Son las de 6 de la tarde y me dirijo a la cafetería a la que he ido desde que trabajo por aquí a pedir lo de siempre, un expreso y una tostada.
Buenas tardes ingeniero ¿Lo de siempre? Me pregunta la cajera.
Yo respondo que si.Ya con mi expreso y mi tostada empiezo a revisar mis tareas pendientes del trabajo y luego reviso mis redes sociales, sin perder de vista la entrada de la cafetería esperando que ella llegue. No pasó mucho hasta que la veo entrar.
Mientras la miro cruzar, noto que que lleva puesto un pantalón rosa muy olgado una blusa de cuadros y una bufanda, podía variar mucho su forma de vestir pero nunca faltaba una bufanda en su vestuario, también tenía el cabello recogido y sus lentes dorados que la hacen ver intelectual, adicional a ello su maleta negra de dónde la mayoría de veces que la veía saca un libro no es alguien que al parecer le da importancia a estar en tendencias de moda.
Su ropa holgada no muestra su figura, en todo el tiempo que la he visto jamás ha llevado algo provocador, aunque se nota que no es ni muy delgada ni con kilos demás y si así lo fuera no tendría porque ocultarlo, a veces pasa por mi mente que usa ropa así porque se acompleja, pero luego pienso que es porque quiere tener un estilo propio.
Su rostro es delicado un poco pálido con un par de imperfecciones como cualquiera, al parecer no es de las chicas que les gusta el sol, sus labios son rosa natural aunque a veces usa colores oscuros que hacen que su rostro se vea aún más pálido.
Sin embargo, sus ojos son lo primero que puedes notar en ella, son de un café claro que se iluminan cada vez que le hablan de las variedades del café, y más aún cuando termina de leer un libro, hay veces en que los finales le provocan un par de lágrimas pero se las seca pronto para evitar que alguien la mire, luego sonríe respira fuerte y es ahí cuando su mirada es como si abriese las puertas de su alma, cuando la miro puedo sentir que es de las personas que no ocultan cosas, que dan paz solo con mirarla fijamente aunque las cosas no vayan bien.
Como un ritual, siempre pasa junto a mí saludando con una sonrisa sin una sola palabra y yo correspondo de la misma manera es como si la cafetería planeara nuestra llegada, siempre dos mesas una en frente de la otra a esa hora estan libres.
Aún no me atrevo a hablarle pero cada vez que estamos ahí espero a que termine de leer su parte diaria del libro mientras disfruta una bebida y el postre del día, aunque algunas veces no lee nada solo se pone sus auriculares y escucha música en su celular, luego se va y detrás de ella yo, me pregunto cuál será su género musical favorito, hay tantas cosas que quisiera saber de ella pero quiero esperar el momento perfecto para acercarme.
Quizá ese momento sea esta tarde....
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Cuando te miro
Teen FictionEstamos convencidos y limitados a mirarnos de una forma que no notamos aquellas cosas que nos hacen únicos. Esta es la historia de una joven que creía no ser de aquellas mujeres que llaman la atención, pero hubo alguien que notó algo diferente.