18-Segunda prueba

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A la mañana siguiente era la segunda prueba del torneo.

Esa prueba consistía en salvar a una persona que aprecias del fondo del largo negro en menos de una hora. Hora en la que, por supuesto, tenías que estar bajo el agua.

Antes de que los campeones fueran al lago, Draco entró a la carpa de estos y se acercó a Harry, que estaba distraido por la tensión de que de él dependiera la vida de su mejor amigo.

"Harry..."

"Hey Draco, ¿que haces por aquí?"

"Yo...sé que no puedes perder esta prueba, porque entonces Weasley moriría."

"No me lo recuerdes, anda, que ya estoy bastante nervioso"

"Bueno....sé que dije que quería que perdieras..."

"¿Eh? Ah, ya, en la torre de astronomía"

"Supongo que...ya no sirve, ¿No?"

"No te creas. La otra prueba la pasé porque quería salir rápido de allí. En esta con que salve a Ron tengo bastante. Puedo quedar el último, si eso hace que te preocupes menos por si muero en la última prueba. Dicen que el peligro aumenta con cada prueba."

Draco se sorprendió ante lo dicho por su novio. Él, en el lugar del moreno, lo daría todo por ganar. Aunque, pensándolo bien, Harry no tenía ningún padre que le obligara a ser el mejor en todo. No tenía ningún padre, en realidad.

"No....no quiero que se metan contigo por no llegar ni a la final"

"Lo hacen de todas formas"

El chico se encogió de hombros, poniendo una mueca triste. Una de las pocas personas que le quedaban en Hogwarts era Draco, y si que no pasara le hacía feliz, así sería. No le importaba una mierda el torneo que había hecho que perdiera a sus amigos.

Draco miró al joven frente a él. ¿De verdad se estaba planteando perder en la prueba más grande de la historia estudiantil de la magia por él? Si eso no era amor, nada lo era.

"Harry, vas a ganar. Quieras o no. Porque te lo mereces, después de toda la mierda que te han metido en lo que llevamos de año."

"Pero...¿Y tú?"

"Podré aguantar, pero solo si no mueres. ¿Trato?"

Draco le extendió la mano y Harry la estrechó, sonriendo.

"Trato."

Después de esto ambos chicos se abrazaron.

Dumbledore entró a la carpa para avisar a los campeones de que ya les tocaba salir y vio la escena tan bonita de los dos jóvenes.

Al hombre le recordó sus años mozos y los miró con ternura, esperando sinceramente que ese amor fuera más sincero y puro que el que su amante sentía por él. Lo último que le faltaba al joven Harry era un corazón roto.

"Potter, ya te toca" le comunicó con voz suave. "El señor Malfoy podrá verle desde el muelle."

Los dos chicos se separaron y el moreno le sonrió al anciano, confiado.

"Vamos a salvar a Ron"

Los dos chicos se miraron una última vez, demostrándose con una simple mirada lo mucho que se querian. Draco salió de la carpa y se fue junto al público que apoyaba a Potter. Todo Hogwarts sabía ya lo suyo, así que a nadie le sorprendió.

Los campeones estaban en el borde del lago, junto a Dumbledore.

Harry miró las branquialgas que Neville le había dado y recordó sus palabras: "No sé que efectos puedan tener en agua dulce".

Con Severus mirando (Drarry)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora