¿cómo es que algo así llegó a pasar?
Teníamos todo controlado ¿verdad?
Estaba en mi cuarto de la casa Rosada, había decidido pasar el fin de semana ahí. Apenas el viernes 18 había llegado, pasé una noche en el establecimiento.
Eran alrededor de las 5 de la tarde, yo estaba leyendo un libro cerca de la ventana, la cual tenía cortinas para no llamar la atención ahí afuera. Oje las páginas por última vez cuando escuché gritos que provenían de la planta baja.
Me levante de mi asiento sintiendo mi corazón golpeando en mi pecho. No sabia lo que realmente estaba pasando ahí abajo, pero tampoco quería averiguarlo. Me acerqué a la ventana viendo con algo de dificultad tras la tela blanca que la cubría. Militares en las calles, policías, personas sobre el suelo siendo intimidadas con armas. Esta imagen tan violenta me hizo recordar el momento más horrible de mi historia. Sentí mi cuerpo tensanse al escuchar sus gritos desesperados, sus súplicas. Mi vista no se apartaba de aquella escena. No me moví ni un centímetro, mis músculos comenzaron a temblar y mi respiración se hacía entrecortada y sonora. Todo habia vuelto a comenzar.
Reaccione al escuchar los gritos del segundo piso, estaban subiendo. Abrí la puerta de mi habitación viendo el extenso pasillo de la casona. No dude en correr escaleras arriba sin mirar los escalones, esto hizo que me resbalara en repetidas ocaciones haciéndome chocar contra el duro mármol de los escalones blancos. El dolor era casi imperceptible en ese momento, sólo quería subir, a pesar de que sabía que tarde o temprano me iban a encontrar.
La planta más alta de la casa estaba desocupada asi que entre en la primera habitación que vi cerrando la puerta con brusquedad sin prestarle atención al fuerte ruido. Giré el seguro y me aleje de la puerta. Mis manos temblaban asi que resultaba realmente difícil sujetar algo con ellas o incluso cerrar el puño era dificultoso. Me gire hacia la habitación, que era idéntica a la mía, y busque un lugar en donde esconderme.
Pensé primero en escondites básicos como abajo de la cama o en el closet, pero sabía que esos hombres entrarían a todas las habitaciones. Tomé una mesita de noche de color blanco, bastante grande. Esta tenia una puerta del lado de afuera y en su interior estaba llena de estantes. Saqué estos del interior, ya que que eran removibles, y los oculte debajo de la cama, la cual me ayudó al tener un cobertor ancho que llegaba hasta el piso.
Estaba decidido a entrar en el estrecho interior de aquella 'caja', cuando recordé algo. Me aleje de ella y destrabe el seguro de la puerta para permitir el libre paso sin necesidad de romperla, si la puerta se encontraba cerrada sabrían que ahí me estaba ocultando. Y ya una vez más tranquilo entre en la mesita, acurrucando mis piernas contra mi pecho con mucha dificultad y con mi mano libre cerrando la puerta. Me encontraba encorbado e incómodo en tan pequeño lugar. Uno de mis brazos, que era el que estaba al contrario de la puertilla, estaba enroscado en mis piernas y en el posaba mi cabeza.
Mi respiración seguía agitada y entrecortada, los gritos se escuchaban notablemente más lejos pero no por eso iba a relajarme más. Sentía una fuerte presión en el pecho que subía casi rasgunandome la garganta, esto causa dolor y molesta, trague saliva al sentir esa presión. Mi cuerpo comenzó a temblar nuevamente haciéndome sentir oleadas y escalofríos por miedo. Sentía mucho miedo, no sólo por mi, sino por mi gente. Ellos, al igual que yo, soportaron demasiado y sufrieron injustamente. Apenas nos estábamos recuperando de lo sucedido durante el mandato anterior y otra vez vuelvo a caer, Argentina vuelve a caer.
No quiero volver a experimentar esto, sentirme tan débil y vulnerable, sin poder hacer absolutamente nada por ellos es lo peor. Soy lo peor. Les prometí algo de lo que ni siquiera yo estaba seguro de cumplir, aquellas palabras llenas de dolor y manchadas de amargura no sirvieron para nada. De nuevo, todo volvió a suceder, casi tan grotesco como la última vez. No quiero volver a sufrir asi, mis grietas estaban sanando poco a poco convirtiéndose en sólo cicatrices blancas, pero ahora, todo esta volviendo a lo que era antes. Me senti demasiado tranquilo y confiado de que nada iba a pasar, de que todo iba a estar bien. Nada es para siempre y eso lo aprendí durante toda mi historia, pero... No se que como reaccionar ahora.
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Potencia (C.H.) 2da Dictadura Argentina [Pausada]
General FictionUna nueva dictadura se instala en Argentina reavivando el dolor de muchos de sus recuerdos. Las cosas mejoran económicamente para el, pero ¿a que costo? ¿Realmente tendrá que pararlo o dejarlo seguir con sus planes? ¿Experiencias como estas cambiará...