Aun no se creía que se estaba preparando para ir a Midgar por ___. Miró su maleta. Había bastante ropa Midgardiana y su túnica favorita, por si se le presentaban los vengadores. Había cogido también su cetro, que se había hecho mas pequeño mediante un hechizo. Lo miró. No se fiaba de dejarlo allí. Lo convirtió en un anillo dorado con una joya azul y se lo puso.
No le hacía falta meter ahí su túnica, ya que podía ponérsela con magia, pero era para recordarle a ___ que seguía siendo un dios que merecía respeto. De hecho, por eso no se había preocupado de poner el casco también.
Salió de su habitación y se dirigió a la de ___. Ella no tuvo que hacerse la maleta, ya que toda su ropa se había quedado en Midgar. Solo tenía que coger a su gato, Crookshanks.
- ¿Ya estás?
- Desde el momento en que me dijiste de volver a Nueva York.
Loki se estremeció. Le gustaba verla tan feliz, pero él se arriesgaría bastante a cambio.
- Bueno, vamos... - suspiró.
No fueron por el Byfrost. Loki no quería que Heimdall supiese a donde iban porque no se fiaba de él. Sabía que acabaría diciéndoselo a Odin o a Thor, y si Thor se enteraba, se acabarían enterando los vengadores. No quería llamar la atención.
En su lugar fueron por una de las salidas secretas de Loki.
Llegaron al piso de ___. Estaba igual que como li habían dejado la última vez.
Crookshanks saltó de los brazos de su dueña y se puso a recorrer su conocido hogar. ___ sonrió al ver de nuevo su casa, y Loki la miró temiéndose lo peor.
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Destinados | Loki y tu |
Science Fiction___, es una mujer tan astuta, ingeniosa, avariciosa... Loki se encuentra con ella y empiezan una batalla para ver quien es mas malo. La enemistad les lleva a algo mas que un concurso.