Capítulo 24: Sorpresa, amarga y triste sorpresa.

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Quiero que miren mi nueva portada ¿No es linda?
Gracias a JosefinaPizarro2 por esta bonita ilustración en la que puso un montón de su tiempo.

Gracias, muchas gracias.

No puedo evitarlo esta vez y la sigo, aunque es muy rápida y la pierdo ante la multitud y las grandes paredes del lugar, me siento lejos de todos mientras me desvanezco en suspiros

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No puedo evitarlo esta vez y la sigo, aunque es muy rápida y la pierdo ante la multitud y las grandes paredes del lugar, me siento lejos de todos mientras me desvanezco en suspiros.

Dirijo mi mirada a los de la mesa y luego a Sophia quien disfruta de la fiesta abrazada de su esposo, el magnate al que creímos que era solo un chófer, la verdad se ven muy felices, me alegro por ellos, aunque siento un poco de lástima por él, al parecer ahora parece ser una gran señora, lamentablemente sigue siendo la niñita caprichosa de siempre.

Voy por un whisky, no necesito y no quiero estar con todos mis sentidos, bebo del dorado alcohol, baja suavemente por mi garganta creando un suave y excitante ardor. Lo necesitaba... A este punto seré un vagabundo alcohólico más, que se la pasa sucio y desalmado en las calles llorando por el amor de una mujer, que se alejó un día.

Miro con más atención que Santiago se siente incómodo, quiere irse de aquí, la mirada de él se cruza con Sophia, y esta lo mira con algo de ¿Tristeza? No es capaz de sostenerle la mirada ni un minuto, él se pone de pie, le dice algo en el oído a Hannah y se dirige a la puerta, se ve muy irritado e iracundo.

A él si puedo seguirlo y lo hago...

–¿De qué me perdí?– Le pregunto cuando voy a su espalda.

–Tengo dolor de cabeza y quiero ir a descansar al hotel, eso es todo– Me dice mientras toma su frente con la palma de su mano.

–¿Quieres que te acompañe?

–No, la verdad no– Sentí como se le escapaba el aliento –Me regresaré a casa esta misma noche.

–¿Por qué?

–Fundamentalmente porque conocerlos ha sido un error, voy a perderlo todo solo porque mi curiosidad pudo más que mi inteligencia.

–No entiendo.

–Si llega una mujer que conoces con el mismo nombre de tu novia muerta es obvio que te causará curiosidad, todo mi ser me recordó que eso significaba peligro, salí y la vi, estaba nerviosa, no supe quién era, hasta que la atendí, pude dejarla ir, pero solo me acerqué a ella, desde que me acuerdo ella me atrae como un insecto al fuego, y siempre que la sigo termino con el corazón roto y con las manos vacías... Este pobre y estúpido insecto, termina en el infierno de una fogata... Lo peor, sin saberlo eres quien pone los leños secos, y una vez más soy yo el que termina sin nada.

–En serio me gustaría tener alguna idea de lo que estás hablando...

–¿Sabes? Cuando mi Valeria murió, estábamos mal. Ella y yo nos distanciamos, de hecho, lo nuestro había muerto desde hacía un tiempo, pero su madre confiaba en que me casara con ella, después de todo yo pagaba su colegiatura, quizás era ambición o era miedo de que ella no lograra nada... Ya no lo sabremos, para todos éramos una pareja que se amaba y por dentro solo dos personas con un pasado en común... Un día traje una bebé a casa diciendo que era mía y ella solo se marchó, harta de su madre y de mí, no la vi por meses... Y entonces, una llamada, paseaba ebria en con su nuevo novio en el mismo estado, chocaron con un taxi que llevaba una familia, el conductor murió, la mujer y los niños se salvaron por poco de la muerte...

¿Eres Mi Perdición O Mi Salvación?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora