Draco se preguntaba cómo su vida había llegado a este punto.
Los días habían pasado y se podía decir que su estado mental era... Inestable. No importaba lo que hiciera, su conversación con Blaise y Ginny no habían hecho otra cosa que generarle dudas. Ahora su cabeza no paraba de darle vueltas al asunto, lo peor es que entre más lo pensaba peor se sentía respecto a su decisión.
Su decisión, su decisión, su decisión.
¿Cuánto había pasado ya desde que la había tomado? No lo sabía, su mente dudaba hasta de una fecha; se había convertido en alguien dudoso en todos los sentidos. Y su padre le había enseñado que no había peor cosa en el mundo que un hombre dudoso.
Trataba de distraerse, centrarse lo más posible en sus estudios y portarse como él Malfoy que debería ser; eso usualmente le funcionaba. Creía que así todo volvería a la normalidad.
Pero siempre volvía a pensar en Luna.
¿Que estaría haciendo? ¿Estaría bien?
¿Lo odiaría?
Probablemente, Luna había confiado en él como su amigo y él la había apartado sin siquiera explicarle la razón. Él también lo odiaría.
De hecho, una parte de él se preguntaba como Luna había permitido que fuera su amigo. Por supuesto, las personas seguro pensarían que Luna era afortunada por haber sido cercana a Draco, un muchacho sangre pura inteligente y popular, pero se equivocaban, era todo lo contrario.
Él había sido el afortunado al volverse amigo de Luna.
Esa era la verdad y jamás podría negarlo. Los demás sólo eran muy ciegos para ver lo obvio. Lo peor es que no supo valorarlo en su momento.
En fin, ya no importaba.
Ella seguramente lo odiaba ahora. Era lo más lógico, pero Draco trataba de no pensar en eso. Se suponía que hizo esto por su bien y el de ella, esto no era nada en comparación con los problemas que surgirían si se dejaba llevar por sus sentimientos. Sus compañeros, su familia, todos se pondrían en contra de Luna; eso sin contar que no sabía cómo ella reaccionaría ante esto.
Luna quería y necesitaba un amigo, nada más y nada menos, y ni siquiera eso lo pudo dar, tuvo que arruinarlo todo con su estúpido enamoramiento.
En ese momento Draco se encontraba caminando por Hogsmade. Sin darse cuenta ya era fin de semana y era momento de visitar nuevamente el pueblo. Una parte de él ni siquiera había querido salir, pero sabía muy bien que si no lo hacía su mente volvería a pensar en ese asunto que quería olvidar.
Así que optó por salir y distraerse un poco. Aunque honestamente nada era muy interesante, mucho menos estando solo.
Fue ahí cuando la vio.
Luna Lovegood. Su ex amiga y la persona que secretamente quería.
Se encontraba a sólo unos metros de distancia. ¿Cuándo había sido la última vez que la vio? Ya no recordaba. Pero se veía igual que siempre, usaba un suéter abrigado extremadamente colorido y unas botas que no combinaban en lo absoluto con sus grandes aretes.
Una parte de él quiso acercarse a ella y decirle que debía usar una bufanda, que no era bueno que fuera tan descuidada y que tenía suerte de que él cargara una extra. Pero se detuvo, eso no le incumbía ya.
Eso no fue lo único que le llamó la atención, Luna no estaba sola, alguien más la acompañaba.
Esa persona era... ¿Acaso era Blaise? ¿Qué hacía Blaise con Luna Lovegood de todas las personas?
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Un Último Vals //Draco x Luna//
RomanceDraco encuentra finalmente un lugar en Hogwarts donde puede apartarse de los demás y ser él mismo. Sólo hay un problema: Luna Lovegood está ahí casi siempre. De mala gana, el joven acepta compartir el lugar, sin saber que terminaría acercándose poco...