Trasfondo forzado

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─ Me siento inútil ─ Se quejó Layl después de que cerraran un bloque de grabación y él solo pudiera estar acurrucado en una esquina sin hacer nada.

¡Era como si fuera invisible!

Había llegado hace dos días, y en realidad solo quedaban unas cuantas escenas por terminar de grabar. El hijo de Soren todavía tenía algunas dificultades para pasar el último nivel de Ka'OS el Origen.

Catriel era el oráculo guía en el juego y fuera de él estaba ocupado siendo mentor y entrenador.

─ Eso es porque lo eres ─ Catriel estuvo de acuerdo después de escuchar a su amigo quejarse.

Layl gruñó como un perro chiquito.

─ Entonces no debiste hacer que viniera ─ Volvió a quejarse.

─ Eres útil para algo ─ Le dijo Catriel, supervisando la recolección del material operativo del juego que iba a ser movido.

─ ¿Qué? ─ Preguntó Layl, parecía estar meneando la cola esperando su respuesta.

─ Apoyo moral de maniquí. Aunque hay mucha gente de Ka'OS aquí, te necesito para lucirte como un directivo ─ Se burló Catriel.

Layl asintió con una expresión que decía que el tonto había sido el por preguntar, y haber esperado algo de Catriel.

─ ¡Sr Layl! ¡Sr Layl! Tenemos peces Koi en el estanque de atrás ─ Canturreó Soriel saliendo de la nada, corriendo hacia ellos ─ Y, además hay una pequeña casa-granja en la que curamos y recuperamos animalitos de la calle. Aún no los ha visto ¿Verdad? ¿Se ha planteado adoptar? ─ Preguntó rápidamente con ojos brillantes y esperanzados.

Pero, la verdad es que sonaba con un religioso evangelizador tratando de atraerlo.

─ Este niño... ¿De dónde saca tanta energía? ─ Le preguntó a su amigo.

─ De su padre ─ Catriel contestó automáticamente.

Layl lo miró y levantó su ceja izquierda, preguntándose qué tanto sabía él de la energía del Sr Ozar.

─ Todos los niños son así, prepárate porque si de verdad se cumple lo de los gemelos... la diversión será doble ─ Aseguró Catriel rápidamente, en un murmullo, despeinando el cabello en la cabecita de Soriel que ya los había alcanzado.

─ ¡Vamos! ¡Vamos! ¡Vamos! ─ Cantó Soriel halando a Layl por su pulgar ─ Por cierto, mi papá está en el estudio ─ Avisó de la nada.

Cuando se habían alejado un pequeño tramo, Soriel giró la parte superior de su cuerpo y Catriel creyó ver que el niño le había guiñado el ojo.

Iba a tener unas palabras con Soren, otra vez.

─ Deja de hacer esto, te llamé aquí para hablar sobre lo que has hecho mal, no para que te convirtieras en un pulpo de mal gusto ─ Se quejó Catriel, su mano empujaba el pecho de Soren que lo mantenía encajonado contra la puerta de su cuarto ─ Ya casi es hora del almuerzo y hay escenas extras que grabar en la tarde, no hay tiempo para distraerse ─ Agregó, usando el trabajo para disuadirlo.

─ 20 minutos son más que suficientes ─ Murmuró Soren, al tiempo en el que tanteaba la piel bajo sus dedos en busca del hueso de la cadera de Catriel con una mano, y acariciaba la parte trasera de la oreja izquierda con la otra.

─ Supongo que te halagué demasiado en mis memorias ─ Soltó Catriel refiriéndose a su "tiempo de calidad", mientras contenía el estremecimiento que le ocasionaba el toque de Soren.

Déjame Aferrarme (Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora