Smile ➳ Jaemin ; Terminada

Azúcar ♠️ 1973

"Cada día me cuentas tus historias
Incluso si me dices que las olvide
No estoy segura de que pueda
No rompas nuestro sueños
Porque te convertiste en una estrella brillante en mi corazón." - Don't say goodbye (Rocoberry & Doyoung)
Es hermosa~

Jaemin

—¿Qué habrá pasado? —Pregunté intranquilo mordienme las uñas al notar que el tiempo pasaba, que cada vez que el reloj marcaba un nuevo minuto, Jeyla no aparecía en la estación—. ¿Por qué no ha llegado? De Seúl a aquí es una hora y ella se puede transportar en segundos... ¿LA HABRÁN ENCONTRADO? ¿LA RAPTARON? ¿SE LA LLEVARON LEJOS DE MÍ? ¡ELLA SÍ ME ADVIRTIÓ QUE LO NUESTRO ERA PROHIBIDO Y...!

Sentí la presencia suave y sanadora de Renjun en mi cuerpo, casi pude percibir su toque físico en mis hombros, intentando relajarme.

—Ella va a estar bien. Estoy seguro que Donghyuck no dejará que le pase nada.

—No sé, Renjun. A mí él no me da buena espina. —Dijo Jeno recargando el auto de combustible un poco serio. De hecho, su sonrisa había desaparecido hace mucho.

—¿Por qué?

—Sí, ¿por qué? Él es un chico muy dulce y brillante, casi como el sol. Además tiene a Mark, que lo cuida muchísimo.

Jeno levantó una ceja ante la anotación de Renjun pareciendo un poco frío y rudo, después se tomó su tiempo terminando de recargar el auto. Sacó algunas monedas que le entregó al hombre de la estación y volvió a nosotros con el ceño fruncido. Realmente había pensado todo lo que iba a decir.

—Pónganse en mi posición. Yo a duras penas puedo interactuar con Renjun, sé que tú tienes tu habilidad esa extraña... —inmediatamente miré a todos lados esperando a que nadie le escuchara, todo estaba vacío. Sin embargo me enfurecí ¿Cómo podía ser tan imprudente?

—Ten más cuidado con lo que dices, Jeno —se adelantó mi ángel guardián totalmente serio.

Aquello inmediatamente calmó la actitud de Jeno. Su mirada reflejaba un poco de culpabilidad, y en realidad fue capaz de sacar un espejo y acercarse hasta Renjun quien estaba sorprendentemente cerca mío, creo que tomó su rostro con delicadeza y asintió. Sus ojos estaban tan tristes...

—Perdón, perdón. Pero nuevamente les pido que se pongan en mi posición —me miró también a mí—. Empecé a notar a Renjun de un momento a otro, y después aparecen estos pseudo-humanos con traumas del pasado que nos atacan y me dicen que hay un ángel mensajero con uno de ellos... Después Renjun también me contó que una vez ese tal Donghyuck atacó a Jeyla y al ángel... No sé, pero todo esto es muy raro y mi cabeza ha decidido que, tal vez el ángel no lo cuida a él, sino que nos cuida a nosotros de él... Simplemente mi cabeza ha decidido que no es de confiar.

—¿Quién no es de confiar? —Preguntó aquella hermosa voz que me hacía querer no dormir nunca tan solo para escucharla por siempre.

Jeyla venía caminando con una camisa blanca, una falda larga y unas botas sin tacon. Totalmente distinta a como solía vestir, incluso lo único que quedaba de su maquillaje era su prominte labial rojo.

No tenía su sombrero.

Ella salió corriendo totalmente feliz a abrazarme y claramente, yo la recibí agradecido de volverla a tener a mi lado apretandola con fuerza contra mi pecho. No quería volver a dejarla ir nunca, sobre todo cuando su presencia calma a cualquier cosa por más preocupante que fuera.