Tercera Generación: el libro

Anubis Black

Luego de que el pequeño descanzo terminara, Seamus se puso de pie y fue por el libro, carcomido por la curiosidad

—Anubis Black —leyó.

Sirius frunció el ceño.

—Creo que éste es Blue. Espero que sea Blue, no quiero un tercero.

¿Anubis y Venus Black? ¿En serio? Me parece que lo próximo que escriba será el convenio para sacar a White de Azkaban.

—Eso suena como Blue, todo bien —se alegró Sirius.

En Slytherin, Draco hizo una mueca al escuchar el nombre de la mágica prisión. Realmente no quería terminar allí.

Ah, cierto. Debo presentarme. Bueno, al igual que mi hermana fui a Durmstrang y a Beauxbatons antes de empezar en segundo año en Hogwarts donde conocí a mi mejor amigo.

Awww, yo también te amo, Blue.

—Su mejor amigo era Derek, ¿no? —preguntó Remus—. ¿Qué pasó con la regla de no salir con la hermana de tu mejor amigo?

Sirius se encogió de hombros.

—Pregúntale a Harry.

El azabache se sonrojo ante las miradas que le dieron.

En realidad hablaba de Oso.

Púdrete, Black.

—Ya vimos que él realmente se llama Blue, pero… ¿el otro chico se llamará realmente Oso?

—Oh, vamos, amigo —se quejó Sirius—. Me duele que creas que alguien sea capaz de llamar a su hijo así. Alguien además de mí, por supuesto.

Remus asintió con la cabeza, de acuerdo con lo dicho por su amigo. Sólo él estaba tan loco como para llamar a sus hijos White y Blue Black.

Era broma, no te pongas así. ¡Sabes que te amo! Anda, sonríe. Dame una sonrisita, bebé.

Sirius empezó a darle codazos en el costado a Remus. Cuando éste lo volteó a ver, molesto, Sirius subió y bajo las cejas, lo que lo hizo recordar y sonrojarse. Ciertas partes de sus años de escuela estaban mejor en el olvido.

Qué gays son…

Bueno, ya. Fuera todos, que debo presentarme.

Mi nombre completo es Anubis Blue Black-Malfoy. Y, a diferencia de mi hermana, no tengo problema con cual se refieran a mí. Aunque admito que prefiero Blue.

—Cualquiera preferiría ser un color a un dios del Inframundo con cabeza de perro —se quejó un Ravenclaw.

Fui Gryffindor y Premio Anual, aunque no Prefecto. Ese puesto se lo ganó uno de mis mejores amigos.

McGonagall soltó un suspiro de alivio. Aún no tenía idea de porque, en el nombre de Merlín, había hecho prefecta a la hija de Sirius Black.

También fui del equipo de Quidditch desde tercer año en el puesto de cazador.

Los Gryffindors fanáticos del deporte aplaudieron con emoción junto a Sirius, Remus y, para sorpresa de varios, los Slytherins que serían sus futuros parientes.