18:Heridas Amorosas

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Los dioses están en peligro gracias al bandido más temible, Chakal. Tres dioses peleando con una cosa extraña en una cueva mientras que otra diosa peleaba con el bandido.

—Creo que ya no tienes fuerzas mi reina — Chakal rió.

—¿Dónde está Xibalba...amor? — La Catrina empezó a cerrar los ojos.

Por otro lado tenemos a Xibalba, La Noche y al Chamuco peleando con esa cosa extraña. La Noche empezó a perder los poderes, ya no le quedaba nada.

—Esto es inútil, no lo podemos enfrentar — La Noche se quejaba.

Xibalba veía como su amiga y su hermano se quedaban sin poderes, pensó...que todo era su culpa, si no hubiera enfrentado ese día a Chakal no pasaría esto, ahora está en peligro su esposa y sus dos compañeros para pelear con esa cosa. Pensó por última vez.

—¡Chicos! — gritó — junten sus poderes.

—¡¿Que?! ¡Estás loco! — gritó La Noche.

—Es la única manera de derrotar esa cosa Noche, no podremos ayudar a tu hermana y si no lo hacemos...ella morirá.

—Tiene razón mi hermano, tenemos que salvar a tu hermana, hazlo por tu Reino...por tu amigo...por mí.

Al escuchar lo último no tardó en ponerse roja y entrar los nervios ¿Realmente El Chamuco está enamorado de ella?

—Esta bien...hay que hacerlo rápido.

El Chamuco puso su mano en el suelo para crear una flama roja intensa, La Noche también puso su mano para crear un humo morado tóxico solo faltaba Xibalba. Este miró su báculo y lo puso en el suelo haciendo que cobrará vida las serpientes.

—Yo les doy la señal — Xibalba miraba al monstruo.

La cosa rara miró fijamente a los tres dioses, gritó con fuerza y empezó a correr hacia ellos, Xibalba ya dió la señal.

—¡Ahora!

La serpiente de dos cabezas se movió rápidamente haciendo que el monstruo de distrajera por un momento, los dos dioses activaron sus poderes creando un camino de fuego azul para matar ya esa cosa, el mencionado miró el camino y no tardó en derretirse...se hizo un lodo asqueroso.

Los tres dioses miraron el charco...se había acabado todo.

—¡Lo logramos! — gritó Xibalba.

El Dios de los Olvidados abrazó a su amiga y a su hermano, todo se había acabado con ese monstruo asqueroso. Los dioses se sonrieron y siguieron su camino, a ayudar a La Catrina.

Chakal se llevó a La Catrina aún lugar muy oscuro y sin personas ahí, la dejo tirada en el suelo.

—Algun día tu queridísimo esposo te dirá la verdad — se levantó para luego irse.

El bandido al salir de ahí no tardó en caminar, ahora le tocaba morir los otros tres dioses. Un sonido molesto se acercaba a la oreja de Chakal y era...fuego, el fuego de El Chamuco.

Esquivó la flama pero se tardó en reaccionar en el poder de La Noche, cayó al suelo.

—Ya no tienes escapatoria Chakal, ¿Dónde está mi esposa? — Xibalba lo miraba con odio.

—En algún lugar que nunca te lo diré — Chakal rió.

La Noche sacó una espada y se la puso en el cuello, el bandido tragó saliva pero de tranquilidad.

—Te preguntó Xibalba ¡¿Dónde está mi hermana?! — gritó furiosa la diosa de azul.

—Ya les dije, en algún lugar.

Los tres dioses miraban a Chakal, con furia y odio, les interrumpió algo...una persona.

Xibalba fue al lugar oscuro donde encontró a su esposa en el suelo jadeando.

—¡Amor!

—Xi.. Xibalba.

El Dios de los Olvidados abrazó a su esposa sin lastimarla, le apartó un mechón que cubría su ojo hermoso pero se dio cuenta que su ojo estaba lastimado...una ¿Cortada?

—Estoy bien Xibalba, no duele tanto ¡Ouch! — gritó.

—Si te duele... ¿El te lo hizo? — miraba el cuerpo de su esposa.
Estaba muy lastimada, con cortadas leves pero sus manos con cortadas profundas, la había atacado con sus espadas.

—Te voy a ayudar.

—Dejalo así Xibalba, llama a mis guardias.

—No amor, te ayudaré.

Xibalba cargo a su esposa con cuidado, esto iba en serio.

Por otro lado, dos dioses estaban con Chakal, lo habían atado con una cuerda que se encontraron por ahí.

—Estas frito — bufó El Chamuco.

—Ya lo está — ahora dijo La Noche.

—¿Cómo se te ocurre lastimar a la reina más hermosa del inframundo?

—Porque...para mí es horrible esa Reina, eso es todo — Dijo Chakal.

—Pero eso no significa que la tienes que poner en riesgo a su reino o a nosotros — dijo con tranquilidad La Noche.

Y por otro lado :v tenemos a La Catrina y a Xibalba saliendo de la cueva, esa diosa de azúcar tocó el rostro de su amado...





Un mes después de todo lo que había pasado con ese bandido se dieron cuenta que tenía una hija muy hermosa. De cabello pelirrojo y ojos café, de estatura mediana y muy delgada...una guerrera.

Curaron a la diosa de azúcar y también a su esposo.

Un día Xibalba le dijo a La Catrina sobre la medalla de la vida eterna, sin mentiras...al contarle todo eso su esposa hizo un gesto de decepción pero que no se volverá a repetir ese momento.

—Prometo no ocultar otro secreto — Xibalba sonrió hacía su esposa.

—Esta bien amor, yo tampoco ocultare ningún secreto.

Los dos se besaron tiernamente.

Casi al final de esta hermosa historia...
Se preguntarán ¿Porque chingados pusiste "heridas amorosas" si no se cortó las venas el Xibalba? :V
Porque como La Catrina salió lastimada, Xibalba la cargó... Es decir que la sangre de la diosa de azúcar recorrió el cuerpo de su esposo.

Y también por La Noche y El Chamuco, pelaron y ganaron.

Tres episodios y se acaba :'3
Nos vemos!


Mi Dulce...Mi Dulce Bella Muerte (TERMINADA)✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora