(34) Debajo de las piedras

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¡Ayudaa ayudame!

Por favor, ¿donde estás!? Juraste protegerme con tu vida y solo me destruiste una y otra vez me enredaste en tu maldito mundo de mentiras que acabaron con mi vida.

Ahí está tirada en el suelo con un vestido blanco bañado de sangre, llorando llamándome, el dolor de su alma está reflejado en sus ojos y yo me quemo en este infierno de dolor. Es todo mi culpa mi culpa mi culpa mi culpa despiertaa es tu culpa!...

Abro los ojos rápidamente y me arrepiento del movimiento de mi cuerpo, la cabeza me da vueltas y al intentar levantarme caigo de bruces al piso. Alguien entra y me ayuda a quedar nuevamente en la cama.

Todo se ve borroso, parpadeo consecutivamente hasta lograr acostumbrarme a la luz.

- Que  Q-que ha pasado ¿Donde estoy?

- En casa, estuvo varias semanas en coma por un golpe que recibió estuvo, estuvieron secuestrados

S-secuestrados, ella dónde está, que ha pasado que paso con ella.

- ¿Donde está?

Me observa y está por entrar en pánico.

- ¿Donde está? ¡Dime! Dios por que siento tanto dolor, maldita sea me duele hasta respirar.

Mi padre entra por esa puerta y el se retira.

Parpadeo varias veces al ver todas esas horribles escenas en mi cabeza que van llegando como puñaladas, siento mi corazón abrirse en dos.

No dejo de pensar por qué tantas cosas estará pasando, debe odiarme le oculté todo y me odia pude verlo en sus ojos su llanto. Cuando esos malditos cerdos abusaron de ella frente a mis ojos y no pude hacer nada.

¡Soy un maldito cobarde! ¡No pude hacer nada! ¡Soy una maldita escoria!.

Caigo de rodillas al piso el dolor que siento ahora solo lo sentí una vez en mi vida, cuando perdí todo cuando ese maldito desgraciado mató a mi familia por una miserable deuda.

El llanto, las lágrimas me cegan no puedo soportar esto, no puedo soportar haberla perdido de esa manera ¡Por qué tuve que enamorarme de ella! Debí alejarme, debí luchar contra mi fuerza de voluntad y no estar cerca de ella.

Me juré que nadie sufriría a causa de esto, juré no acercarme a nadie y asi fue durante diecisiete años hasta que llegó ella y derrumbó esa barrera.

- Hijo calma por favor ya estoy aquí, estoy contigo

Me abraza y no puedo evitar llorar aún más de impotencia, dolor, rabia, ¿¡por qué!? Por que siempre pierdo todo en esta miserable vida.

Acaso nunca seré feliz.

-- Necesito encontrarla, necesito que me perdone explícarle las cosas que... Q-que la amo y no puedo vivir sin ella sin su perdón la quiero de vuelta ya Bus.. b-busquenla ¡Hasta debajo de las piedras!

Siento todo mi cuerpo temblar tomo mi cabeza entre mis manos moviendo la cabeza frenéticamente sintiendo que no respiro ¡No puedo respirar! Siento que mi corazón se rompe y mi pecho se abre en dos.

Me paro bruscamente sintiendo el dolor en todo mi cuerpo corro al baño y termino vomitando, lavo mi rostro y las lágrimas salen sin control.

Miro mi reflejo echo mierda en el espejo y cierro mi puño dando un puñetazo haciéndolo trizas, mi sangre hierve y empiezo a romper todo lo que veo a mi alrededor tratando de saciar el terror, el pánico que siento.

Mi cabeza duele a horrores y siento como mi alma abandona mi cuerpo cayendo en una eterna oscuridad.

P.V.O Aysha.

LIBRO #1 DE LA TRILOGÍA PSICÓPATA (La Suicida y El Psicópata +18 CorrigiendoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora