capítulo 4

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Veías como la pequeña de ojos rojos dormía profundamente, estabas un poco mareada debido a los Cortes que te hicieron y tu cuerpo sanó. Te sentaste en el suelo y recargaste tu espalda en la cama, recordarte la conversación que tuviste con Eri hace una hora.

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-Eri- miraste con seriedad a la pequeña - tengo un plan para que podamos escapar y el ya no te haga daño, voy a salir y buscar a alguien que nos apoye-
La pequeña empezó a mover su cabeza de un lado a otro negando - yo estoy bien, si hago lo que dice el no te hará daño a ti o a otras personas- su cabeza estaba agachada y cerraba sus manos en puños.

- Eri- la miraste con tristeza, - no te preocupes el no me lastimara, vas a ver como logramos escapar, pero el no debe enterarse ¿vale?- la pequeña asintió con la cabeza no quería que ella fuera herida por su culpa.

Habías decidido cambiar el tema, así que le contaste que tu habías nacido hace mucho tiempo, y que en ese tiempo existían príncipes y princesas. Después le contaste una historia acerca de una bella princesa que al nacer le pusieron una maldición la cual decía que al cumplir 16 años se pincharon un dedo y dormiría por toda la eternidad.

Después de escuchar la historia la pequeña se había quedado dormida.

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Empezabas a cabecear, te quedaste dormida durante un rato, pero te habías despertado al escuchar a Eri dar pequeños gritos y sollozos por culpa de una pesadilla.

- Eri, Eri despierta- movías levemente a la pequeña, la pequeña abrió sus ojos, respiraba muy rápido y te miraba confundida y con miedo. - tranquila solo fue un sueño-La abrazaste y acariciarte su cabeza, ella te abrazaba fuerte y recargaba su cabeza en tus pechos.

Recordarte que cuando tenías pesadillas tu mamá te cantaba a ti y a tu hermana una canción de cuna para que te tranquilizará y pudieras dormir otra vez, eran muy pequeñas pero aún recordabas la dulce voz de tu madre cantar.

Mientras cantabas acariciaba la cabeza de la pequeña. Eri te veía con sorpresa pero poco a poco empezó a calmarse hasta quedarse dormida.
La acostaste en la cama y la arropaste, te tumbaste a su lado y te quedaste profundamente dormida. Esta vez estabas en un campo lleno de (flor favorita) el cielo era totalmente azul, estabas fascinada por el bello paisaje, empezaste a correr y saltar por todos lados mientras reias.
-(TN)!!- sentiste unos fuertes brazos sostenerte de la cintura y levantarte en el aire- te encontré- empezó a girar contigo en el aire.

- [~~~]!! Bajame !- Decías entre risas. Te bajo pero no soltó tu cintura, te diste la vuelta para poderlo ver, su cabello era rubio y tenía un gran copete pero su cara tenía una mancha negra, no podías verla.
-(TN) -

Abriste lentamente tus ojos, ese sueño fue raro, no le diste mucha importancia. Te levantaste y observaste la habitacion y pudiste ver dos charolas con comida.
Te morías de hambre el día anterior no te habían dado nada de comer, te acercaste y agarraste las charolas y te sentaste en la cama.
Despertaste a Eri y empezaron a comer.

- (TN) ¿me puedes cantar otra vez?- miraste a Eri, sonreiste y asentiste. Dejaste la charola vacía a un lado y volviste a cantar la canción que cantaste la noche anterior.

Un rato después Overhaul entró a la habitación y se llevó a Eri. Querías impedirlo pero no podías hacer nada.
Un momento después llegó Chrono y te llevo hacía una habitación muy parecida a la que Overhaul te llevo para hablar.
- por orden del joven maestro saldrás durante tres horas y si tardas más tiempo recibirás un shock del collar. Tendrás que ir al mismo lugar donde te dejemos. Te pondremos una venda y te llevaremos al exterior-

¿Un Mounstruo? Togata Mirio X TuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora