Lord El-Melloi II había caído en un profundo sueño. Había estado trabajando muy duramente el día anterior, desde el momento en que fue comunicada la horrible noticia de la Guerra de Resurrección.
Aquella horripilante noticia le hizo revivir viejas heridas que ya consideraba cicatrizadas, trayendo antiguos recuerdos a su mente. Recuerdos y sueños que no le dejaban dormir y que le atormentaron desde el mismo momento en que se enteró.
Había tenido varias dificultades cada vez que cerraba los ojos tratando de conciliar el sueño. Lo intentó una y otra y otra vez, pero todo intento por desconectar era imposible. La semilla del mal se había implantado en su cabeza como un árbol maldito del que se deshizo una vez y que ahora, las semillas de este habían dado a luz a uno nuevo, más grande y fuerte.
Trabajó y preparó todo lo que el podía considerar importante por el día y la noche.
Debido a sus dificultades para dormir, decidió trabajar un poco más, revisar todo lo que había hecho durante la mañana. Lo revisó más de una vez y reflexionó los posibles errores que podría haber cometido.
Al final sabía que todo eso podría acabar con él antes de que comenzase la Guerra Resurrección, así que trato de desconectar y distraerse. Si no podía dormir se entretendría con cualquier cosa que le hiciese olvidar y despejarse.
Cuando se cansó pudo lograr dormir, por eso, ahora se encontraba en el maravilloso mundo de Morfeo. Sin embargo, algo le hablaba.
— Maestro, maestro por favor despierte.
— Onii-sama, debes levantarte. Vamos no puedes hacer perder el tiempo a tu invitado.
Eran las voces de Gray y Reines que le pedían que se despertase.
Poco a poco sus ojos se fueron abriendo, llenándose de la luz que invadía la sala, la luz del día que entraba por la ventana... Parecía tan fuerte y cegadora que solo abrir los ojos producía una molestia. Ahí estaban de pie observándole su aprendiz y la heredera de la familia El-Melloi, viendo con atención y pidiéndole que se despertase.
— ¿Qué sucede? ¿Qué hora es?
Preguntó aturdido por el cansancio.
— Son las 10:21, había quedado con Hidar Gyuk. Recuerda.
— Las 10:21...¡Las 10:21!
Repitió escandalizado. Rápido se puso en pie y fue a ponerse lo más formal. — Que mal, que mal, que mal ¡Oye! ¿Por qué no me despertaron antes?
— Eso es lo que estábamos tratando de hacer...
Dijo mirando al suelo Gray como si se rindiese de explicarle lo sucedido.
— Rayos, te quedaste hasta tarde jugando a videojuegos ¿No es verdad onii-sama?
Preguntó Reines tratando de confirmar sus sospechas.
— Estuve trabajando muy duro, necesitaba desconectar por lo que no tuve una noche muy fácil.
Explicó.
— De todos modos ¿Qué hacen ustedes aquí?
Preguntó mientras se terminaba de lavar la cara.
— Qué por qué. Qué grosería onii-sama, no es acaso evidente, porque yo también vivo aquí. Además, tenía curiosidad por ver cómo era ese tal Hidar ¿Verdad que tú también Gray?
Gray asintió a la pregunta de Reines. Lord El-Melloi II se llevó la mano a la frente mientras decía lo que pensaba.
— No tengo tiempo para esto. Como sea, pase lo que pase no quiero que salgan. Quiero entrevistarlo a solas como es debido.
ESTÁS LEYENDO
Fate Resurrection Vol.1
RandomLa historia transcurre dos años después del final de la linea de Fate UBW, un nuevo Grial ha sido creado con la intención de remplazar al anterior y al que llaman Grial de Resurreción. Sin embargo, las nuevos normas de la Guerra por el nuevo Grial r...