IV - ft. El Noctambulo

24 3 0
                                    

Heme aquí, soy vacío

inquilino de la nada, retorcido

soy mi libertad

soy mi rendición

Soy ese quizá que siempre olvido,

el estandarte de tu arte

subyugado por su dócil alma

¡Tan valiente!

tan oculto sobre tus tintes 

que me atrapan como una hidra 

y me tiñen con sus pigmentos

que me salpican para habitarme e intervenirme.

Ya no soy el mismo,

no lo soy después de eso.

Ese beso me condenó

pero, soy vacío ¿Por qué ha de hacerlo?

¿Acaso con tu ser rompiste el maleficio prohibido?

Soy vacío repito,

o quizá,

nunca lo fui…

Fui tanto tiempo ese solitario

que de tan sumergido en aislamiento se olvidó de cómo lucía un rostro ajeno

esa soledad, 

mi soledad, se quebró.

Alteraste mi espectro

y con ese halo lumínico me envolviste con esperanza

y mi interior, 

ya cansado, 

se inquietó tanto

que logró mutar…

Revivir en versosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora