Capitulo 12 : especial JonDami

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Damian tenía 6 meses de embarazo y su humor si bien ya era bastante corto, había empeorado desde que le habían prohibido el patrullar o combatir al crimen, el estar como ayudante de Alfred o en su defecto pidiéndole las cosas a este. Definitivamente Damian Wayne mataría a cualquiera que se atreviera a felicitarlo por su embarazo por que no era manera de estar feliz.

- La escuela estuvo horrible... – Habló Jon quien apenas llegaba de metrópolis, este se encontraba viviendo permanentemente en la mansión por una cortés y para nada amenazante petición que hizo Alfred a los amos de la casa, la cual no se pudieron negar.

- Al menos puedes ir sin que te miren por estar gordo. – Aseguró el ojiverde a la vez que observaba al contrario y como este comenzaba a desvestirse. Odiaba que su cuerpo hubiera cambiado y no él del mocoso de su novio.

- No lo creas... – Observó al mayor con una suave sonrisa. – Según sé el rumor, cierto chico fue a amenazar a toda mi escuela de que no se fijaran bien pues "Jonathan Kent no sabe usar condón y tiene un omega embarazado" – Comentó bastante divertido a la hora de escuchar aquel rumor sabiendo perfectamente que se trataba de su novio el quien había ido a amenazar. – De hecho ni siquiera Kathy quiso acercarse a mi por unos días.

- Vaya que corre rápido los rumores ¿No? – Aseguró con una sonrisa a la vez que observaba el dorso desnudo de su novio. – Pero para dejar claro no fui yo...

- ¿Entonces quien pudo haber sido? – Cuestionó el chico a la vez que se dirigía a abrazar por la cintura a su mayor.

- Jason... – Aseguró con un pequeño sonrojo en sus mejillas al recordar el cómo Todd lo encontró llorando por un ataque hormonal, maldiciendo a todo ser que se acercaba a Jon en la escuela y sobre todo a la rubia amiga de su Alfa.

- Eso explicaría el por que mencionaron las pistolas. – Aseguró el ojiazul a la vez que besaba la mejilla de su novio. – Yo te imaginaba con tu espada yendo a amenazar a todos.

- Ganas no me faltaron Kent es sólo que... Padre no me deja salir más que a ir a dar unos exámenes a la universidad.... teme que me pase lo que a Roy... – Explico acariciando el dorso desnudo de su pareja.

- Lo de Roy es diferente... nuestro hijo se encuentra muy bien Dami. – Aseguró con una suave sonrisa la vez que besaba la frente su hijo. – Lo reviso cada vez que me voy y cada vez que regreso, creciendo sano y fuerte...

- ¿Qué he te dicho escanear mi cuerpo? – Aseguró dando un manotazo contra la cabeza de su menor.

- Juro que es solo tu vientre... lo juro...- Murmuró con un pequeño mohín a la vez que descendía hasta quedarse de rodillas y su cabeza apoyada contra el vientre de su pareja, para escuchar los latidos del pequeño bebé que estaba en el interior del contrario. – Es que es tan pequeñito que no me puedo controlar...

- Serás idiota... – Aseguró al momento de apartar el cuerpo del menor del suyo a la vez que le daba una patada y con ello lo debaja expuesto en el suelo. – Ya llegaste... hablamos, ahora me toca a mí. – Murmuró sentándose sobre la cadera del ojiazul.

- D-damian... pero tu padre dijo...

- Y una mierda Kent, el trato era yo te dejo ir a donde quieras sin ponerte reproches como Harper a Todd, y tu haces todo lo que a mi se me plazca y ahora se me place coger contigo. – Aseguró el chico a la vez que comenzaba a mover su cadera contra la del menor.

- S-si... pero...- El menor con un sonrojo en sus mejillas lo sostuvo de las caderas más cuando trato de detenerlo, sus manos se movieron solas (Si claro) para sentir más aquel roce contra su miembro el cual estaba comenzando a despertar poco a poco.

- Claro... que no se te olvide que aun eres un adolescente de 17 años y quien manda en esta relación. – Murmuró el embarazado a la vez que continuaba con su movimiento de caderas.

- Damian manda en esta relación.... -Admitió sumiso el menor, pues podría ser muy alfa dominante, pero no podía negar que Damian era quien llevaba el mando de la relación.

- Buen chico. – El mayor se inclino para besar los labios de su pareja y así cumplir su tan especial antojo.

Mientras Damian comenzaba a usar como un juguete al menor, dentro del despacho de cierto padre sobre protector, había un azabache de ojos azules observando una de sus tantas cámaras de seguridad con ganas de ir a castrar a cierto descendiente Kryptoniano, sin comprender que realmente el que estaba desobedeciendo sus estrictas ordenes era su hijo.

- Creo que deberías dejar de espiar a los chicos. – Habló Superman a la vez que ingresaba desde la ventana del despacho de su esposo.

- No lo hago. – Se apresuro a defenderse en el momento de ser descubierto y apagar los monitores. – Pero tu hijo desobedece las reglas.

- Jon no hará aquello... solo... hacen lo mismo que tu y yo hicimos mientras esperabas a Thomas. – Aseguraba Clark quien había terminado de vestirse.

- Es diferente, yo no soy el bebé de nadie.

- No te conocía esa ... bueno sí... pero los chicos son grandes y tendrán un bebé, debes dejar volar a tu pequeño petirrojo Bruce. – Hablaba con una sonrisa en sus labiales a la vez que comenzaba a masajear los hombros de su amado.

- ¡Pero no así! – Se volteo y encendió el monitor, lo que dejaba ver fácilmente como Jon y Damian estaban teniendo Sexo.

- ¡ALFRED BRUCE PUSO CAMARAS EN EL CUARTO DE DAMIAN! – Exclamó ya bastante traumatizado tras ver como su hijo y yerno estaban haciéndolo.

- ¡Traidor!

- Amo Bruce, al parecer no a aprendido. – Pronunció el mayordomo a la vez que ingresaba sin permiso al despacho de su jefe.

- Y-yo... solo no quiero que a Damian le pase lo mismo que a Roy. – Aseguró confiado de que con eso estaría salvado, puesto apenas y un mes atrás Roy casi perdió a su futuro nieto, debido a que Jason se había descontrolado en la cama.

- Nada de eso amo Bruce, a penas los jóvenes amos acaben, desinstalaremos las cámaras. – Volvió a hablar el mayordomo a la vez que miraba de forma reprobatoria a su menor. – Y no crea que se a salvado del castigo.

Damian y Jon continuaron con lo suyo, sin nunca saber que sus padres los habían visto por medio de cámaras, siendo Clark el que prefería olvidar todo aquello y pues el castigo de Bruce... Alfred le prohibió patrullar por una semana y darle por esa misma semana su tarjeta de crédito a Jason por que este debía cumplir con los caros antojos de Roy...

Un amor heredadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora