3ºHaciéndote ver sus instintos<3

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-/ 💜 Ichimatsu 💜 -/

Cuidar a un felino macho podía ser una gran responsabilidad, si, era una cómoda compañía, pero, era un arma de doble filo cuando este gatito era un humano.

—Ichimatsu, hazme caso —No pudiste evitar sonar mimada. Odiabas sentirte ignorada.

—Déjame en paz, ¿si? —En ocasiones era muy seco en su tono de voz.

—Eres muy huraño —Recriminaste volviendo acostarte en el sofá dándole la espalda—. Es por eso que no tienes novia...

—Tonta —El gruñido se escuchó en toda la habitación. Le había molestado tu comentario.

No sabías lo que hacía pero tú decidiste ponerte a ver noticias y memes en tu celular. Olvidar tus audífonos en la habitación era un error ahora mismo. Tal vez era mejor darle su espacio, él compartía esa característica gatuna de querer su espacio a veces.

—¿Ichimatsu? —Te estremeciste al sentirlo recargarse y prácticamente subirse sobre ti.

—Eres una dramática —Su tono de voz sonaba tan indiferente. No estaba avergonzado en lo absoluto.

—¿Yo? Tú eres el culpable —Reclamaste en defensa. Tus manos se habían dirigido a sus cabellos tras haber bajado la capucha.

—¿Quieres mi atención? —Sonaba tan autoritario y burlón—. Aquí me tienes~

—¿En serio? —Adorabas jugar con él. Era el crush de tu vida y eran adolescentes a fin de cuentas.

—¿Jugamos? —Sus labios se cerraron sobre la piel de tu cuello sin hacer daño. Estaba tentando solamente.

—¿Jugar? —Cuestionarte exponiendo instintivamente tu cuello. No te molestaba esa cercanía.

Lamiste tus labios al sentir tu corazón bombear con firmeza. Gruñiste al tener sus manos afirmadas a tu cuerpo. Le gustaba jugar con tus instintos, hacerte retroceder y aferrarte al mismo tiempo. Estaban comenzando a sentirse acelerados, se podía ver a simple vista gracias al compás de sus respiraciones entrecortadas.

—Ichimatsu... —Un jadeo escapó de tus labios. Sentías la desesperación recorrerte al comenzar sentirte frustrada.

—No uses ese maldito tono de voz conmigo —Mordía su labio con tanta fuerza que comenzaba a sangrar. Se había cortado.

—Todo un gruñón —Te acercaste lo suficiente para besar su labio herido—. Tal vez debería irme con Osomatsu, él me recibe muy bien~

—¿Osomatsu? —Su rostro se hundió en el hueco entre el sofá y tu cuello—. ¿Acaso quieres ponerme celoso? —Su voz sonaba ronca y ahogada.

—¿Lo he logrado? —Reíste al saber que lo habías hecho y con honores. Claro, tu risa no duró por mucho tiempo.

Te encogiste en tu lugar al sentir sus labios haciendo presión en tu cuello. Instintivamente tus labios se lograron cerrar en su hombro aplicando la misma fuerza en el proceso. Todo estaba pasando tan lento que al separarte lo sentiste rápido.

—Estúpida —Su rostro pálido estaba bañado en un color rojizo. Su respirar era dificultoso.

—Eres un animal —No podía soltarlo del agarre. Tu cuerpo no dejaba que se alejase de ti. No querías separarte.

—. . . —Se logró liberar de tu agarre levantándose del sofá. No podía verte o en definitiva te haría de su propiedad.

—Hey —Reíste ligeramente entendiéndote con mayor comodidad en aquel sofá—. No fui la única, ¿verdad? —Te había entendido, lo sabías.

Escenarios con los Matsuno💕✨👊🏻Donde viven las historias. Descúbrelo ahora