La chica no pudo evitar tocar su frente con irritación, no había manera de como observará el lugar donde estaba y que lo pudiera dejar pasar.
Era un desastre.
Ya, podía ignorar un poco los platos sucios de la cocina que se veía desde el corto pasillo del piso, aún así mirar hacia la sala no era la mejor opción, un poco de ropa desparrama y una que otras manchas en la alfombra, ya sea de refresco o una que otra de comida, se ve que trataron de limpiar, aunque de manera vaga.
¿Al menos podrían limpiar si sabían que vendría?
Mizuki solo dejó caer sus hombros, tenía fe que que al menos trataría de aparentar ¿todos se ponen nerviosos cuando vienen visitas? eso quizás sea un pensar muy básico y ridículo.
O más bien, no tratan de aparentar algo que no son... pero no es precisamente bueno.
¿Será cosa de cada persona o si como dicen tienen que ver el género? La típica que los hombres son desordenados
"Pero igual existen muchos sin esa cualidad, de seguro sólo es un chiste de mal gusto"
— Lo siento, había olvidado que íbamos a salir hoy ¿nos vamos? — Terminandose de arreglar la camisa, Haruto cerro la puerta de la habitación y sonrió hacia su estupefacta invitada.
Mizuki observo al dueño de la voz como tambien es el del atroz apartamento, la chica en manera de evitar el ambiente desvío la mirada, al menos puede decir que el chico se sabe vestir muy bien.
Esta negó con la cabeza, nuevamente esos estúpidos pensamientos
—¿Van a salir? — Una infantil voz, apareció entre los dos adolescentes, la pequeña niña observo con duda, a decir podría mencionar que se ven algo arreglados al menos juzgar porque Haruto se peino el cabello, le bastaba.
¿Qué más elegancia?
Haruto al ver a esa infante desaliñada y usando algo del mayor de la casa, chasqueo la lengua con molestia — Te dije que no apareciera hasta que Mizuki se fuera.
— Guaf- Guaf — Como burla, Ezel levantó las manos y apoyo sus brazos cerca de su pecho para similar a un perrito pidiendo.
— Emmm... ¿Esta mal que no vaya?
La chica no comprendía porque Haruto había dado esa orden, mas pareciera que quería huir de Ezel
— Eso, le tiene miedo a la ciudad — Señalando a la supuesta niña que paso de ser nombrado con un pronombre a un adjetivo.
¿Qué clase de relación se han formado?
Ya, estaba extraño, Mizuki sabía que Haruto a pesar de decir esas cosas en forma de chiste no es que la piense de verdad, es un gran problema que tiene, decir algo con otras intenciones y en su mayoría buenas.
De todos modos, así ella se entero de Ezel por la horrible manera de expresarse de Haruto. Y de esa misma manera de comentarios malinterpretados y contrarios.
"Tiene un problema"
La joven ya se estaba dando por vencida, en si no le molestaría la presencia de la niña, ni iban a salir en una cita o algo así, solo un recorrido por la ciudad y que su amigo lo ayudará con sus interpretaciones de su estudio teatral, al menos este le sigue el juego a la perfección, la manera perfecta de aprovechar la excéntrica manera de sacar comentarios.
Esta dio un sobresalto ante la incomodidad, y tímidamente se acerco al afintrion de la casa.
— ¿Haruto... el... cuarto de baño?
Diciéndole dónde se encontraba, este dejo caer sus hombros, de seguro iba a tardar o que cosa haría una mujer en ese cuarto
¿Habrá otro mundo tipo Narnia?
"Ahora que lo pienso, ¿por qué van en grupos?"
El muchacho solo llegó a un recuerdo con relación al tema, aunque no es como. Si fuera el caso preciso en estos momentos.
— ¿Irías? — El muchacho observo a su compañero de cuarto con interés.
— Si me compras algo de comer , iría.
El chico hizo una mueca y empujó en manera de broma a Ezel mientras soltaba una risa — No te pierdes de nada.
De manera temerosa, Mizuki entró a ese pequeño cuarto que algunos dominan "el trono" más el miedo era encontrarlo como baño público, viendo que tienen el resto de la casa, sería extraño sorprenderse.
— Me equivoque...
Eso estaba perfectamente cuidado, es más, Mizuki sintió algo de culpa que por asumir que viven "hombres" no habría ni un poco de higiene, quizás a los hombres también tienen límite en esos y el desagrado.
Aunque ella le haya dado un vistazo rápido, no sería capaz de hacer lo que la naturaleza le mandara, está se lavo la cara para pasar la resignación y salió fingiendo un tanto de calma de aquel único lugar limpio del apartamento.
— Oye Haruto... no hay papel en el baño...
— Olvidó ponerlo — Respondiendo sin interés, el anfitrión movió su mano en un gesto de indiferencia.
Mizuki en eso no podría decir mucho, no es como primera necesidad para el género masculino, pero esta no pudo evitar ver a la niña pequeña a su lado.
Ezel no comprendía porque la juzgaban con la mirada.
Aunque el muchacho logró captar esa nuestra de duda en su amiga, y haciendo un gesto con los ojos de mirarla de reojo, continuo.
— No sé , pregúntale.
Ya no era necesario, por como actuaba, ya era predecible que no tiene ni idea de lo que se refería.
"¿Como lo habrá estado haciendo todo este tiempo? "
Era algo que Mizuki no podía evitar pensar y cuestionarse como ha estado viviendo...
La chica vio el apartamento, en difinitiva solo viven hombres allí. Por más pensamiento machista que sea.
—¿Ezel, eres una niña?
De pregunta casual, la única que se puede considerar " Chica" preguntó de manera capsiosa.
La pequeña niña no se mostró interesado en eso — No, soy un hombre.
Con ese pensar, es el problema, no se ha creído el cuento de que ya no lo es o más bien solo lo recuerda cuando lo puede usar a su favor.
Aunque Mizuki sonrió, había encontrado manera de arreglar la casa y de paso, poner a prueba un experimento de "géneros"
— Haré... que cambies... esa respuesta.
—¿De qué hablas?
Ya confundido y por la expresión de terror que emitía Mizuki, Ezel sólo podría imaginar que nuevamente "su persona" estará en peligro como la poca dignidad que le queda.
ESTÁS LEYENDO
¿Y en este mundo soy una niña?
Teen FictionHaruto, un joven que recientemente ingresó a la universidad, se ha topado con el mayor problema de su corta vida, y eso fue conocer a una pequeña niña que afirma venir de otro mundo.