El resto del descanso la pasé en el área de atrás de la escuela. No quería que nadie me viera sollozar cual Magdalena.
-Eres un estúpido Hoseok. -lanzé otra piedra mientras decía lo que me venía a la cabeza. - ¿Cómo pudíste?
Las lágrimas parecían no acabarse nunca, aunque llevaba mucho tiempo llorando no dejaba de hacerlo.
Ya había comenzado mi turno de clase pero aún estaba desahogándome. No dejaría de estudiar por siempre, mi madre acabaría conmigo, pero no me sentía en condiciones de encontrarme tan pronto con Hoseok.
Por lo que en el tiempo que quedaba fuí a secretaría y ordené que reorganizaran mis clases para no coincidir con él nunca más.
Me presenté a los turnos restantes y me justifiqué con el profesor de la asignatura a la que había faltado diciéndole que estaba indispuesta. Lo cuál era verdad.
Las clases habían terminado. Nunca me había sentido mejor que hoy cuando ví a Jakson en la entrada de la escuela con el auto. Pero mi rostro no lo expresó, se mantuvo con la misma expresión.
-Señorita. -este abrió la puerta tan formal como siempre y procedí.
-Hola. -respondí sin una pizca de ánimo, ni siquiera sé si lo escuchó.
Volvió a su lugar e hizo su trabajo, conducir. Intentó animarme, por supuesto que se daría cuenta de mis ánimos, incluso trató de saber que pasaba, pero no consiguió ninguno de los dos. Llegamos a la casa de Namjoon, bajé del auto y Jakson se marchó.
Abrí la puerta con la mirada en el suelo. No me dediqué a buscar a Namjoon, no tenía ganas de pelear con él o de hablarle. En el camino hacia las escaleras su voz me detuvo.
-¿Porqué no me llamaste? -suspiré y busqué su procedencia hasta verlo sentado en el sofá.
-No quería molestarte. -hice un intento por no llorar. Sentía que en cualquier momento podía romperme.
-Pues me molestó que no lo hicieras.
-No finjas que te importo. Te dá igual, lo sé. Solo te importa que mi madre no te regañe.
-Sí me importas. No soy tan mala persona Tn.
-No te importo, no le importo a nadie, solo al chofer. Tampoco les importa como me siento, o que pienso, ¿Porqué son tan egoístas?
Su rostro se desarmó de la forma ruda y defensiva, a una más suave, sus comentarios ojos llenos de ternura. Se levantó de donde estaba y fué hasta mí. Muy cerca de mí. Nos quedamos mirándonos por la un tiempo en el que tuve que levantar un poco mi cabeza ya que Namjoon es más alto que yo.
-Sí me importas. -deslizó una mano por mis cabellos y colocó uno en específico que estaba en mi rostro, detrás de mi oreja. -Más de lo que crées. -bajó un poco e hizo algo que no esperaba pero que necesitaba, me abrazó. -Me sentí muy mal por no verte cuando desperté. -cerré mis ojos. Su voz tan serca de mí me tranquilizaba. Y aunque aún estaba molesta con él, necesitaba ese abrazo, más que nada en el mundo. - ¿Quieres decirme porqué llorabas? No lo niegues, ví en tus ojos que has estado llorando. -aquella pregunta logró que nos separáramos de ese cómodo momento.
Sonreí como gesto de agradecimiento. Milagrosamente me sentía mejor.
-Ahora no por favor. Necesito bañarme y tal vez dormir un poco.
-Está bien. Como quieras. ¡Ah! Siento lo de esta mañana, no pasará otra vez. -dijo él mostrando lo más parecido a unas sinceras disculpas, las cuales mi sombra de enfado, con una pisca de desconfianza, dijeron que no creyera del todo, sin embargo, mi corazón y mi mente, dijeron que fué bastante convincente, así que solo me limité a acentir.
Subí las escaleras hasta la habitación. Y desde ese momento lloré en mi cama hasta quedarme profundamente dormida.
Cuando lloraba no pensaba en que Hoseok era gay, ni en que había estado con Min Yoongi. Pensaba en lo doloroso y molesto que se sentía que no me halla contado. Yo le cuento todo, nos contábamos todo, confiaba en él, ¿porqué no confió en mi? ¿no soy su amiga?.
Pero también pensaba en lo aterrador que se sentía perderlo, no ser más su amiga, que Min Yoongi me apartara de Hoseok era lo más aterrador y molesto de todo. Él es mío, me pertenece cómo persona, ¿acaso ser amigos no significa eso?
Cuando desperté eran las 21: 10. Había estado durmiendo durante 4 horas. Fuí a bañarme y prepararme para bajar.
Me vestí algo parecido a lo de ayer, solo que esta vez eran de otro color los jeans y el abrigo hasta de otra marca.
Una ves lista bajé. Me sentía mucho mejor después de haberme desahogado llorando y con el abrazo de Nam, quiero decir, Namjoon. Incluso sentía que podía contar el tema sin derramar una lágrima más, ahora si que no podía hacerlo. Ya se habían acabado.
-Namjoon. -lo llamé cuando bajé las escaleras.
-Aquí estoy. -este lugar se había vuelto el lugar en el que más estaba, la cocina. Fuí hasta allá y me detuve en una esquina. -¿Dormiste bien?
, ¿te sientes mejor?-Sí, ya me siento mejor. Gracias por preguntar.
-Que bien. Oye ¿te gusta la comida italiana?
-He comido algunas veces, no todo es de mi agrado. ¿Porqué?
-Es que hice algo de comida italiana. Es lo único que sé hacer.
-Además de buldogui. -agregué.
-Tampoco sé cocinar buldo...emmh, sí además de eso.
- ¿Y qué preparaste? - incliné la cabeza para ver un poco de lo que hacía en esa olla.
-Cuidado, te quemarás. -con la mano que no usaba apartó mi cabeza hacia atrás, y con la otra daba vueltas en la olla. -Esto es algo parecido al ramen, pero en italia lo llaman spaghetti, en algunos lugares también lo llaman pasta.
-Ooh. - incliné la cabeza otra vez para tratar de ver pero me volvió a empujar levemente.
-Será mejor que esperes a que esté listo.
Hice un puchero y me fuí hasta la mesa cruzada de brazos. Me senté en una silla a pensar un poco.
Namjoon parece preocuparse por mí. ¿En verdad le importo? ¿Entonces porqué me trató tan mal? ¿Porqué no me hace caso? ¿Porqué no bajó? Son tantos porqué que no puedo explicar. ¿Y si le pregunto? ¿Pareceré una estúpida si lo hago? ¿Qué pensará de mí?.
No podía con tantas preguntas en mi cabeza, Kim Namjoon era alguien complicado y sin solución.
-¿Te ayudo en algo Nam? -me levanté de la silla tan sorprendida como él. -Quiero decir, Namjoon. -le rasqué nerviosa. Mi intento de remediar la situación es en vano. Lo dicho, dicho está.
-Alguien de la realeza como tú…- tono raro, otra vez. -…descendiendo al nivel de tomar la iniciativa de abreviar mi nombre, ¿Esto es un sueño?
-Lo siento, fué sin querer, yo...no lo vuelvo a hacer -estaba tan avergonzada que mis palabras se demoraban en salir.
-No, está bien. Puedes hacerlo, así me llaman mis amigos. -dijo para continuar en lo que hacía.
-Está bien. -me acerqué más a donde estaba. -Si insístes. -respondí bromeando. -¿En que te ayudo?
-Está bien. Si insístes -bromeó el también. -En el refrigerador hay jamón y queso, pícalos en pequeños trozos.
-A la orden.
Gracias por leer♥
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𝕷 𝖆 𝕻 𝖗 𝖎 𝖓 𝖈 𝖊 𝖘 𝖆 𝖄 é𝖑 𝕾 ú𝖇 𝖉 𝖎 𝖙 𝖔 . {Tn & RM}
Fiksi PenggemarLos prejuicios no son nada educado, ni agradable, eso la vida se lo enseña a Min Tn de la forma más graciosa posible. Gracias a las historias que escucha Tn de su madre, ella cree que su primo Namjoon es alguien desagradable, gordo y feo, pero, él...