Me revuelvo en la cama, abro los ojos y veo un fondo blanco encima mío, me levanto de la cama y esta desaparece. Miro a mi alrededor pero no hay nada, solo blanco y más blancos. Doy unas vueltas a mi alrededor hasta que distingo una figura negra en el horizonte. Doy cortos pasos hacia esta pero parece alejarse cada vez más, ahora son zancadas en vez de pasos, aumento la velocidad de estas, pero también aumenta la velocidad a la que se aleja la figura. De repente dejo de verla y paro en seco recuperando el oxígeno.
Me sobresalto cuando el cuerpo de Peter aparece en frente mía.
-Peter- digo confundida
-Tienes que ayudarme- dice antes de desaparecer.
Abro los ojos y me levanto de la cama, estoy en mi habitación. Miro a mi alrededor y después me llevo las manos a la cara, secando el sudor que cae de mi frente. Suspiro y entro al baño. Me miro al espejo, lavo mi cara y cuando vuelvo a mirar veo a Peter detrás mío. Me doy la vuelta rápidamente, pero ya no está.-Me estoy volviendo loca- susurro para mi misma y vuelvo a mi cama.
La mañana siguiente me despierto como cada mañana, me aseo y me preparo para ir al instituto.
-Buenos días papá- le abrazo y doy un beso en su mejilla.
-Buenos días cariño-me sonríe mientras me siento en la mesa.
-Stiles- me rio y él suelta un sonido, sonido que no logro entender debido a que tiene la cara metida en el tazón de cereales.
Terminamos de desayunar y nos dirigimos al instituto. Stiles aparca el Jeep y bajo de este para ir a saludar a mi mejor amiga.
-Hola Lyds- doy un beso en su mejilla.
-Buenos Ast- me abraza.
-Jackson- le sonrío al novio de mi amiga.
-Hola bonita- deja un sonoro beso en mi mejilla.
Las primeras dos horas pasan con normalidad, exceptuado el agudo dolor de cabeza que me ha llegado.
Pido salir al baño, al llegar me lavo la cara y me apoyo en una de las paredes.
-Ayúdame- dice delante mío.
-No se como ayudarte- digo a tiempo, justo antes de que vuelva a desaparecer.
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Siempre tú-Peter Hale-
LobisomemMe llamo Astrid y soy la hermana mayor de Stiles, a priori puedo parecer una chica normal pero no es así, no desde la noche que un hombre lobo nos mordiera a mi y a Scott. Cambio aún más cuando averigüe quien fue el causante de la mordida y los sent...