Tara
"Puede que el infierno sea mi destino"
Mi cabeza daba vueltas y un dolor agudo me atravesaba el estómago, estaba en el pasillo donde me había despertado ya en dos oportunidades, estaba segura que esto no era un sueño porque por lo que me explico Mara me había teletransportado o algo por el estilo pero no entendía como, no tenía el collar y las otras veces siempre estuvo en mis manos aparte recordaba que me habían disparado tal vez estoy muerta o algo así, pensé.
Caminé para el lado contrario de la última vez no quería ir al Aqueronte de nuevo ahora no estaba Cerbero para ayudarme, luego de unos minutos salí a un gran salón todo era negro y rojo, había un gran trono en medio de la sala me acerqué para verlo mejor pero automáticamente Cerbero apareció en frente de mi, estaba en guardia pero cuando me vio se relajo y agachó la cabeza en forma de sumisión me acerqué a él y lo acaricie detrás de la oreja, dejé escapar un grito de dolor cuando una fuerte puntada medio en el estómago, mire deprisa donde debería estar la herida de bala pero no había nada aunque dolía como si estuviese ahí. Caí al suelo retorciéndose del dolor cuando una gran remolino de fuego apareció junto al trono, vi la espalda de alguien, era grande pero no tanto como las majestuosas alas negras que salía de esta, el extraño sólo estaba cubierto con una especie de toga y debajo salía una cola, el hombre se volteó dejándome ver al chico que se ha robado mis pensamientos en los últimos días Hades estaba ahí pero de su cabeza salían unos cuernos y sus ojos eran rojos.
_¿Tara? - pregunta confundido
_ No comprendo que haces aquí- digo todavía en el suelo aunque el dolor ya se había ido y sólo no me levantaba por la impresión de ver a Hades aquí
_ Yo no entiendo cómo es que tú estás aquí
_ Me dispararon- digo bajo
_ Eso no explica qué haces aquí sí moriste deberías estar en los Prados Asfódeos y si no lo estás en el limbo
_ Espera un segundo tú aún no me respondes qué haces aquí
_ Bueno supongo que puedo decirte de todas formas nunca saldrás de aquí- de pronto el miedio se apoderó de mí ¿cómo que no iba a salir de aquí? tenía que volver había muchas cosas que quería hacer y aunque Nathan me odiara ahora él era mi responsabilidad, tenía que volver para cuidarlo.
_ Yo no me llamo Hades por el dios griego, Yo soy Hades el dios griego- oh vamos esto tenía que ser una maldita broma
_¿Es un chiste? - digo soltando una carcajada
_Me vez cara de bromista - pregunta serio
_ Sabes no tengo tiempo para esto, tengo que averiguar cómo salir de aquí- me levanté del suelo con la mirada de Hades en mí y pensé por un minuto cómo salir de aquí, pero todo me llevaba al estúpido collar lo había usado para entrar y también para salir, si mal no recuerdo Cerbero es el guardián de las puertas del inframundo pero él también se puede teletransportar no fuera del infierno pero sí aquí dentro, tal vez él podría llevarme al tártaro para ver a mi madre y ella me sacaría de aquí. La mirada de Hades seguía clavada en mí como si tratara de leer mis pensamientos, tenía que encontrar la forma de hablar con Cerbero sin que él me escuchara según se Hades lleva las almas y las torturas por la eternidad Cerbero no habla pero sé que él me entiende.
_ Hey niña te estoy hablando- dice algo molesto
_ Lo siento no te escuche
_ Te dije que no malgastes mi tiempo ni el tuyo ningún humano que ha entrado aquí ha salido y ésta no será la excepción, y es porque aquí sólo llegan sus almas
_ No soy como los demás- digo pero al instante me arrepiento no sé si pueda confiar en él, no voy a decirle de quién soy hija por ahora
_ Todos dicen lo mismo - dice sobrante iba a contestar cuando un hombre alto con ojos azules como los míos tez blanca y grandes alas negras entró
_ Señor - dice haciendo una leve reverencia
_Thanatos- dice en forma de saludo
_ Vine a buscar esta alma perdida no sabemos cómo se nos escapó- Hades lo miró incrédulo por un momento pero luego asintió
_ Más tarde iré a los campos hay cosas que tengo que solucionar con esta alma
_ Claro señor si me disculpa ahora me la llevo- Thanatos tomo mi brazo y me guió al pasillo, estaba asustada y mi cuerpo temblaba
_ Oh vamos no te haría daño, después de todo eres mi hermanita- dice saltando una fuerte carcajada y ahí lo recordé él es hijo de Nyx y eso lo hace mi hermano
_ Me sacarás de aquí - preguntó con entusiasmo
_ Bueno me encantaría hacerlo pero no tengo ese poder
_¿Entonces a dónde vamos?
_ Te llevaré con mamá - y se me heló la sangre sabía que en algún momento tendría que verla pero no pensé que sería tan pronto.
Thanatos abrió sus alas me tomo con sus brazos y luego me envolvió con sus alas como con un escudo sentí como si el piso se moviera y luego me soltó abriendo sus alas, estaba en una habitación demasiado clara para el lugar donde estamos ¿Quien tiene una habitación blanca en el infierno?
_Yo- era un chico exactamente igual que Thanatos con la diferencia que sus alas eran blancas como su ropa
_¿Cómo? - digo confundida - no lo dije
_ Bueno puedo leer los pensamientos de las personas, por cierto un gusto Hipnos gemelo del idiota con alas oscuras
_ Un gusto Tara- digo extendiendo la mano, Thanatos rodeo los ojos y dijo-abrazo familiar
Thanatos y Hipnos se acercaron a mí rodeándome con sus brazos
_Noo pue... do res... pirar - digo entrecortado
_ Niños dejen a su hermana, la asfixian- los chicos me soltaron de repente y levante la vista para ver a la dueña de esa voz, sus facciones estaban menos marcadas que en las fotos y su cabello más largo ¡Era muy joven!
_¿Mamá?
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Ardiendo en el infierno |1|
FantasyTara Angeolopoulos acaba de llegar a Grecia, su padre a muerto dejándole una pequeña herencia. Aunque Tara no le importa en lo más mínimo, nunca lo conoció ni tuvo relación con el ya que fue dejada en un orfanato a la edad de tres años y adoptada po...