Marvel And DC Shits.

Lluvia.

AU! School.

Todas los dardos que el rubio menor disparaba daban totalmente en el blanco, no por nada era de los mejores, por no decir el mejor, del club de arquería.

Su habitación estaba hecha un desastre, sus dos amigos estaban en su casa, por lo que el desorden solo aumentaba, latas de soda y cerveza estaban regadas por el piso de su habitación, Roy estaba acostado en su cama, adueñándose de esta, mientras Oliver estaba acostado sobre el pouf* morado y junto a el, se encontraba Clint, sentado en el piso, apoyado en su cama.
Un bowl de palomitas se encontraba en las piernas del rubio menor, Roy estiraba su mano para tomar un gran poco y comerlas acostado de vez en cuando, mientras que para Ollie era más fácil al tener al rubio a su lado. Se encontraban viendo una película animada que estaban pasando, aunque sonara infantil, a los tres les entretenían ese tipo de películas y se encontraban totalmente inmersos en ella, hasta que el timbre de la casa sonó.
Se miraron entre ellos decidiendo quien iría a abrir, ninguno se quería mover de su puesto, así que, llegando al acuerdo silencioso de no levantarse, los tres voltearon a ver otra vez a la gran pantalla.

Clint lo pensó un momento, afuera estaba cayendo una lluvia torrencial y nadie en su sano juicio saldría, además no esperaba visitas de nadie, los únicos que llegaban de imprevisto eran los dos idiotas que ahora usurpaban su casa y su novio siempre le avisaba, así que pensó que era algún idiota que necesitaba refugio y sin tomarle mayor importancia, lo dejo pasar.

Uno. Dos. Tres. Cuatro veces más.

El idiota que necesitaba refugio ya estaba exasperándolos, así que, resignado, se levanto dejando el bowl en manos del mayor y se dirigió escaleras abajo, tomando un paraguas en el camino, abrió la puerta sin mirar quien era el que tocaba y al instante le tiro el paraguas.

-Deja de joder im-... ¡Oh mierda, perdón! -Cualquier insulto o palabra que el pensó se esfumo al ver a su novio, empapado, con señas de golpes, y con lágrimas cayendo por su rostro.

Jalo al chico dentro de su departamento, y cerro la puerta, lo sentó en el sofá de su casa y corrió escaleras arriba a su cuarto por una toalla, sus amigos lo miraron curiosos y aunque le preguntaron quien era, el simplemente los ignoro, corriendo con la toalla de regreso al sillón.

-Amor, perdón, en serio, no te esperaba, mierda, soy un idiota. -Se disculpaba mientras pasaba la toalla por el cabello del futuro doctor, quien no había dicho palabra desde que había entrado, lo que alertó al arquero, quien tomo el rostro de su chico en sus manos y lo hizo alzar la mirada, todavía estaba llorando y tenía un hematoma en su rostro, lo que hizo que la sangre del rubio ardiera.

-¿Que paso mi terrón de azúcar? -Su tono era suave, tratando de calmar a su inestable novio, quería matar a quien daño a su bebé, definitivamente no descansaría hasta encontrar al imbécil que se atrevió a dañar a su chico.

Las lágrimas de Bruce aumentaron, y se abalanzó a los brazos de su novio, llorando desconsoladamente, entre sollozos empezó a relatar el porque de sus golpes, diciendo como en grupo de chicos lo había acorralado, el solo pudo correr, sin embargo, eso no los detuvo y lo siguieron, lo había molestado y golpeado, dejándolo tirado en la calle, y al único a quien pudo acudir, era a él.

Clint lo escuchaba atentamente, dejando besos en su cabello y acariciando su espalda, el castaño se encontraba sentado en su regazo por lo que era mas fácil abrazarlo. Bruce se sentía protegido en los brazos del arquero, se sentía en paz, se fue calmando poco a poco, se sentía en más tranquilidad estando junto a su novio, tranquilidad que no encontraba en nadie más que no fuera el rubio.

Se estuvieron así un gran rato, Clint dándole palabras de aliento a su chico, abrazándolo y llenándolo de besos y Bruce simplemente dejándose hacer.

-Seria bueno que se de una ducha, puede enfermarse. -La voz de Oliver alerto a los dos chicos en el sofá, el dueño de la casa olvido por un momento que tenia a sus dos amigos ahí.

-Tienes razón, ve a darte una ducha Brucie, te daré un cambio de ropa y prepararé tu té favorito.

El castaño asintió con la cabeza y camino escaleras arriba, cuando escucharon el sonido de la puerta de su cuarto cerrarse, Clint golpeo su sofá con ira mientras sus amigos se acercaban a el.

-¿Los imbéciles lo volvieron a molestar? -Aunque la respuesta a la pregunta de Roy era obvio, los dos chicos necesitaban asegurarse de a quien golpearían.

-Esos imbéciles en serio necesitan una paliza para hacer que sus cerebros.

Sus amigos asintieron con la cabeza estando de acuerdo, Clint subió a su cuarto, el agua de la regadera caía indicando que su novio se estaba bañando, saco un cambio de ropa para su novio y se cambio el también, ya que el castaño había mojado un poco su ropa, pero poco le importaba. Al llegar a la cocina, Roy estaba preparando más palomitas y Oliver estaba terminando de preparar el té, agradecía grandemente a sus amigos. Luego de unos minutos, el futuro doctor bajo las escaleras, con el cambio de ropa, que consistía simplemente en una camisa de Clint, y con una expresión apenada.

-Lamento interrumpir su reunión. -Se disculpo con los amigos de su novio, quienes negaron rápidamente.

-¿Que cosas dices? ¡Siempre eres bienvenido a pasarla con nosotros! -Roy le hablo amigablemente, invitándolo a su maratón de películas disney, el dudo un momento, pero al ver la sonrisa de su novio, asintió.

Pronto, todos estaban en la sala del rubio menor, mirando “El Planeta del Tesoro”, Clint estaba en el sillón grande sentado con Bruce en sus piernas, Oliver se había adueñado del sillón individual y Roy estaba acostado cómodamente en la suave alfombra, todos estaban en un cálido ambiente.

Clint acariciaba el cabello de su novio, que ya había acabado su tasa de té y ahora ambos estaban acostados en el sofá.

El resto de la tarde paso con mas calma, con algunos comentarios gracioso y estúpidos provenientes normalmente del dueño de la casa y el pelirrojo y mucha comida.

Claro esta que al día siguiente, el trio de arqueros había ido a buscar al grupo de chicos que había golpeado a Bruce, y les habían dado una lección que jamas iban a olvidar.

Capítulo dedicado a mi bella ponlasentugorra.