Yoongi❤ Especial

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Soy reservado no lo tomes personal,
Tanta cursilería me suele incomodar.
Si me quedo sin palabras no es intencional,
¿Como expresar algo que yo no se explicar?,
Pero lo voy a intentar.
Te amo tanto, tanto que siento tonto, tonto que me duela tanto cuando tu no estás
Te amo tanto, y para que imagines cuanto, cuenta todas las estrellas y súmale una más.
—Tanto, Jessie y Joy ft. Luis Fonsi

Yoongi se encontraba indeciso balanceándose sobre sus pies, sin saber si acercarse o no a la chica que se encontraba sentada a la orilla de la playa, mirando como el cielo parecía una obra de arte mientras que el sol se ponía.

El sabía que la había cagado, si, lo admitía, dudas no tenía sobre ello. Pero había tanto que quería decir, queria tanto disculparse, solo que no sabía como. Sentía que si hablaba se enredaria con sus propias palabras y terminaría siendo todo un desastre.

Hace dos días, se había portado de forma muy grosera, digno de un idiota de campeonato. Había estado trabajando duramente en su estudio, y todos sabían que cuando eso pasaba era mejor no molestar, pues él no se podía concentrar en nada más que en lo que producía en ese momento hasta que estuviera terminado y él estuviera contento con el resultado.

Yoongi tenía 3 días sin salir de su estudio más que para lo esencial; se saltaba las comidas, dormía de 2 a 3 horas diarias, y no le había dirigido palabra a nadie en esos últimos días. Estaba frustrado, había algo que no terminaba de convencerle, y le frustraba en sobremanera que no supiera como arreglarlo o como resolver aquello que tenía su cabeza hecha un lío. Estaba enojado.

____ por su parte, se encontraba muy preocupada por el pelinegro, pues este no daba señales de vida desde hace 3 días, y aunque los chicos le habían dicho que se encontraba trabajando, creía que trabajar 3 días de aquella manera no era sano para nadie. Así que, preparó la comida favorita del pelinegro y fue a verlo.

Tocó la puerta del estudio varias veces, y nadie respondió. Llamó su nombre varias veces, y nadie respondió. Le envió mensajes a su teléfono, y tampoco respondió. Así que siguió tocando, hasta que un alterado Yoongi abrió la puerta:

—¿Que quieres? —preguntó seco y tajante. Su semblante lucia caído y ojeroso, se notaba que no había estaba durmiendo.

____, ante la dureza en la voz del contrario, no sabia que decir, sintió un dolor instaurarse en su corazón que decidió ignorar.

—Yo... te preparé comida, quise venir a traertela —respondió nerviosa la chica.

—No tengo hambre, estoy trabajando —nuevamente, aquel tono de voz era tajante y rudo.

—Lo siento...

—No te preocupes, adiós.

—Adiós...

Y así, sin más, le cerró la puerta. La chica decidió marcharse de inmediato, intentando no mostrar lo afligida que estaba y lo mucho que aquello le había afectado, decidiendo que no valía la pena, o de eso se intentaba convencer, pues al llegar a su casa lloró como niña pequeña.

Yoongi esa noche la pasó en vela, pues la culpa estaba carcomiendo cada uno de sus pensamientos y consumiendolo. ¿Por qué había hecho eso? ¿Por qué la había tratado de aquella forma? Se había portado como el patán más grande del planeta con la chica que amaba cuando esta solo había querido hacer algo bueno por él. Sólo que no estaba pensando en ese momento, la frustración y el enojo lo estaban sobrepasando y terminó pagandola con ella. ¿Por qué no media el efecto de sus palabras? ¿Por qué había hablado estando enojado? Se sentía terriblemente mal.

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