Namjoon❤ [3]

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Yo se, que cuando me mira a los ojos ya no se ven tan brillantes, no más, no más.
Yo se, que ella me amo en algún momento, lo que le prometí esa noche cruzó mi corazón, y espere no morir.
-I know what you did last summer

Nam se encontraba en la estación de tren, esperando ansioso porque su novia desembarcará. Dios, la habia extraño tanto. Esos dos meses le habían parecido una eternidad sin la chica que amaba a su lado.

Por eso, había pasado por una floristería y había pedido el ramo de flores más grande. Después se arrepintió un poco del tamaño, ya que difícilmente podía cargarlo entre sus brazos, pero estaba haciendo su mayor esfuerzo por ella, porque la amaba. De solo imaginar la sonrisa que pondría en su cara al verlo, los besos que le daría, y el abrazo que lo acompañaría, hacía que todo valiera absolutamente la pena.

Lo hacía por ella.

Sus nervios aumentaron al ver el tren que empezaba a detenerse justo en frente de donde él estaba parado. Finalmente la vería.

Su sonrisa se ensanchó en su cara y reafirmó el agarre sobre el ramo. Los pasajeros comenzaban a descender por las escaleras y el comenzó a buscar entre la muchedumbre aquella chica que lo traía loco.

La chica miraba a todos lados, buscándolo a el tal vez, ya que le había dicho que iría a recogerla, y una sonrisa se plantó en la cara de ambos al conectar sus miradas. ____ corrió como pudo hasta su novio que la esperaba ansioso, intentando esquivar a las personas que estaban frente a ellas sin ser muy brusca para encontrarse con los brazos del chico que amaba.

Al llegar y encontrarse a menos de 1 metro de él ambos rieron, el gran ramo no dejaba que se pudieran abrazar como lo harían los protagonistas de cualquier película romántica. Definitivamente, debió comprar uno más pequeño.

Aun entre risas, Namjoon depositó el ramo en el piso y dio un paso al frente; ya verla ante sus ojos le parecía casi que irreal. Había pasado 60 días añorando ese momento, así que tocó su cabello para asegurarse que era real, y lo era. Un grito de felicidad salió de los labios de la chica, quién, no espero más y se abalanzó al mayor, rodeando con sus brazos su cuello y con sus piernas su cintura.

Namjoon se sorprendió un poco por el gesto, pero la atrapó colocando sus manos por debajo de sus muslos, sosteniendolos, para evitar que cayera, y se escondió en el cuello de esta, aspirando el aroma que tanto le encantaba:

Coco.

Se quedó oculto allí, mientras repartía tímidos besos por la piel del cuello y sus manos se desplazaban por el cabello de la chica. Ella estaba ahí.

—Bienvenida, amor —murmuró el pelirubio contra el cuello de su novia, provocando que descargas eléctricas recorrieran el cuerpo de la chica al sentir el aliento caliente sobre su piel.

—Hola, amor —susurró la chica, alejando su rostro para ver el del hermoso chico que estaba frente a ella.

Sus ojos se conectaron, y la chica intento apartarlos, porque sentía que vería su alma. Nam la bajo, colocando sus pies en el piso pero sin romper el abrazo, sin alejarse el uno del otro, y tomó su barbilla para poder verla a los ojos.

Notó algo extraño en sus ojos, pero no lo dijo, creyó que solo era debido a los días que había pasado sin verla, así que le resto importancia. Centró sus ojos en los labios que estaban frente a él, esos que había pasado tanto tiempo sin besar y que deseaba y extrañaba tanto, y sin poder resistirlo ni un segundo más, la beso.

BTS One ShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora