El Corazón del Duque.

Duque de Namikase...

Aun sigo sentada  frente al escritorio de roble de mi padre sin poder procesar muy bien sus palabras y le digo:

_¿El Duque de Namikase?, por lo que se llego a Konoha Hils solo unas semanas antes de usted padre y por lo que se no ha realizado ningún baile o recepción alguna con la intención de encontrar a una esposa o mejor dicho escoger a una...

Mi padre me mira meditativo y me dice después de unos segundos de observarme como si no pudiera creer que yo tenga dudas acerca de la propuesta del caballero:

_Que es lo que te preocupa Hinata, deberías estar agradecida que un caballero de tan alta posición te haya escogido a ti como su esposa.

_¡Es precisamente esa decisión la que me hace desconfiar y preguntarme que remoto interés puede tener el Duque en mi,  estoy segura que no existen dos personas con menos singularidad, y usted padre debería hacerse la  misma pregunta!... 

Le digo en una protesta llena de incertidumbres para que pueda entender lo absurda que significa semejante noticia para mi, lo miro por unos segundos que parecen eternos esperando su respuestas y solo hay silencio y continuo:

_Padre, yo entiendo lo engorrosa de mi situación por eso he decidido entrar al convento es  mucho mejor alternativa, se que usted esta de acuerdo con que...

_¡Basta ya Hinata!, seria como pagar un alquiler de por vida y lo sabes el convento se sostiene de la caridad y el que una Hyuga entre a dicho recinto ya no seria caridad mis donaciones, seria una obligación, es increíble que digas que ya no quieres ser una carga para mi y tu primo y no pienses las cosas con sensatez.

Me dices en tono autoritario con una gran arruga en el entrecejo pero aun así intento debatir con el siendo nuevamente interrumpida con su lluvia de argumentos:

_Pero padre yo...

_No creas que no me pareció curiosa la propuesta del Duque, y pensé que tal vez no sabia todo tu historial y debía hablar con franqueza así que respondí a su carta con otra diciéndole todo lo que debía saber, aun si eso significaba que retirara su propuesta, pero el Duque estaba muy bien informado sobre ti y nuestra familia...

Lo miro expectante no sabia exactamente que decir y el continua:

_Hinata yo se que crees que el convento es tu mejor opción pero no es así, el Duque te esta ofreciendo estabilidad y protección y sabes muy bien que ya yo no soy joven, y como te dije tengo intenciones de ingresar a un club en Inglaterra y quizás pase mas tiempo allá que aquí.

Mientras lo escucho aprieto mis manos sobre mi regazo y le digo:

_Padre ni siquiera conozco al Duque, y que el sepa todo sobre mi no hace que deje de ser un extraño...

Le digo en un tono de desesperación y resignación por que ya se que no puedo hacer mas y el me responde inmediatamente:

_Si esa es la única queja que tienes te advierto que nos invito a cenar mañana, así que espero te prepares adecuadamente y por favor dejes tu afilada lengua en casa.

Mis ojos casi salen de sus órbitas al escuchar que mañana cenare con el y le pregunto a pesar de lo obvio de mi pregunta:

_¿Mañana, tan pronto?

_Si mañana, ahora te agradezco que me dejes continuar con la revisión de estos documentos.

Y continua leyendo los documentos que tiene sobre su escritorio mientras yo me siento como una juzgada y condenada que solo espera el día de su ejecución, me levanto poco a poco de pronto sentía mi cuerpo pesado y salí  con pasos lento del despacho de mi padre, una vez que cerré la puerta tras de mi aun sigo procesando la información, y no dejo de preguntarme que interés puede tener un caballero como el Duque de Namikase en alguien como yo, que solo he recibido una propuesta en mi vida y que el fracaso de dicha propuesta me condeno, me detengo frente a una columna suspiro profundamente y me apoyo de espalda  en ella mientras cierro mis ojos, no puedo dejar de pensar en que injusta es la vida, cuando por fin tomo una decisión de pronto todo se viene abajo demostrándome una vez mas que no soy yo quien decide.