto a alguien, sus caricias sobre mis cuadernos me tenían tan excitado que si no la hubiera detenido lo más seguro es que me hubiera venido en mis pantalones, cerré los ojos recordando lo dulce de su perfume y lo bien que se sentían sus manos en mí. Sin siquiera notarlo mi mano ya estaba en mi entrepierna, estaba tan duro que dolía acaricie mi pene con la imagen de Tara en mi mente acelere el movimiento para descargar un poco de la tensión de mi cuerpo, abrí mis ojos y la imagen menos erótica del mundo se apareció enfrente.

_ ¡Por Zeus! ¿Qué rayos haces aquí? - digo subiendo mi pantalón

_ Vine a verte cariño, puedo ayudarte con eso - dice señalando el bulto entre mis piernas

_ Lo último que quiero en mi vida es que te me acerques me das asco

_Oh vamos después de todo eres mi esposo sólo estaría cumpliendo con mis labores maritales

_ Perséfone no sé en qué idioma quieres que te lo diga no te quiero ni siquiera para follar, me repugna tu presencia - mis palabras parecían no afectarle juraría que hasta le alegraba verme miserable, fui un capricho hace años cuando me obligaron a desposarla y sigo siendo un capricho hoy porque a pesar de sus mentiras nunca me tuvo ni me va a tener porque antes de tener sexo con ella me castro, hasta esa altura soy capaz de llegar por lo mucho que la detesto.

_ Qué lástima por ti cariño porque vamos a estar unidos por la eternidad

_ Desgraciadamente

_ No vas a poder rechazarme por siempre

_¿Quieres apostar?

_ No juegues conmigo Hades, he soportado tus malos tratos por años pero ya me cansé

_ Si tanto te molesta vete

_ Sabes que no puedo ni quiero hacer eso

_ Entonces acostúmbrate a mi desprecio porque es todo lo que obtendrás en mí

_ Tú no vas amenazarme crees que no sé qué pasa aquí, mi padre quiere destronarte y se de muy buena fuente que has estado viendo mucho a una humana

_ No sé de qué estás hablando- digo deprisa, no quiero que note mi preocupación la última vez que ella me vio con una humana, la buscó la encontró y la descuartizó lentamente está loca y la quiero lejos de Tara

_ ¿Crees que soy estúpida? la salvaste de un auto y luego en tu bar

_ No era su tiempo, sólo eso

_  ¿El gran Hades salvando a una simple humana? No eres tan bueno querido haber dime coge muy bien o sientes algo por ella

_ Es una locura yo no siento nada por ella-y no sé por qué cuando lo digo siento un nudo en la garganta

_ Entonces coge muy bien

_ ¡No es tu maldito problema! Sal de  aquí o haré que te saquen

_ Ya no eres el de hace dos siglos, ahora sólo eres una triste sombra de lo que una vez fuiste, no escupas para arriba porque te puede caer en la cara

_¡VETE! - digo exasperado ella se ríe y desvanece en el aire.

Ardiendo en el infierno |1| Donde viven las historias. Descúbrelo ahora