Hoy es el dia en que Hunter me presente con sus papás y es algo que me pone muy ansiosa porque ahora todo más formal y no es porque no quiero que lo sea pero mi relación con Hunter es la más formal que he tenido y quiero que esto dure y no quiero arruinarlo con su familia.
– ¿Estás lista? – dijo Hunter llegando por detrás.
Di un respingo por la sorpresa ya que no me lo esperaba o tal vez estaba demasiado sumergida en mis pensamientos como para poner atencion a lo que está pasando a mi alrededor tanto que sin darme cuenta ya estabamos frente a la casa de mi apuesto de mi novio. Antes de entrar me abrazo y atrapo mis labios en un tierno beso, haciéndome sonreír entre el beso; entramos y había un par de chicos aparte de sus hermanos.
Al cabo de unas horas estaba más tranquila a cómo llegue su familia era muy graciosa y me recibieron muy bien, Hunter me tenía abrazada pero uno de sus primos me hacía gestos raros cosa que ignoraba por completo.
— Voy a ir al baño amor — le dije a Hunter para luego pararme.
Entre al baño hice mis necesidades, me lave las manos y salí del baño, iba caminando por el pasillo y sentí una mano en mi cadera que me jalo con fuerza, al principio pensé que era Hunter ya que tenía una costumbre tan extraña de siempre jalarme de imprevisto a su cuarto pero era su primo extraño el de las muecas; me quise alejar de él pero me tenía sostenida con mucha fuerza. Él empezaba a tocarme y yo a desesperarme.
— Voy a gritar si no me sueltas ahora — amenace.
Tapo mi boca y seguía tocándome, yo empezaba a desesperarme y estaba comenzando a asustarme por lo cual el llanto de desesperación se acomulaba en mis ojos. Mordí la mano del chico y empecé a gritarle desesperada a Hunter por lo cual conseguí un golpe en mi mejilla de parte de ese idiota.
— Suéltame ya — dije empujándolo.
Mis lágrimas ya estaban en mis mejillas, se escuchó un golpe en la puerta pero tenía seguro y el chico me tomó más fuerte haciéndome sentir asco hasta de mi misma; la puerta se abrió dejándome ver a un enfurecido Hunter.
— ¡Suéltala maldito hijo de puta! — dijo empujándolo.
La mamá de Hunter me saco de ahí, no podía decir nada solo limpié mis lágrimas y salí de ahí.
— ¡No te le vuelvas a acercar o haré que te duela como nada en el mundo! — escuche por último en Hunter.
Me senté a esperar a Hunter para que me llevara a casa, cuando bajo tenía un pañuelo en las manos limpiándose las manos, se sentó a mi lado y pasó su brazo por mis hombros lo alejé un poco y me miro confuso.
— Llévame a casa por favor — dije por lo bajo.
Asintió y tomó mi mano, nos subimos al auto y él condujo hasta mi casa; solo podía pensar en lo que había pasado momentos atrás, cuando por fin llegamos a casa solo me baje del auto sin decir nada y caminé hasta la puerta de mi casa.
— Amor espera — dijo Hunter tomando mi brazo.
No quería que me tocara me sentía sucia, me sentía como un maldito objeto para el placer de los demás.
— No pensé que fuera a pasar lo de hoy por favor espero puedas perdonarme — dijo tomando mis manos.
— No fue tu culpa — dije soltando sus manos.
— Ven aquí — dijo para luego abrazarme.
— Suéltame Hunter, por favor — susurre — Por favor Hunter.
Dije separándome y metiéndome a casa rápido, en cuanto cerré empecé a llorar de nuevo; corrí hasta mi cuarto y me metí así a la regadera intentando que todas los toqueteos se limpiarán con el agua pero los sentía impregnarse en mi piel, deseaba no a ver aceptado ir con Hunter a esa maldita cena.
Semanas después...
— Amor, ¿podemos hablar? — dijo Hunter tomando mi mano.
— Si, ¿que pasó?.
— Desde lo qué pasó no me has dejado que te besé ni que te toque mucho y quiero saber que es lo que tienes, quiero ayudarte — dijo mirándome a los ojos.
Me sentí acorralada y mis ojos se inundaron de lágrimas.
— Estoy sucia Hunter, no quiero que me toques hasta que las manos de tu maldito primo se borren de mi cuerpo, no quiero que me beses porque siento que vas a hacerme daño y no quiero empezar a llorar — dije haciéndome hacia atrás.
— Amor, mírame, jamás voy a intentar obligarte a hacer algo que no quieres, quiero que te sientas segura conmigo porque voy a protegerte de todo idiota que quiera pasarse de listo contigo, de todo el que quiera hacerte daño, te amo amor y si no quieres que te bese bien no lo haré, si te incomoda que te toque por mucho tiempo no lo haré, voy a ayudarte a que puedas pasar todo esto — dijo viéndome a los ojos.
Salte directo a sus brazos llorando y él me abrazo con fuerza, y entendí que todo este tiempo de estarlo alejando fue estupido porque lo único que me hacía sentir segura era estar entre sus brazos, él era mi mejor refugio.
¡Volviiiiiii! 👌🏻🥳
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Imaginas - Hunter Rowland
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