Mi vida sin tí | Juliantina I Terminada I Editando

Capítulo 20

VALENTINA POV

Juliana pasó todo el camino en paz. Su reacción a los hechos fue extraña, pero al mismo tiempo satisfactoria. Decidí no molestarla porque sabía lo confundida que estaba. Me siento estúpida por esta culpa, pero era necesario, poco a poco fue descubriendo la verdad que la había hecho sufrir tanto. No sería un golpe cuando todo se revelara. Era mejor así.

- ¿Esta cansada? - pregunté al ver que casi llegamos.

La miré poniendo toda su atención en el tráfico, ella asintió, consciente de que la estaba observando. Parecía frágil ante mis ojos ... como siempre, pero sabía que detrás de esta imagen había una mujer fuerte y sensual. Compartí el silencio sabiendo que ella tomaría medidas. Las preguntas vendría constantemente por la llamada telefónica, no podía evitarlas. En el último semáforo antes del apartamento me quedé observándola, sus curvas marcadas en el vestido de seda negro. Nunca había pensado que ella se vería más bella de lo que ya era. No sabía cuán hermosa, cuán voluptuosa se había vuelto y cuánto me volvía loca, derretida por sus encantos. Me gustaba todo de ella, sus defectos la complementaban convirtiéndola en la mujer perfecta. Juliana tenía el poder de hacerme perder el control. Siempre.

- Valentina esta en verde!.

Volví a la realidad viendo el semáforo. Aceleré lentamente abriendo una sonrisa en mis labios. " ¡ Fuera de control !"

- ¡Mantienes mi atención más que nada! - Le dije esperando animarla.

- Dudo que si tú estuvieras atrapada con un león te enfrentarías a él. - comentó con indiferencia.

- ¡Me desharía de él sabiendo que tengo algo por lo que vale la pena vivir! - sonreí

De reojo vi como su cabeza bajaba. No se dió cuenta de lo que estaba tratando de expresar con palabras. Sabía cómo lo tomaría, pero no era por eso que aceptaba sus sentimientos. No estaba preparada, tendría que ser paciente para esperarla y estaba dispuesta a hacerlo.

- Valentina ... - Levantó la cabeza otra vez, deteniéndose.

Fue el momento en que entré al estacionamiento del edificio, esperé en silencio mientras estacionaba el auto. Apagué el carro y me volví hacia ella, prestándole toda su atención. Permaneció abatida como si peleara con palabras.

- ¿Hay algo que quieras decirme? - La ayudé apoyándome en mi banco de lado.

Ella asintió, esperé un poco más en silencio hasta que tuviera el coraje.

- Cuando fuiste a hablar con Mateo ... - comenzó con miedo - Iba ... ¡Iba a escapar! - confesó - ¡Si no fuera por Eva lo hubiera hecho!

No puedo decir que me haya sorprendido. Tal vez de ahí venía mi sentido de protección. Por mucho que lo intenté, no pude apartar mis ojos de ella por un segundo a pesar de que estaba lejos. Ella huiría, de un momento a otro, estaba segura. Juliana no era del tipo que se apegaba a algo durante mucho tiempo debido a su adicción. Ella buscaría y caería en la tentación. Pero estaba dispuesta a consolarla, ayudarla y recogerla de donde sea que se esconda de mí. Esperé a que ella llegara al punto de que, para mí, era todo.

- ¡Estaba tan enojada por dejarme que quería drogarme! - hizo un gesto incómodo - Lo que me intriga ... Es que no tenía ganas, mi cuerpo no me lo pidió, ¡solo quería olvidar quién era y lo qué estaba pasando en ese momento!

Sus palabras cruzaron mi mente como un bucle tratando de procesar lo que estaba pasando.

- Eso es muy interesante!

- ¿Que quieres decir con eso? - ella me miró con curiosidad.

- Quieres decir que lo haces por elección ... - Le expliqué - Tu cuerpo reacciona a tu pensamiento.