Cap 13 /~ ¿Iremos? ~

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- Lo sabía! -se expresó victoriosa mientras yo solo rodaba los ojos por lo insistente que suele ser-

- Eres mala- le saco la lengua de manera acusadora.

- Érika, entiendo que estés desesperada por que te follen -abro los ojos como platos- pero no tienes que mentirme, soy como tu hermana.

- No estoy desesperada! -me quejo- ¿quién dijo que quiero que hacerlo con él?

- Mmm es tu prometido. Dhaa - dijo obviando- si no lo haces tú lo hago yo.

- Si pero....

- Espera... -me hizo una seña para que me callara-... no me digas que estás con él por interés? -

- No, claro que no Fabiana.

*Bueni sí*

- Entonces?... juro que si salgo y le pregunto a una pareja si les gustaría tener relaciones con obviedad me responden que sí.

— Fabiana — ruedo los ojos.

— No lo digo yo, Érika— se defiende— lo dice la ciencia.

Juro que hago un gran esfuerzo para no reír.

— Vale, tú lo quieres ¿no? .

* Ok, creo que esto está mal*

— No ósea si ,lo quiero, lo amo —exagero y me muerdo la lengua por lo dicho— yo me refiero a que es muy pronto para hacer esa cosas, es todo.

— Bueno, como digas guapa —se levanta de la cama y me mira— He quedado con Dylan, me tengo que ir pero nos vemos en la noche ¿verdad?.

— Claro - sonrío levantándome para acompañarla a la salida- estaré ahí no te preocupes, ¿te acompaño a la salida?

- Si por favor -asiente y salimos de la habitación-

Primero la acompañé por su bolso y luego a la puerta para que llamara un Uber.

- Nos vemos en la noche- repite de nuevo para dejarme en claro que no quiere que falte hoy-

- Dije que sí- en verdad es muy exigente-

Fabiana asiente con una sonrisa en la cara y sube al vehículo que la espera.

Entré a casa y luego a mi habitación, seleccioné la ropa sucia para meter a lavar, después subí a la habitación de Guzmán y toqué la puerta.

- Pasa- gire la perilla y solo asomé la cabeza, en verdad solo quería preguntar algo-

- Quería preguntarte si puedo encender el lavado- él estaba sentado en el medio de la cama con su laptop en las piernas y con las cortinas abiertas-

—Si pero la próxima vez solo hazlo y no preguntes, me molesta la distracción cuando trabajo—asiento— Por favor coge mi cesta, Frederick olvido contratar a las chicas el día de ayer.

— Vale— entro y tomo su cesta, está están muy liana, mucho más que la mía, sin duda aquí no están los trajes.

¿No les a pasado que cuando entrar a la habitación de un hombre el aroma es un paraíso?.

Para mí lo es, cuando estaba en casa de mi madre solía pasar toda la tarde en la habitación de Erick, sinceramente creo que es un alivio para él que me haya mudado.

- Esto también- pone el computador a un costado y cruza las manos en la cintura para después levantar la playera que llevaba puesto -ten -pone la prenda en el borde de la cama y yo me debato en ir con los ojos serrados o no.

SÓLO ES MI JEFEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora