Capítulo 562: ¡La Zarpa de Bestia lo Desgarra Todo!
—No me importa cuántas almas deva tengas, —gritó la Dama Polvo Rojo—. ¡Ni me importaría, aunque tuvieras una base de cultivo en el Alma Naciente del Dao de los Cielos! ¡Hoy será el día de tu muerte! —El rostro de la Dama Polvo Rojo se estaba retorciendo con tanta furia y locura, que hasta su aura se estaba viendo perjudicada. Cuando gritó, su Avatar Dhármico se hizo más grande, se transformó en una especie de sol que empezó a arremeter hacia Bai Xiaochun.
El verdadero ser de Bai Xiaochun se unió a sus tres clones para intentar defenderse contra este ataque del nivel deva que estaba desatando la Dama Polvo Rojo. Con tan solo un clon menos, todos hubieran terminado asesinados en cuerpo y alma.
Aunque la muerte aún parecía ser algo inevitable, al menos eran capaces de retrasar el funesto final por un poco más de tiempo.
Afortunadamente, fue justo en ese momento que el sepulcro colapsó totalmente, la formación de hechizos de teletransportación se había terminado de cargar dentro del sepulcro.
El resplandor de la teletransportación empezó a iluminarse por todos lados, fueran los túneles, el área de las pruebas de fuego, ¡o el mismo sepulcro!
Quienquiera que aún estuviera vivo estaba siendo envuelto por el poder de la teletransportación.
De vuelta en el reino de las pruebas de fuego, los esfuerzos combinados de Chen Hetian y todos los demás presentes les habían permitido romper la barrera que rodeaba el vacío en el que se encontraban. Pero para su sorpresa, solo se encontraron con otra barrera y otro vacío.
Sin embargo, no era momento de desesperarse, pues la luz de la teletransportación empezó a surgir alrededor de ellos, por lo que todos dejaron salir suspiros de alivio.
—¡Finalmente podemos salir!
—Sí, pero por lo enorme que ha de ser esta formación de hechizos, quién sabe a dónde terminaremos...
—¿A qué le temes? Todos somos miembros del Pueblo Sagrado estaremos bien siempre y cuando terminamos en alguna parte de las Tierras Desoladas...
—Je je. ¿Cómo sabes que no terminarás transportado a las tierras de Alcance Celestial...?
Charlas como esta inundaron el laberinto. Ahora que la teletransportación estaba empezando, todos se sentían mucho más relajados.
Claro, la luz de la teletransportación también estaba rodeando a Bai Xiaochun y a la Dama Polvo Rojo, lo cual hizo que la expresión de Bai Xiaochun se iluminara de alegría, pero los ojos de la Dama Polvo Rojo ardían de furia. Si Bai Xiaochun se escapaba antes de que ella lograra usar todo el poder a su disposición, sería la mayor humillación de su vida. Esto de por sí hacía que su ira ardiera más intensamente que nunca.
—¡¡Tú no te vas a ningún lado Bai Xiaochun!! —rugió. Entonces su Avatar Dhármico empezó a acelerar, conforme se acercaba a Bai Xiaochun, unos estruendos retumbaban, amenazando con convertirlo a él y a todo lo que lo rodeaba en poco más que cenizas.
Cuando apareció la luz de la teletransportación, Bai Xiaochun pensó que ya había logrado aguantar lo suficiente, y finalmente tenía esperanzas de sobrevivir. Pero cuando vio que el Avatar Dhármico aún se movía hacia él, se dio cuenta repentinamente de que su esperanza aún era una vela al viento, ¡el viento de la destrucción inminente!
—¿¡Cómo me voy a morir en este lugar!? —sus ojos estaban tan inyectados de sangre que ya eran de un color carmesí puro, eso incluía tanto a su verdadero ser como a sus tres clones. El verdadero ser de Bai Xiaochun levantó la cabeza, rugió, se olvidó de todo lo que tuviera que ver con cuidar su base de cultivo y su poder espiritual. En este momento, no importaba nada. Si no pasaba de este punto, ¡moriría para siempre!
—¡Conjuro de la Montaña Viviente! —gritó su verdadero ser. A pesar de estar seriamente herido, unos sonidos retumbantes lo rodearon y se transformó en un gigante de 30 metros. Los tres clones repitieron sus palabras al mismo tiempo.
—¡¡Conjuro de la Montaña Viviente!! —¡¡¡Conjuro de la Montaña Viviente!!! —¡¡¡¡Conjuro de la Montaña Viviente!!!!
Los tres clones se transformaron en grandes golems de piedra de 30 metros. Luego, cuando los cuatro golems de piedra se preparaban para defenderse del ataque que se avecinaba, tanto el verdadero ser como los clones volvieron a gritar al unísono, —¡¡Reino... del Pantano!!
Los cuatro golems realizaron un gesto de conjuro y presionaron sus manos contra el suelo del sepulcro, ¡toda el área se convirtió en un pantano acuoso!
De hecho, los límites del pantano parecían extenderse mucho más allá de los límites del sepulcro, hasta el vacío de más allá, aunque este no era un solo Reino del Pantano, ¡sino cuatro!
Cuando los cuatro Reinos del Pantano se expandieron y se unieron los unos con los otros, ¡se convirtieron en una gran ciénaga cuatro veces más grande que la original!
¡Esa diferencia era enorme! Casi de inmediato, hizo erupción un rugido que salía del Reino del Pantano, como si proviniera de eras antiguas.
Tan solo el sonido hizo que el rostro de la Dama Polvo Rojo cambiara, y era tan fuerte que incluso escapó y se pudo escuchar afuera de las pruebas de fuego y por todo el laberinto. —¡¡Sal de ahí mi espíritu de esencia vital!! —gritó Bai Xiaochun, levantó su cabeza y se rio con locura. Su voz estaba un poco áspera, y temblaba físicamente. Su base de cultivo y su fuerza vital se consumían brutalmente, tanto en su verdadero ser como en sus tres clones, pero fue entonces que salió algo de ese pantano, ¡algo que no se veía como las púas de antes!
Se pudieron ver cinco montañas retorcidas, ¡pero verlas de cerca revelaba que no eran montañas!
Era la zarpa de alguna bestia gigantesca, ¡con cinco garras tan negras como la noche!
Cuando las cinco garras se extendieron, se pudo ver que debajo del pantano existía lo que parecía ser un bosque de cabello totalmente negro, ¡debajo del cual había una piel verde!
Sin embargo, debido al tamaño tan descomunal de la garra, ni siquiera un Reino del Pantano cuatro veces más grande de lo usual bastaba para que pasara. Solo las garras podían salir, ¡y entonces se movieron disparadas hacia la palma del Avatar Dhármico!
Si alguien hubiera sido capaz de ilustrar esta escena, se hubiera convertido en una imagen impresionante. Cuando las cinco garras tocaron la palma del Avatar Dhármico, fue la palma la que empezó a temblar primero, y luego colapsó en pedazos. Ese Avatar Dhármico que parecía un sol estalló con una luz radiante y con una onda de choque poderosa que se extendió por todos lados.
Todo lo que quedaba en el sepulcro quedó destrozado, arruinado, con escombros que salieron volando hacia el oscuro vacío que existía más allá.
De hecho, era posible ver que Chen Hetian y los demás estaban a lo lejos, hacía tiempo que se habían dado cuenta de lo que ocurría y observaban todo totalmente conmocionados.
La onda de choque hizo que Bai Xiaochun saliera volando también, su forma de golem de piedra se desplomó revelando de nuevo su verdadera forma.
Su sangre brotaba a chorros, y sus tres clones se convirtieron en unas motas de luz blancas que volvieron a unirse a su verdadero ser. Bai Xiaochun podía sentir que los clones estaban seriamente heridos. La mitad del cuerpo de su clon de agua se había destruido, el pecho del clon de fuego había colapsado completamente, y el peor de todos era el clon de madera, al cual solo le quedaba media cabeza.
Aunque su verdadero ser se mantuvo entero, también estaba seriamente herido. La mayoría de sus huesos se habían hecho casi polvo, y la mayor parte de su carne y sangre habían sido destruidos. Hasta su cráneo estaba agrietado, al borde de quebrarse...
Afortunadamente para él, había usado el Conjuro de la Montaña Viviente justo antes de convocar el Reino del Pantano, de lo contrario no hubiera salido herido, hubiera muerto.
¡Tanto él como sus clones se hubieran convertido en polvo!
A Bai Xiaochun no le quedaba energía ni para para sonreír amargamente. Su visión se estaba nublando, y no podía moverse. También podía sentir que la llama de su fuerza vital estaba a punto de apagarse. Con suficiente tiempo para descansar, el poder de su cuerpo carnal le permitiría recuperarse eventualmente. Pero por ahora, había usado todos los trucos y ases bajo su manga, no le quedaba absolutamente nada.
Chen Hetian y los demás estaban boquiabiertos a lo lejos. Zhao Tianjiao y Chen Yueshan estaban completamente angustiados, y las pupilas de Chen Hetian se habían convertido en dos puntitos. Zhou Yixing por otro lado, se veía bastante emocionado.
—¡Ha llegado tu merecido Bai Xiaochun! —Zhou Yixing no había visto los clones de Bai Xiaochun... en realidad nadie más los había visto. Nadie había podido ver claramente lo ocurrido.
Pero fue en ese instante exacto en el que un estruendo intenso retumbó e inundó el área. La luz de la teletransportación se iluminó de manera deslumbrante y resplandeciente, antes de que Zhou Yixing pudiera siquiera reír, empezó a desvanecerse. Lo mismo iba para todos los demás.
A Bai Xiaochun finalmente lo sujetó completamente el poder de la teletransportación, y también empezó a desaparecer.
—¡¡Bai Xiaochun!! —rugió la Dama Polvo Rojo dando otro paso adelante, su cabello ondulaba a su alrededor dramáticamente.
