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Tsuyu se había preocupado por su amiga, hacía ratos que ella y Ashido la habían perdido de vista, al igual que al enmascarado de negro que estaba junto a Ochako, si ella decidía irse sin dudas lo habría dicho antes, la paranoia la consumió

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Tsuyu se había preocupado por su amiga, hacía ratos que ella y Ashido la habían perdido de vista, al igual que al enmascarado de negro que estaba junto a Ochako, si ella decidía irse sin dudas lo habría dicho antes, la paranoia la consumió. ¿Y si la secuestraron? No, imposible, debían calmarse, ella aparecería pronto.

Afortunadamente las chicas tenían a su lado a un pelirrojo y a un rubio enmascarados haciéndoles compañía, las palabras de Kirishima apasiguaron la desesperación de ambas, incluso logró sacarle charla a la pelirrosa. El pequeño grupo estuvo conversando sobre la fiesta y con quien vinieron, de pronto Eijiro y Mina descubrieron algo, ambos quedaron estupefactos.

—¿Quieres decir que tu amiga, la del vestido rojo es...?— Algo preocupado, tomó de ambos brazos a Mina, ella asintió.

—¿Y tú amigo el de negro es...?— Mina estaba aún más preocupada que Kirishima, ¡Con quien demonios se había ido a meter su amiga! Probablemente esté en más peligro que en manos de un villano.

Ambos juraron no revelar la identidad de sus amigos esa noche, se alejaron fingiendo no conocerse, nadie conocía a nadie, todo estaría...

—¡Mina! ¡Tsu!— Ochako se acercó a las mencionadas.

Bien...

—No se imaginarán que acaba de ocurrir.— Emocionada comenzó a murmurar sin muchos detalles lo sucedido, Mina se sorprendió a lo grande, jamás pensó que la ñoña correcta de Ochako haría algo tan atrevido, Tsuyu por su parte no pudo siquiera responder del impacto.

Afortunadamente, la castaña aclaró que no conocía la identidad del rubio ceniza que la tomó en los baños, eso habría sido alguna clase de alivio para Mina, de no ser por el hecho de que ella sí sabía de quien se trataba, y había jurado no decirle a su amiga quién era ese sujeto. ¡Menudo enredo! La casualidad a veces puede llegar a ser muy molesta.

De todas formas, tanto Ochako como Katsuki estaban decididos a mantenerse en el anonimato, ambos habían sucumbido al fruto prohibido, aunque sus placeres e identidades permanecerían para siempre bajo el secreto de sus máscaras.

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Baile de Máscaras. ⌦ᴋᴀᴄᴄʜᴀᴋᴏDonde viven las historias. Descúbrelo ahora